—Trato hecho... Tráeme los miraculous y podrás cumplir tu venganza tal y como tienes pensado...
La joven miraba a ninguna parte, con una sonrisa macabra en el rostro.
—Por supuesto, Hawk Moth... Dame ese poder y tus deseados miraculous llegarán a ti. Tenlo por seguro.
—De acuerdo, Lila...
—No... —Una mueca maléfica se formó en su rostro—. Llámame Volpina.
La joven salió del callejón y caminó con la cabeza alta. Su plan estaba en marcha, y no podía esperar a dar el primer paso en pos de su culminación.
—Esta vez no seré yo la humillada, Ladybug... No sabes cuánto voy a disfrutar cuando desaparezcas...
ஐ
—... Aaaah, quiero desaparecer... —se quejó Marinette con la voz muy ronca, tapada con tres mantas. Tikki la observaba con penuria, mientras le ponía una toalla húmeda en la frente—. Me encuentro fatal, Tikki... Ya sabía yo que luchar bajo la lluvia y volver empapada a casa me iba a pasar factura...
—Ay, Marinette... Necesitas descansar mucho. No te preocu...
—A-...a-... —La chica arrugó la nariz y alzó la cabeza—... a-... ¡ACHÚS!
La criatura roja salió volando por la fuerza del estornudo.
—Salud —dijo cuando se detuvo al chocar contra la pared.
—¡Perdona, Tikki!, no puedo controla-... ¡¡AAACHÚS!! —Agarró un pañuelo y se sonó la nariz—. Espero que a Hawk Moth no le importe tomarse unos días de descanso, porque yo así no puedo. Y sueno como si hablara desde dentro de una tuba...
—Debes recuperarte y descansar todo lo que puedas.
—Sí... —le dijo Marinette cuando Tikki regresó volando. Volvió a taparse y hacerse una bola en la cama—. Solo espero que al menos hoy no tenga que transformarme... Marinette y Ladybug no pueden estar casi afónicas al mismo tiempo.
Mientras tanto, en casa de los Agreste...
—Est-t-toy bien... En serio, Nat-t-t-thalie —dijo el chico, tiritando de frío y tratando de levantarse.
—Estás enfermo y hoy no irás a clase, Adrien. —La mujer se dirigió a la puerta observándolo sin expresión.
—Pero de verd-dad que pue-d-do ir, solo...
—No. Te quedarás en la cama y no irás al instituto. Órdenes de tu padre.
Sin añadir nada más y sin dar oportunidad de insistir de nuevo al muchacho, salió del dormitorio cerrando la puerta.
—Me p-pregunto si tampoco me harán ir a la s-sesión de fotos de hoy... —comentó con sarcasmo Adrien mientras se tapaba hasta la cabeza.
—Chico, eres muy raro... —Plagg salió de su escondite y se posó en la almohada de su amigo—. Te escapas de casa para ir al colegio, e incluso quieres ir estando enfermo. ¿Qué clase de adolescente eres?
—Uno que ya ha pasa-s-sado demasiado tiempo en casa —dijo Adrien bajo la sábana.
—Disfruta del descanso, chaval. Y de paso dame algo de queso.
—... ¡ACHCHCHÍS! —fue la respuesta del joven. Plagg dio un pequeño bote sobre la almohada.
—Vale, vale —dijo el pequeño kwami, volando lejos.
—Espero que no aparezcan akumas hoy... Adrien y Chat Noir no deben estar enfermos al mismo tiempo, porque alguien podría sospechar. Y no puedo dejar que Ladybug me vea así... —Sacó la cabeza de debajo de la manta.
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🐞 MLB: La venganza de Volpina
FanfictionPuede que esta vez Ladybug haya topado con una enemiga mucho más poderosa: Volpina. Y es que el odio que siente hacia la superheroína es mucho mayor de lo que parecía, y no busca otra cosa que VENGANZA. ¿Estará en peligro el secreto de los salvadore...