Still in love.

Capítulo 40

*Pasa una semana*

-Narra Calum-

Ya había pasado una semana y por fin iba salir de esta cárcel. Los chicos vinieron a recogerme y no podía ponerme de vacaciones porque mañana empezaban los exámenes. Fuimos a la casa de Micahel y sacamos todo. Los chicos me habían ayudado mucho esta semana. No sabía nada de Alyssa. Estaba preocupado, no sé porque, tampoco me había venido a ver, pero Micahel me había contado que vino la vez que me ingresaron, cuando seguía inconsciente.

Ashton: tierra llamando a Calum -pasa su mano delante de mi cara-

Calum: lo siento, ¿decías?

Michael: ¿en qué mundo estás?

Luke: aquí no está, ¿sigues pensando en Alyssa?

Calum: sí, pero da igual, sigamos

Ashton: ¿seguro? Si quieres, podemos descansar

Calum: no, tranquilos, mañana empiezan los exámenes y necesito aprobar

Michael: está bien, sigamos entonces, ¿por dónde íbamos?

Luke: mejor descansemos un poco, que llevamos todo el día estudiando, necesitamos descansar un poco

Michael: ¿queréis algo para beber?

Luke: agua

Ashton: yo también

Michael: ¿Calum?, ¿agua también? -me mira-

Calum: sí, por favor

Michael bajó y mientras esperábamos, yo me puse con mi móvil. Estaba pesando si mandarle un mensaje a Alyssa, tampoco sabía si me iba a responder, pero que no nos hablemos no significa que no me preocupe por ella. Le mandé un mensaje preguntándola que tal estaba, pero pensé que la iba agobiar así que le mandé otro pidiéndole perdón después otro diciéndole que ya la dejaba en paz y de allí ya paré porque a lo mejor ya la había agobiado. Michael volvió con una jarra de agua y con algo para comer.

Michael: ¿con quién hablabas? -me mira-

Calum: nadie

Ashton: ya, claro, ¿Alyssa?

Luke: pensé que no os hablabais

Calum: y seguimos sin hablarnos

Michael: ¿entonces?

Calum: nada, mejor pongámonos a estudiar

Luke: sí, venga, vamos

-Narra Alyssa-

Una semana. Ya había pasado una semana desde lo que le pasó a los chicos. Estaba en mi habitación estudiando ya que mañana empezaban los exámenes. Me quedé super pensativa hasta que alguien tocó la puerta de mi habitación. Era Janelyn. Entró y se sentó en mi cama.

Janelyn: ¿qué tal lo llevas?

Alyssa: ¿el qué?

Janelyn: no sé, todo -se encoge de hombros-

Alyssa: -miro a la ventana- sigo preocupada a donde pueden llegar Jayce y Edward -suspiro-

Janelyn: no deberíamos de haberles hablado desde un principio

Alyssa: ya -suspiro y la miro- ahora es mejor así

Janelyn: es por su bien

Alyssa: sí

Janelyn: ¿y el psicólogo?

Alyssa: -me encojo de hombros-

Janelyn: no tienes por que ir si no te ayuda en nada

Alyssa: ya, no sé -me encojo de hombros- so, ¿tú y Diego?

Janelyn: -ríe- tranquila, no somos nada

Alyssa: es la primera vez desde hace mucho tiempo que te veo reírte de esa forma

Janelyn: ya -se encoge de hombros-

Alyssa: parece un buen chico

Janelyn: sí, no sé, pero a mí también me sorprende que pueda hacerme reír tan fácilmente

Alyssa: me alegro la verdad -la sonrío- bueno, ¿qué tal los estudios?

Janelyn: allí vamos, avanzando, ya sabes, ¿y tú?

Alyssa: bien, acaba conmigo, pero necesito aprobar al menos

Janelyn: ya somos dos

Alyssa: nosotras podemos

Janelyn: always -sonríe- cuando acabemos los exámenes, salimos de fiesta si quieres

Alyssa: wow, desde cuando tu sales de fiesta -río-

Janelyn: ¿qué? 

Alyssa: suena raro viniendo de ti

Janelyn: de alguna forma habrá que celebrar que han acabado los exámenes

Alyssa: ya, también

Nos quedamos un rato más hablando hasta que Janelyn se fue a su habitación ya que ella tenía que estudiar también. Me puse con mi apuntes hasta que mi móvil sonó. Era un mensaje de Calum. Pasé y seguí con lo mío. Mi móvil sonó otra vez y así cada dos por tres. Cogí mi móvil y miré los mensajes.

Calum: hey

Calum: sé que me habías pedido espacio, pero quería saber como estás

Calum: por cierto, gracias por haberme visitado la otra vez, Michael me dijo que habías venido

Calum: por favor Alyssa, solo necesito saber si estás bien

Calum: bueno, mejor no te agobio, seguramente estés estudiando, lo siento

Calum: mejor ya te dejo en paz

Me quedé mirando sus mensajes y no sabía si contestarle. Sé que se preocupa, pero lo dejé así de momento. Sin contestarle. Seguí estudiando y miré la hora. Ya iban a ser la una de la madrugada. Recogí todo y  fui a mi cama a tumbarme. Cogí mi móvil y me puse a mirar twitter hasta que me quedé dormida.