Mientras te encuentro

Parte 8: La salvación

-¿Jan?-. Mierda.

Me giré lentamente para encontrarme cara a cara con mi hermano.

-Erick.- Susurré.

-¿Qué tal, pequeña?-. Dice acercándose a rodearme los hombros con su brazo. Miro a Dandre que parece lidiar con una batalla interna según lo que podía ver en sus ojos. Me giro hacia Erick y le sonrío.

-¿Qué haces aquí? No dijiste que vendrías -. Le digo aún sonriendo.

-Te quería sorprender. Estaré en la ciudad ésta noche. Tengo prácticas en la privada y debo volver mañana a la entrega de proyecto en la universidad.

-Me alegra que estés aquí -. Se lo decía en serio, me parecía raro que estuviera en la ciudad, pero me alegraba verlo -. Oye, hazme un favor, espérame en la entrada, voy en unos minutos.

Erick me ve unos segundos pero asiente.

-Bien -. Dice y me da un beso en la frente.

En el momento en que Erick se va, a Dandre se le relaja el rostro.

-¿Qué ocurre? -. Le pregunto a Dandre.

-Nada -. Se apresura a responder.- Oye, quiero hablar contigo, pero no puede ser aquí, ni hoy. Tienes que estar sola. Necesitamos hablar en privado, sin riesgo a que nos escuchen -. Sonaba peligroso, pero, la curiosidad mató al gato a fin de cuentas.

-¿Dónde y cuándo? -. Pregunto decidida.

-Tu hermano se va mañana, ¿no?, pues mañana en la noche, para que no nos interrumpa. ¿Podemos vernos frente a la entrada de la biblioteca? A las once de la noche.

-Que sea a las doce, debo escapar de mi amigo.

-Bien, a las doce mañana -. Dice antes de escabullirse por un pasillo.

Espero unos segundos más y luego me dirijo a la entrada para encontrarme con Erick.

-¿Qué tal la universidad? -. Pregunto para hablar de algo.

-Aburrida, las clases son largas, pero aprendo cosas, supongo que ese es el fin -. Sonríe

-Eso he escuchado -. Le sigo el juego.

Caminamos hasta el estacionamiento y cuando me dirijo a mi auto decido preguntar algo más.

-¿Cómo me encontraste?

-Fui a casa y no te vi, así que llamé a Dani y dijo que te buscara aquí.

-¿Hablaste mucho con él?

-No realmente, él estaba haciendo no sé qué y no hablamos mucho, solo le dije que estaría aquí hoy y mañana.

Perfecto.

Decido escribirle un mensaje a Dani mientras conduzco para escapar de él mañana por la noche.

*Dani, Erick se quedará un par de noches, estaremos en casa, supongo que estaré segura, no estaré sola*

Tarda solo unos segundo en responder.

*Bien, pero si hay problemas me llamas*

*Entendido*

Dejo el celular por un lado sabiendo que el hecho de textear y conducir al mismo tiempo ponen nervioso a mi hermano.

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Estoy a solamente una hora de mi encuentro con Dandre, luego de pasar dos días perfectos con mi hermano y una noche totalmente loca sin dormir, comiendo pizza y contándonos cualquier tontería ocurrida durante estos meses, dejé a Erick en la estación del metro que lo llevaría de vuelta a Manhattan a las ocho de la noche. Regresé a casa y tomé una ducha para quitar cualquier rastro del día, y de culpa por mentirle a Dani, de mi cuerpo. Tomé una cena ligera que yo misma preparé y ahora finjo leer un libro mientras espero a que sea un poco más tarde para salir a mi encuentro con Dandre.