Percy no tenía idea de que hacer.
Cuando despertó esa mañana lo único en lo que se preocupaba era en mejorar su tiempo en la piscina y en que Paul no descubriera que él se había llevado todas las galletas que su mamá había horneado.
Pero esto era diferente, ocho horas después se preocupaba por la chica que se encontraba en el asiento trasero de su auto. La misma chica que había sido su mejor amiga hasta los diez años, la misma a la que molestaba todos los días en la escuela y la misma a la que ahora Jason intentaba mantener consciente.
....
La llevaron a casa de Percy y mientras el chico la llevaba en brazos hasta la sala, Jason de inmediato llamó a su amigo Will, cuyo padre era el mejor médico de la ciudad.
-Mamá no esta en casa y Paul tiene reunión en la escuela, no volverán hasta más tarde-. Dijo cuando Jason colgó el teléfono.
-¿Y los empleados?-. Usualmente las casas del vecindario, así como las de todos sus amigos contaban con al menos cinco empleados, entre los que se podían contar: un chofer, un jardinero, un encargado de piscina, un chef y una o dos mucamas.
-Día libre. ¿Cuanto crees que tarden?-. Preguntó mirando hacia la sala, donde Annabeth había dejado de llorar y miraba hacia la nada sujetándose la muñeca.
-¿Quiénes?-. Su amigo miraba a la chica con sincera preocupación.
-Will con su padre, aunque pienso que deberíamos...
-Solo vendrá Will-. Exclamó pasando sin mirarlo para sentarse junto a la rubia en el sofá y susurrarle algo que Percy no alcanzó a escuchar por la bocina de un auto.
-¿Que?-.
-Es él, abriré la puerta-.
Solo Will?
Antes de que pudiera decir algo mas, Jason regresó seguido de un chico rubio con el que habían crecido pero que era dos años mayor que ellos. Will Solace, hijo del doctor Apolo y aspirante a seguir los pasos de su padre como uno de los mejores del país.
-¿Annie que ocurrió?-. Dijo mientras tomaba su mano y comenzaba a examinar la herida que aún sangraba un poco.
¿Ahora todos la llaman Annie?
-Es solo mi mano...me...corté-. Jason se sentó junto a ella y tomó su mano libre cuando Will comenzó a limpiar la herida y ella hizo una mueca de dolor.
¿Qué diablos le pasa? ¿Porqué me importa si toma su mano o no?
-Bien- Will limpió los restos de sangre seca en su piel y todos pudieron ver con claridad el corte, no era algo que pasaba como cuando levantas un pedazo de cristal de un vaso roto, se veía diferente.
- Ahora dime la verdad-. Dijo mirándola a los ojos.
-Es la verdad, me corté con un pedazo de cristal-. Parecía como si alguien le hubiera enterrado el cristal directo en la palma de la mano.
-¿Como pasó?-.
-Fue un accidente-. Annabeth rehuía los ojos de Will, que vendaba su mano.
Esta loca si cree que vamos a creerle
-Annabeth si no nos dices que pasó llamaré a...- Comenzó a decir Jason en un tono muy serio.
-¡Esta bien, esta bien!- Exclamó cerrando los ojos y bajando la cabeza- Estaba pegado a la cadena de mi bicicleta... no lo vi yo... estaba apurada por la lluvia y ... estaba cerca del candado y no lo vi-. Percy se quedó pasmado por un momento.
¿Porqué le harían algo así?
-Gracias Will...¿Cuando estaré mejor?-. Dijo intentando desviar la atención del tema que claramente la incomodaba.
-En al menos una semana, tuviste suerte de que no fuera tan profunda. Habrías necesitado puntadas y aun no perfecciono el punto cruzado-. El chico intentó forzar una sonrisa y liberar un poco la tensión que había pero falló al ocultar la lastima que sentía hacia ella.
Herirla es demasiado
-Pero...
-¡Ya olvídalo Jackson!-.
-¿Pero quien..
-¿Quién mas? Tu noviecita Rachel-.
-No es mi novia-.
-No es lo que ella dice-.
-No creo que ella...-. Sabía que Annabeth era el blanco favorito de las burlas de la pelirroja pero llegar al punto de herirla de esa manera parecía demasiado.
Es demasiado
-Como sea-.
-Percy ya déjalo-. Dijo Jason dándole una palmada en la espalda antes de que el chico pudiera responder.
Will le dio unas pastillas para ayudarla con el dolor y algunas recomendaciones para limpiar la herida y cambiar los vendajes en los próximos días.
Mientras ella recogía sus cosas Percy la escuchó decir:
-Gracias de nuevo Will-.
-Descuida Annabeth-.
-Y por no decir nada-.
-No hay problema-. El rubio le sonrió y le ayudó a colgarse la mochila con cuidado.
-Sigo sin entender porque no la llevamos al hospital Jason-.
-Percy olvídalo-.
-¿Porqué todo el secreto?
-Percy...
-¡Dime Jason! ¿Porque no simplemente la llevamos o llamaste al padre de Will?-
-¡Porque no tengo dinero!- Había lagrimas furiosas en sus ojos color tormenta y lo miraron tan intensamente que no supo que decir-. Al menos no para pagar una cuenta de hospital por una estúpida broma de tu novia-.
-No es...
-Gracias por traerme Jackson... dile a tu mamá que lamento haber mojado su sofá-.
-Annabeth..
-Gracias por todo Jason-. Salió prácticamente corriendo de la mansión Jackson, ignorando el ofrecimiento de Will de llevarla a casa y dejando a los tres chicos preocupados y algo confundidos.
A uno en especial más preocupado y confundido que los demás.
...
NOTA: Me gusta hacia donde va esta historia. Díganme que quisieran ver o que les parece
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Percabeth...Nunca Fuiste Tu
RandomPercy y Annabeth son dos polos opuestos que siempre han estado cerca. No se toleran pero es por razones diferentes. No saben que están destinados a estar juntos pero lo sabrán de una manera y otra. AU. Fuera del universo semidios