Cálido

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Querido Diario:

Extraño sus cálidos abrazos. Cada vez que me envolvía fuertemente entre sus brazos. La sensación era inexplicable. Me sentía protegida de todos y de todo. El olor de tu perfume llegaba delicadamente a mi nariz al ser más baja que tú. Casi debía ponerme de puntitas para corresponder el abrazo correctamente.

Ese simple acto me hacía volar a otro mundo. Un lugar donde todo era paz y tranquilidad. El sonido leve de tu respiración en esos abrazos largos no se va de mi mente. Momentos que deseaba que duren por siempre. Aunque ahora no estás disponible para esto. Deseo verte y que me envuelvas nuevamente de manera protectora contra tu pecho. Escuchar los rápidos latidos de tu corazón y sentirme la persona más feliz  y del mundo.

-L.H​

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