Clandestine (HunHan)

CAPÍTULO 7

En la siguiente semana LuHan se esforzó por mantener su relación con Seohyun, talvez ella le haría olvidar y nuevamente volverían a ser la linda pareja que solían ser. ¿Pero a quien engañaba? A él ya ni siquiera le atraía Seohyun, es más, no le atraía ninguna otra mujer.

LuHan trató de ser lo más cuidadoso posible que pudo al momento de romper con ella, le ofreció su amistad y todo. Seohyun aceptó, pero en su mirada era notable la tristeza, LuHan se sintió un pedazo de mierda por lastimar a una chica como ella, pero no podía anteponer la lastima a su bienestar y felicidad.

Sus padres eran cariñosos y siempre estaban al pendiente de él, pero también eran muy permisivos, lo cual LuHan aprovechó para ir a bares gay en la noche y magrearse con cualquier tipo guapo que se le atravesara, pero antes de cualquier cosa siempre les preguntaba su edad y profesión, algunos lo miraban con confusión y se iban y otros le respondían sin mucha importancia volviendo a atacar sus labios.

En varias ocasiones tuvo que salir huyendo de mugrosas habitaciones de motel porque los tipos querían llegar a algo más que besar y tocar sobre la ropa. Él no quería eso, solo buscaba olvidar o distraerse.

Después de que casi fue violado aprendió la lección y no volvió a frecuentar esos lugares.

En el instituto todo iba moderadamente bien, o masomenos, sus notas habían bajado y los profesores se quejaban de que últimamente estaba ido. Saludaba a SeoHyun y mantenía pequeñas y triviales conversaciones, ella estaba tranquila, pero se denotaba decaída.

-Mi abuelo cumple 80 años mañana y el sábado la familia se va a reunir para hacerle una comida, mi madre preguntó por ti y dijo que si querías podías asistir. – Algo le decía a LuHan que su madre no había preguntado por él. Solo la vio una vez y al despedirse ella ni recordaba su nombre.

- Si, talvez pase. – Dijo para no hacer sentir mal a Seohyun. En eso el timbre sonó y ambos fueron a clase, SeoHyun por primera vez en mucho tiempo había sonreído radiante.

LuHan en verdad no quería ir, iba a ser incomodo, el no conocía a nadie y no le nacía hacerlo por Seohyun. La chica toda la semana había estado de muy buen ánimo y ya no había rastro de tristeza en su rostro, LuHan pensó que si no iba esa alegría renovada se iba a esfumar y no quería ser el causante, así que se decidió a ir.

Al llegar a casa su 'ex suegra' lo recibió con una enorme sonrisa y un abrazo y esta vez si recordaba su nombre. SeoHyun le lanzó una mirada asesina a su madre. Le había dicho que recibiera a LuHan de manera amable, mas no que lo asustara.

La sala estaba plagada de personas y el estómago de LuHan dio pequeños vuelcos, no era muy sociable que digamos. Sin embargo, SeoHyun lo guio hasta donde estaba su padre.

-Un gusto verte de nuevo muchacho, debo ir a atender a la gente, así que nos vemos en un rato. - Estrechó la mano del pelicobrizo y desapareció entre la multitud.

-Espera a que conozcas al abuelo, él es genial y jovial a pesar de su edad. - dijo entusiasmada con una sonrisa de oreja a oreja.- Oh mira allí están la tía Eugene y Sehun......

"Sehun, Sehun, Sehun...." Escuchó LuHan en eco en su cabeza. ¿Cuántos Sehun había en Corea? Muchos, pero LuHan no tenía un buen presentimiento. Giró lentamente su cuerpo hacía atrás, lo primero que vio fue a una mujer cuarentona con una copa en la mano hablando con un hombre alto, cabellos negros y como sus ojos que poseían una mirada penetrante. Santa mierda, era Oh SeHun, que lo miraba fijamente con una expresión dura y a la vez tranquila sin prestar atención a la que aparentemente era Eugene.

LuHan no supo en que momento estaba estrechando la mano con la alcoholizada mujer, Seohyun lo había arrastrado hacía allá sin que lo notara.

-Y él es SeHun, mi primo. – LuHan movió su mano de manera involuntaria y la estrechó contra la del joven doctor con fuerza y dedicándose miradas retadoras. Eugene notó la tensión.

