Wild Soul.

Capítulo 3.

Elyse P.O.V

Ha pasado una semana desde que Louis me dio la fantástica idea de apuntarnos a la universidad. Yo he intentado evitar apuntarme con la excusa de que estamos a mediados de Noviembre y el semestre ya empezó hace dos meses y que iríamos con retraso. Él siempre me respondía con ‘ellos duermen por la noche, tú no porque no lo necesitas. Así que estudias a esas horas y adelantas tiempo’ Le odio. Es demasiado inteligente.

Y por eso, aquí estoy. En la Universidad de Londres esperando a que me den mis horarios y demás para poder empezar mi esperada carrera de audiovisuales.

-¿Audiovisuales? ¿En serio?-pregunta Louis burlándose.

-Vengo aquí en contra de mi voluntad así que no te conviene enfadarme-le susurro en el oído.

-Va chicos, haya paz. Y tú, compórtate que eres el mayor-adoro el instinto maternal de Joyce ahora mismo.

Estamos sentados en la pequeña fila de asientos que hay empotrados a la pared de la recepción de ésta enorme universidad.

-No sé qué hago yo aquí-suspira Harry. Está a mi lado, pero en pié.

-Porque me amas con locura-suelto-si sufro yo, sufres tú-le sonrío irónicamente.

-No me lo recuerdes-dice en un tono inaudible para los humanos. Yo oigo su comentario y dos milésimas de segundo más tarde se estremece por el puño que le he dado en el estómago.

-Aquí tenéis todo el papeleo necesario para inscribiros y demás. La transferencia de la matricula ya ha sido aceptada por lo que podéis ir a clases si queréis-dice la secretaria de forma pasiva. Qué pasión por el trabajo, por Dios. Pienso irónica.

-Está bien, muchas gracias-responde Joyce amable-¿Queréis empezar hoy las clases? Aún queda media hora para que empiece la primera, vamos bien de tiempo.

-¿Vas en serio Joyce?

-Sí cariño, empezaremos hoy las clases-interrumpe Louis.

-Eres insoportable Louis, digo, futuro licenciado en literatura-me burlo y ríe.

Joyce y él harán la carrera juntos. Una de las razones por la cual son novios es su pasión por la lectura. Se pasan la vida leyendo y yo, bueno, me la paso riéndome de ellos.

-Nosotros nos vamos ya, nos vemos en clase. Y Elyse, se amable por una vez en tu vida, gracias-dice Louis en tono serio-confío en ti.

-Que sí, tira que llegáis tarde-respondo borde-¿Y tú qué miras?-le digo a Harry dándole una colleja mientras le miraba la parte trasera a otra secretaria. Esa era más joven, tendría unos 25. Era rubia e idiota. Eso último lo he descubierto porque se ha delatado con el ‘o sea, esto es increíble’. Jóvenes de hoy en día, qué pena de mundo.

-¿Quieres disfrutar…-mira el caro y horroroso reloj que reposa en su muñeca-de los 20 minutos que nos quedan?-dice agarrándome de la cintura.

-Créeme que me gustaría, pero tengo otras cosas mejores que hacer como por ejemplo pasear como una inútil por estos pasillos hasta encontrar mi aula-argumento y le doy la espalda dispuesta a buscar mi clase correspondiente.

-Entonces obligaré a la rubia esa, se le ve con ganas-suelta y me giro de golpe para mirarle amenazante-Vale, vale. Pero luego no te escapas-ríe y se aleja de mí.

Perfecto. Ahora estoy sola por los pasillos de esta gran universidad sin saber a dónde ir. Miro el horario que me han dado hace escasos minutos y que tengo metido en la mochila. Al menos pone el edificio y la planta dónde se encuentra cada aula. Pensé que nunca diría esto siendo vampira pero esta situación me da un poco de respeto. Esto ocurre, básicamente, porque nunca antes he podido estudiar en un centro educativo. Siempre he estudiado en casa.

Cojo el móvil, aún sigo sorprendida por el cambio que ha dado el mundo de la tecnología en tan pocos años, miro la hora y me quedan 15 minutos para asistir a la primera clase. Debo darme prisa en encontrarla ya que en público no puedo correr a mi velocidad personal. Voy caminando por el gran campus cuando diviso a 3 chicos a lo lejos. Pongo atención en su conversación ya que uno ha mencionado el término ‘audiovisual’.

-¿Te toca comunicación audiovisual a primera? Te acompaño en el sentimiento, tío-dice el rubio y se ríe fuertemente. Los otros dos le siguen.

Miro mi horario, me toca esa misma asignatura así que les seguiré.

-Bueno, nos vemos luego a la hora de comer-dice ahora el moreno de tez un poco más blanca en comparación con el otro moreno del medio.

-Hasta luego, tíos-responde el tercer chico, el de audiovisuales. Tiene los brazos tatuados y es moreno de piel. Pelo negro y ojos marrones. Un marrón increíble, por cierto.

Se despiden al llegar a una pequeña plazoleta, supongo que se irán a sus respectivas aulas.

Sigo al moreno tatuado a una distancia prudente evitando que note que le acoso para llegar al aula. Decido que a partir de hoy le usaré cómo mi dispositivo de GPS, aunque tendré que buscarme a otro de repuesto, estos humanos son muy débiles en el invierno.

Entramos a un edificio enorme en el que claramente se ve que es el de Audiovisuales, ya que hay un cartel que lo indica. Subimos hasta la tercera planta y entra a la primera aula a la derecha. Entro unos segundos más tarde y me quedo en la puerta. Habrá unas 70 personas ahí adentro. En una sola aula. Más les vale, por su bien, que no me cabreen.

-Hola guapa, ¿eres nueva?-dice una voz reconocible.

-¡¿Qué haces aquí Dru?! No me digas…

-Que vamos a estudiar juntos-acaba mi frase y sonríe victorioso.

Me encantaría torturarle eternamente pero contengo mis ganas ya que no conviene que me tachen de asesina el primer día de clases. El primer día de ‘mi nueva vida como estudiante’.