Esa noche no pude dormir, muchos recuerdos invadían mi mente, además me resultaba raro dormir sola, pues cuando habíamos llegado pudimos notar a Rihanna acostada en el cómodo sofá que había frente a el televisor, ambos robados. Me moví, volteando mi cuerpo hacía donde Ekko y Ri dormían, mi amiga parecía feliz durmiendo, como si por primera vez haya conseguido sacarse a Viktor y sus malos años con él de la cabeza. Mientras que Ekko dormía en el suelo, a los pies del sofá, se lo notaba incómodo y se movía demasiado, gruñendo de vez en cuando. Suspire con pesadez al percatarme de lo que estaba a punto de hacer, recargue todo mi peso sobre uno de mis brazos para lanzarle algo al zaunita. Intente con una pequeña piedra que había cerca, de los escombros, le dió en la cabeza pero no consiguió despertarlo. Cogí una de las almohadas y se la lancé, le da en la cabeza pero el golpe fue mas fuerte por lo que se despierta, mirando hacía todos lados, exaltado. Rió cubriendo mi boca, el me mira con cara de pocos amigos.
—¿Que quieres Jinx?— preguntó gritando en voz baja.
—Duerme conmigo, se me hace raro dormir sola... Además no puedo dormir y no se te nota cómodo en aquel lugar.
Él lo pensó un segundo y luego se levantó recogiendo la almohada del suelo y la manta. Camina hacía mi, lanzándome la almohada a la cara, no soy tan rápida por lo que me golpea, a lo que él ríe. Deja la manta a los pies de la cama, sentándose a mi lado, recogiendo mis trenzas con suma delicadeza, se ve que no quería estropearlas. Una vez al acabar recogiendo las dos trenzas la ubicó a mi lado, para que no le molesten. Me eche hacia atrás al mismo tiempo que él, la cama crujió, lo cual me resultaba muy normal. Ekko rodeo mis hombros con su brazo, me acomodé apoyando mi cabeza en su pecho.
—¿Como conociste a Rihanna?— pregunta abrazándome.
—Fue hace un año mas o menos, la ultima vez que pise Zaun hasta hoy, la encontré durmiendo en un callejón, estaba en muy mal estado, pensaba en dejarla allí, pues no le faltaba mucho para que se pudra, pero fue cuando vi a Viktor ingresar al callejón. Me escondí, creía que Vik la iba a cargar y llevar a su hogar para cuidarla, pero dijo en un tono sarcástico:“Vaya, has llegado bastante lejos esta vez, con nada de esfuerzo consigues ir a Piltóver.” y la cargo en su hombro como a una bolsa de papas. Ri se despertó, y me miró pidiéndome ayuda, así que luche contra Viktor hasta derrotarlo y conseguir que ella escapara. No he vuelto a Zaun por Viktor, temo a que quiera a Rihanna otra vez para él.
—Ese tipo representa todo lo que esta mal en Zaun, eso de experimentar con personas es ilegal, pero como allí nadie respeta...
—¿Que te atraía de mi? Nunca fui una chica atractiva.
—Pues...— dice nervioso.— No lo sé, creo que tu personalidad tan explosiva, siempre fuiste una persona muy divertida, también me gustaba ese brillo en tus ojos que aparecía cuando cumplías uno de tus pequeños sueños, como cuando hiciste tu tatuaje. Me gustaba escucharte hablar de tus metas cuando mirábamos las estrellas sobre los tejados de las casas, me gustaba tu sonrisa después de gastarle una broma a Vi, también me gustaban tu mirada carmesí, la que siempre me miraba a mi antes que otra persona. Y tu inocencia y cordura, cuando no te gustaba asesinar hasta que lo hiciste, y cuando hablabas con personas y no con objetos sin vida... Pero esa Jinx no volverá, aprendí a aceptarlo y a querer a la nueva de la misma forma, siempre y cuando no intente matarme — ríe —. Eso era lo que me gustaba de ti, aunque hay cosas que aún conservas.
Nunca imagine que él fuera a decir aquellas cosas sobre mi, aquellas cosas tan bonitas. Volteó mi cabeza hacia su dirección, él me mira, sus ojos cafés brillaban en la oscuridad de la noche, me inclino hacía su rostro, él se acerca al mío con lentitud, acercándose a mis labios para fundirlos en un beso. Me detuve, no se muy bien porque lo hice, pero lo hice, Ekko suspiro con pesadez.
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Abraza el Presente.
Romansa¿Robar? No, eso no era lo que ella hacia...¿Sembrar el caos? Pues eso sería mas acertado, y él lo sabía perfectamente, la cuidaba de lejos, pues después de la perdida de su mejor amigo no estaba dispuesto a perder en un futuro a quien lo volvió loco...