Querido Diario:
Aún siento el roce de su gran mano con la mía. Sorprendentemente, no eran cálidas como esperaba, sino frías como mi corazón. No pienses que el me ha notado, simplemente he pasado por casualidad a su lado. Me ha confundido con otra chica, ¿cuántas tendrá para que llegue a confundirme a mi con una de esas con las que se pasa? La manera en que sujeto mi mano, sus labios pronunciando las disculpas. Fue mágico, aunque todo lo bueno llega a su fin.
Acepté sus disculpas e intenté irme lo más rápido posible, sin embargo... uno de los chicos que se encontraba ahí colocó su pie en mi camino. Me tropecé, como siempre y toda mi ropa interior inferior quedó al descubierto. Me avergoncé muchísimo, aunque como siempre, nadie hizo nada por ayudarme.
-L.H
ESTÁS LEYENDO
Diario De Una Chica Invisible
RandomUn diario abandonado, una chica y la necesidad de contar lo que no se le puede contar a nadie. Pequeñas notas de amor, pensamientos cotidianos y desahogos son algunas de las cosas que encontraremos en el diario de una chica invisible.