-Narra Janelyn-
Me dirigí hasta el hospital, una vez allí me quedé mirando el edificio. Desde la muerte de mis padres he ido a muchos psicólogos, cada uno fue diferente pero ninguno ha conseguido hacerme hablar. Y no pienso contarles nada. Ninguno de ellos se preocupan de verdad, solo lo hacen por dinero. Malgasto mi tiempo yendo a este lugar. Entonces apareció Alyssa.
Alyssa: Hola
Janelyn: Hola
Alyssa:-mira al edificio- ¿Lista?
Janelyn: No pero terminemos cuánto antes-suspiro y entro-
Entramos y esperamos en la sala de espera, estaba con los cascos mientras esperábamos al psicólogo. Después de un rato el psicólogo salió y nos dejó entrar. Yo me senté como siempre cerca de la ventana, mirando las vistas. No eran tan llamativas pero tampoco eran horribles, además era lo bastante amplio cómo para saltar y dejar de vivir. Estaba tan centrada imaginando esa escena, yo tirándome desde esta ventana. Cuando oí que Richard me llamaba.
Janelyn:-le miro fugazmente y luego miro a Alyssa, estaba callada, mirando a la nada-
Richard: ¿Qué tal has estado, Janelyn?
Janelyn:-me encojo de hombros y vuelvo a mirar por la ventana-
Richard: ¿Te gustan las vistas desde aquí?
Janelyn:-asiento-
Richard: No es muy llamativo, ¿por qué te gusta?
Janelyn:-suspiro y me cruzo de brazos mirando a otra parte-
Richard:-suspira- ¿Algo que me queráis contar? -se apoya en su mesa-
Alyssa: No
Richard:-suspira- Mira chicas, yo solo os quiero ayudar, se que vuestro pasado es complicado y doloroso. Quiero ayudaros a seguir adelante pero si no os queréis ayudar, no podré ayudaros
¿Ayuda? Yo nunca he pedido ayuda. Y no quiero que me ayuden, no quiero que me ayuden si voy a acabar como estoy ahora. Es mejor aceptar que la vida es una mierda y que las cosas no se van a solucionar. Le miré, me levanté y salí de allí. Definitivamente, no volvería a ir allí. Una vez fuera empecé a caminar sin rumbo. Llegué hasta un parque, me senté en uno de los bancos, me puse los cascos, abracé mis piernas y enteré mi cabeza en ellas.Después de un rato sentí que alguien se sentaba a mi lado, pero no me moví. Hasta que alguien me puso la mano en el hombre. Me tensé y me alejé rápidamente haciendo que me cayera. Miré a esa persona que estaba sentada a mi lado, Edward.
Edward: Hola princesa-sonríe-
Janelyn:-me levantó rápidamente y empecé a correr-
Edward: Oye -me coge de la muñeca-
Janelyn:-me suelto- No me toques -grito-
Edward:-sonríe- No has cambiado nada, sigues siendo la misma de siempre
Janelyn: Déjame en paz, te quiero fuera de mi vida -sentí como una lágrima caía-
Edward: Lo siento, cariño, pero yo no quiero que salgas de la mía -sonríe-
Janelyn: Te odio -grito llorando-
Edward: Pues yo te amo, princesa-sonríe-
Janelyn: Déjame en paz, aléjate de mí, te odio -grito-
Edward:-me coge del cuello- Mira Janelyn me da igual que me odies, me da igual que no me quieras cerca de ti porque tú solo eres mía, ¿lo entiendes? Solo mía y mataré a cualquiera que se interponga si hace falta
No podía hacer nada, mi cuerpo se paralizó, el miedo invadió mi cuerpo. Mi mente pasó rápidamente a imágenes de mi pasado. Imágenes dónde Edward me pegaba, me amenazaba. Sentía como mis lágrimas caían una detrás de otra sin cesar. La fuerza que Edward estaba haciendo en mi cuello hacía que mis pulmones poco a poco gritarán de necesidad de oxígeno. Al parecer Edward no lo notaba, mi vista se volvió borrosa, más de lo que estaba. Me estaba asfixiando y no podía más. Entonces caí y lo último que vi fue a un cuerpo en el suelo y otro encima de él. No podía reconocerlos. Hasta que poco a poco todo se volvió negro.
-Narra Luke-
Después de hablar con Nia, fui a dar un paseo. No tenía ningún sitio especial dónde ir, me dejé llevar por mis piernas. Llegué hasta un parque que nunca antes había ido. Pero pensé que sería un buen lugar para reflexionar ya que no había nadie. Bueno nadie hasta que me fijé en dos personas, un chico y una chica. No me iba a acercar cuando oí una voz. Una voz muy parecida al de Janelyn.
Janelyn: Te odio -grita llorando-
Me acerqué y me escondí detrás de un árbol aunque al parecer estaban discutiendo y no se fijarían en mí. Al acercarme me di cuenta que el chico con el que estaba discutiendo Janelyn era Edward.
Edward: Pues yo te amo, princesa-sonríe-
Janelyn: Déjame en paz, aléjate de mí, te odio -grita-
Edward:-la coge del cuello- Mira Janelyn me da igual que me odies, me da igual que no me quieras cerca de ti porque tú solo eres mía, ¿lo entiendes? Solo mía y mataré a cualquiera que se interponga si hace falta
Miré a Janelyn que estaba paralizada y llorando. Edward la miraba cabreado y parecía que no la iba a soltar así que tuve que intervenir. Corrí hacía ellos y empujé a Edward haciendo que caigamos, yo encima de él. Empecé a darle puñetazos, ese hijo de puta no saldrá vivo.
Luke: ¿Cómo te atreves a tratar así a Janelyn?
Edward: ¿Quién eres tú, cabrón?
Luke: Soy amigo de Janelyn y no dejaré que la trates así
Le seguí pegando hasta que se quedó inconsciente. Me giré a ver a Janelyn y la vi tirada en el suelo, estaba más pálida de lo que siempre está. Rápidamente me acerqué.
Luke: Janelyn-la muevo-
Janelyn no se movía, la cargué y corrí lo más rápido que pude hasta parar un taxi.
Luke: Al hospital más cerca que haya, por favor y que sea rápido
Conductor: Claro
Rápidamente llegamos al hospital y se llevaron a Janelyn. La esperé en la sala de espera, no sabía que hacer. Cogí mi móvil y llamé a Calum y le conté lo que había pasado. Y después de la llamada, me senté a esperar por respuestas sobre Janelyn.
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Still in love.
RomanceJanelyn Crawford y Alyssa Ramírez. Son dos primas con un pasado oscuro que les persigue. Las dos deciden irse a vivir a Los Ángeles y así poder empezar de nuevo una nueva vida y poder olvidar al menos su oscuro pasado. ¿Cuál será la historia de su o...