- Oh vamos SeHun, no asustes al pobre chico. – Dijo Eugene tomando el antebrazo del pelinegro. – Mi hijo es un primo celoso. – se dirigió a LuHan con una sonrisa.

-Oh no, él y yo no somos nada...-dijo Seohyun con un deje de nostalgia.

- Es toda una lástima, hacen una linda pareja. – SeHun capturó la atención de todos con ese comentario, en especial la de LuHan. Sus ojos irradiaban pura maldad y el único que parecía entender su modo extraño de actuar era LuHan. Por suerte llegó una niña pequeña avisando que iban a cantarle el cumpleaños a su abuelo, Seohyun empezó a caminar con la niña jalando su pantalón junto con la tía Eugene y por unos segundos LuHan y SeHun quedaron a solas. - Ambos son un par de críos doble cara. – Talvez LuHan entendía que se refiriera así de él ¿Pero por qué hablaba así de SeoHyun? Su familia. Algo estaba mal con ese hombre.

El resto de la reunión transcurrió relativamente bien, la familia de SeoHyun era agradable, en especial los miembros más jóvenes como sus primos, a excepción claro, de cierto personaje que se mantenía a la distancia de todos.

La mayoría de gente ya se había marchado, LuHan se quedó a ayudar a levantar el desorden mientras los primos de SeoHyun solo jugaban en la consola. Cuando acabo le invitaron a tomar unos tragos en un bar cerca de allí. Aceptó de buen gusto y le rogó a todos los cielos que no invitaran a SeHun, si lo hicieron, pero por fortuna este declinó la oferta.

Si se había sentido atosigado en la fiesta por la gente, seguro aquí moriría ahogado, la diferencia era que en el bar el ambiente era bueno al igual que la música y los que ocupaban el sitio no eran un montón de niños, ancianos y adultos amargados.

Bailaba y bebía como si su vida dependiera de ello sin darse cuenta de que estaba perdiendo el control y que sus únicos acompañantes eran un cuarteto de adolescentes igual de irresponsables que él. Ahora, Taehyung tenía las manos sobre sus caderas mientras bailaba detrás de él demasiado cerca, pero LuHan estaba lo suficientemente ebrio como para no objetar.

De repente las manos de Taehyung desaparecieron y volteó para ver que su peor pesadilla le tenía agarrado del cuello de su camisa como si fuera una mascota.

- ¿Tú que mierda haces aquí? - dijo el molesto adolescente.

- Mamá me mandó a cuidar de ti hermanito. – Observó a LuHan con burla y continuó. – Y vaya que he sido oportuno, a mi primita no le gustaría ver que te tomas demasiada confianza con su chico.

- Y-yo no tengo nada con ella. – Dijo tambaleándose y arrastrando las palabras.

-Tonterías, como dije: Se ven muy bien juntos. – Soltó a Taehyung que se acomodó la ropa de manera brusca mientras mandaba maldiciones a su entrometido hermano. – No te ves nada bien...Lu....ummm ¿Han? – LuHan enarcó la ceja indignado, claro, ahora no recordaba su nombre. – Debería llevarte afuera a que tomaras un poco de aire. – Tomó a LuHan de su muñeca contra su voluntad y lo sacó del bar haciéndolo chocar con varias personas en el trayecto, una vez afuera lo soltó y antes de que LuHan pudiera cuestionarle su forma de actuar, el mayor lo tenía de cara contra la pared.

- Primero mi prima, luego mi hermano. – Su aliento caliente contra el oído de LuHan haciendo que este se estremeciera. – Parece que debo enseñarte que eres mío pequeña zorra.

- ¿Q-qué carajos? - confusión más que clara en su voz. – No puede ser que...acaso.... estás celoso?

- No te imaginas cuánto.

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En tres horas o talvez antes subiré el próximo capítulo, explicando porque el cambio de opinión de Sehun y porque le dan esos arranques (¿)

Sé que les dije que este capítulo trataría de sus vidas, como una biografía, pero lo dejaré para después, ahorita quedaría un poquito fuera de contexto.

¿Por qué Sehun habrá dicho eso de Seohyun? Sigan conectadas (¿)