No Deberías Amar 2 (Historia Gay)

CAPITULO SEIS: QUEDATE, ME DA IGUAL.

CAPITULO SEIS: QUEDATE, ME DA IGUAL.

***

/FLASHBACK/

Me di la vuelta sobre la cama sin poder dormir, pasé una mano por mi cara con mis ojos abiertos entre la oscuridad, tan solo escuchando en un fondo desalentador: sonidos de gatos maullando una y otra vez. No podía dormir, misteriosamente se me había ido el sueño. Y cabe destacar que nunca me había pasado, no desde que tengo memoria. Seguí con la vista clavada en el techo sin pensar en nada en particular, con mi mente en blanco tratando de recuperar el sueño, haciéndole preguntas a mi yo interno.

Suspiré sentándome en la cama prendiendo la lámpara, tapé mi cara con las manos... me sentí mal, sentía un sentimiento feo rondando por las cavidades de mis entrañas. Sentía desesperarme, con ganas de salir corriendo, perderme en un lugar desconocido en donde nadie me señalara ni me hiciera de menos. Sentí ahogarme en mis propios respiros, quería salir huyendo del peligro.

Podía hacerlo ahora, ¿Qué Me Lo Impedía?... sonaba ser una buena idea, como las pocas que me destacaban.

Intenté pararme para agarrar un cigarrilo, pero al hacerlo... escuché un pequeño pujido de molestia... miré a mi derecha deteniendo mis banas intenciones, y lo vi a él. Dormido completamente como un niño, con su cabeza hacia mi dirección. Me quedé quieto viéndolo a la cara, era tan guapo, tan impredecible.

Lo tapé con las sabanas hasta los hombros y pareció gustarle, sonreí tenue. Era la primera vez que un hombre dormía conmigo sin tener sex*, la primera vez que me tomaba el tiempo para desearlo y quererlo. Rocé con mis dedos sus labios carnosos, ansiando probarlos... algo en mi decía, que ese chico seria el novio perfecto, aunque suene ridículo.

Volví a acostarme acercándome a su caliente cuerpo, toqué lentamente su pecho sintiendo todo el vello que poseía bajando hasta su cadera... tragué saliva deteniéndome viendo sus labios mientras saboreaba los míos.

No podía enamorarme ahora, y menos de un chico que me odia por cargarle problemas. Tan solo convencerlo sería difícil y no pienso hacerlo, no soy perfecto, mi vida es un desastre. Y aunque mi corazón palpite más rápido queriendo sentir su cuerpo, su amor, abrir sus sentimientos. Me mantendré firme en mis convicciones: fingir que no me importa para no hacerle daño.

/FIN DEL FLASHBACK/

(Narrado Por Daniela)

-Sí, Dígame-dije en voz baja rodeando con la palma de la mano la bocina para escuchar mejor y así tener que hablar más bajo.

- ¿Es Usted La Hermana De Carrie Aller? -corroboró con una voz amable, le di un vistazo a Oliver y a su amigo constatando que estuvieran lejos y no escucharan nada de lo que estaba hablando.

-Sí-respondí corto, esperando cualquier mala noticia. Estaba algo ida de la mente debido a la resaca, pero por como he visto a mi hermana estos dias. No creo que haya empeorado de salud.

-Que Bien-contestó mientras seguía con la vista clavada en Oliver quien estaba platicando con el chico en la sala sin percatarse de mis acciones-El Motivo De MI Llamada Es Para Decirle Que El Tratamiento Contra El Cáncer Que Le Estamos Practicando Está Funcionando Con Éxito. -mencionó ofreciéndome una noticia satisfactoria-Ella Podrá En Pocos Meses, Salir De Este Hospital Si Todo Continua Como Lo Planeado.