26.

395 64 31
                                    

—No, no, no, ¡No!— se negó rotundamente. —No voy a aceptar hacer eso. —

—Tu fama a cada tweet baja mientras que el odio aumenta, incluso le da mala fama a la serie. — explicó. —No me importa, Chandler, es por tu bien. —

—¿Mi madre qué piensa de esto?— preguntó.

—Ya firmaron el permiso que necesitábamos. — sus ojos se cristalizaron.

—Esto es una broma, ¿Cierto?— preguntó con la voz quebrada. El no quería hacer eso, odiaba de sobremanera que lo obligasen a hacer algo que el no quería, por mucho que los mensajes de odio que recibía no le gustasen tenía que aceptarlos, ignorarlos y seguir con su vida, junto a Austin.

—Mira, hagamos algo. ¿Ok? Tendrás una novia, nosotros nos encargaremos de arreglar el problema de la fotografía y los malos entendidos... — Chandler lo interrumpió.

—No son malos entendidos. Yo sí quiero a Austin. — Bob rodó los ojos.

—Da igual. ¿Ok? No me importa si lo amas, si te encanta como te la mete ya que eres una pasiva de mierda, etcétera, etcétera. — hizo un ademán de poca importancia con la mano. Chandler miró el suelo, herido. —Solo necesitamos tu firma. — le acerco el papel junto con un bolígrafo. —Cuando menos lo creas esta pesadilla terminará, y podrás estar con tu novio marica de nuevo. —

—¿P-pronto?— preguntó crédulo. Bob sonrió macabro.

—Más cerca de lo que imaginas. — dijo cínico. Con una mano temblorosa Chandler se acercó a leer el contrato.— ¿No confías en mi, Chandler?— el menor le dirigió una rápida mirada seria.

Cuando ya había terminado de leer todo, firmó. El señor con una ancha sonrisa tomó el contrato y besó ese papel. A Chandler le pareció algo demasiado exagerado.

—¿Q-quién sera la c-chica...?— preguntó. El señor dejó de mirar el contrato feliz y dirigió su mirada a Chandler, el rodó los ojos y se aclaro la garganta.

—Es una hija de un viejo amigo. — Chandler esperó a que el continuara. —Su nombre es Brianna Maphis. —

EL DIARIO DE CHANDLER; AUSDLERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora