Percabeth...Nunca Fuiste Tu

No de nuevo

Después de quejarse silenciosamente de lo injusta que era su vida Annabeth comenzó a considerar las opciones que tenía.
Cerrar la boca y trabajar con el chico al que detestaba
O
Intentar cambiar de compañero de nuevo

Aunque sabía que sería imposible debido a la actitud de Quirón está mañana.

-Pfff... Porque no me matan y listo?-. Preguntó a su manzana diaria y a su emparedado de pavo antes de volver a meter la cabeza en el libro de esa semana.

Terminó de almorzar antes de que sonara la campana y regresó a la cafetería a devolver la bandeja. A lo lejos vio al grupo de Percy y no pudo dejar de sentirse extraña cuando notó que el chico no dejaba de verla.

-Ahora que demonios querrán hacer?-.
-Disculpa linda que dijiste?-. Dijo la encargada de la cafetería mientras tomaba su bandeja.
-Nada es sólo que...-. Miró de nuevo hacia la mesa en la que estaban todos los chicos que alguna vez llamó amigos y no pudo evitar preguntarse como sería su vida si ellos no le hubieran dado la espalda.

-Será mejor que vayas a clase, cariño. Antes de que otra malteada salga volando hacia aquí-. La mirada de la señora Thomas era casi completamente pura lástima hacia ella pero también había algo de aprecio, siempre ponía una galleta extra en su bandeja cuando había de sus favoritas.

-Claro. Que tenga un lindo dia-. Annabeth odiaba con toda su alma que le tuvieran lástima, pero había aprendido a disimularlo.

Salió de la cafetería justo cuando la campana sonó y se dirigió a la clase de literatura con el señor Blofis, el padrastro de Percy.

Y con Percy.

Lo único ligeramente positivo que encontraba en esa clase era que ninguno de los amigos de Percy se encontraba en ella.

Nadie (además de Percy) que le hiciera comentarios groseros o le arrojara cosas (además de Percy).

Aunque usualmente se comportaba en ausencia de sus amigos había días en que era insoportable. Y se era uno de ellos.

-Oye listilla, ¿Cuando tendrás listo el proyecto de historia?-.
-¡Yo no voy a hacer todo sola!-.
-Silencio señorita Chase-. El profesor los miraba desde su escritorio a los dos pero parecía que el comentario no estaba dirigido hacia ella.

-Porque no? Será más fácil, lo haces, le pongo mi nombre y listo, lo entregamos y aprobamos-.
-No es así de fácil sesos de alga-.
-¿Señor Jackson le gustaría dar la clase usted?-.
-No profesor, disculpe es que Annabeth no entendió la tarea. Sólo le explicaba-. La mirada de la rubia parecía querer lanzarle un rayo y eso no era tan gracioso considerando que sus ojos eran color gris tormenta.

-Muy amable de su parte Percy pero sugiero que le explique la tarea cuando la deje-. La clase comenzó a reír incluyendo al señor Blofis, para Percy era natural bromear con el en clase.

-Me soprende de ti. Son simples matemáticas listilla, creí que eras buena en eso-. Dijo inclinándose una vez más hacia ella.

-No lo haré sola y ya cierra la boca-.

.....

Si le hubieran preguntado si se levantó con el pie izquierdo esa mañana diría que se levantó junto a un gato negro y antes de bajar de la cama pasó bajo una escalera.
Después de la mañana que tuvo nada podía empeorarla más que...

-Proyecto en parejas. Jackson y Chase-.

No de nuevo.