26/07/1998 a las 21:20
Apartamento de Helena y Chris
Londres, Gran Londres, Inglaterra, Reino UnidoDía domingo, segundo día sobreviviendo esforzándose para poder seguir cuerdo sin entrar en pánico respecto al tema de la madre de Helena, quien estaba ahora con una guardia dominical, ese jueves sería el cumpleaños de la morena latina e irónicamente, también caerían para las audiciones de Parlophone, quienes decidieron adelantar la audición de los chicos, más razones para estar nervioso, de hecho, los ensayos aumentaron hasta cuatro o seis horas diarias para que les salga bien, con mayor razón la canción que había escrito hace poco tiempo.
Por ahora su cabeza está cerca de estallar cual globo recibiendo un pinchazo, de hecho, la razón para que se sienta más que nervioso era netamente culpa de Eleonor y su penetrante mirada diciendo que se comería su corazón en cuanto cometiese el error, la peor parte era el no saber cómo salirse con la suya, cualquier acto que hiciera para hacer sentir bien a su hija probable lo interpretaría como mero cepillo. Como no tiene nada que hacer para alejar tanto de su mente, se quedó leyendo sobre su cama Don Quijote de la Mancha traducido al inglés, una parte suya le dice que debería hacer el intento de aprender español para andar de metiche donde no le llaman.
Escucha a Lina ladrando al elevador, por los quejidos de alegría deduce que es algún conocido, probablemente la reina del mundo por el tema de la hora, suspira, señala la página donde se quedó para continuar en otro momento y va a la sala con algo de pereza, al llegar ve a Will alzando a la cachorrita, quien movía tímidamente su cola, el rostro de felicidad de la misma era de alegría y placer con las caricias sobre su cuello...
—Hola Will —saluda
—Hola Chris, ¿cómo estás?
El baterista comienza a rascarle el cuello, haciendo que sacara la lengua con una sonrisa, cerrando los ojos, para que luego fuese colocada nuevamente en el piso, alegre, Will se sienta en el sofá, a su lado se sienta el rubio algo o muy decaído... razones más obvias de las que se cree...
—Ya di lo que te molesta...
—Los padres de Helena están por aquí...
Levanta una ceja preguntándole con la mirada si se supone que hablaba en serio, el mismo le responde no verbalmente pero sí corporalmente que no era broma, con corporalmente nos referimos a ir cayendo lentamente del sofá hasta quedar cerca del piso, lo único que quedaba sobre el sofá era su cabeza apoyada, mirando para el techo...
— ¿Y sabes cuál es lo peor? —pregunta casi con sarcasmo —Que su madre por poco y quiere ver mi cabeza en una bandeja de plata...
—No te conoce bien y es celosa —dijo —, no puede ser peor.
—Me dijo una vez que la cuide bien porque "si le hago algo que pueda herirla o si le pasa algo por mi culpa, vendría personalmente a golpearme". No es solo eso, no puedo sacarme la estúpida sensación de que habría una probabilidad de que se la lleve de regreso a su país...
Suspira mientras se deja caer totalmente del sillón, molesto ante tal probabilidad, Lina se acerca a él, colocándose a un lado suyo... no tiene una cruel idea de cómo arrancar esas emociones de su corazón y mente, lo que menos quiere es que se largara como si fuera un ave... y sí, sus emociones continúan siendo caóticas, de hecho en cierto momento se le cruza la sugerencia de la "personificación de su consciencia", pero la descarta rápidamente de sus pensamientos. No es tan imbécil para llegar a ese extremo, sí estaba desesperado por encontrar una manera de que no se les cruzara eso por la mente ni de casualidad, pero no llegaría hasta ese punto, básicamente debía estar más loco que la oveja que atacó a Jonny para hacer algo así...
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Una historia en Londres (Chris Martin)
Hayran KurguHelena Galiano es una recién graduada de una Universidad de Medicina en su país natal. Joven, talentosa, apasionada por su nueva profesión incluso antes de empezar oficialmente... Christopher "Chris" Martin, universitario, compositor, cantautor, ent...