The Sinners I: Ty (Pausada)

7

Cuando Channel llegó a las siete menos cinco al bar, el local estaba ya bastante lleno. Así que fue directa a cambiarse después de un rápido saludo a Phil, Blue y a Anastasia. Guardó la chaqueta negra en su taquilla y se miró al espejo del baño para comprobar que todo estaba en orden. Todos menos algunos mechones que se la habían escapado de la cola de caballo, pero ya se había acostumbrado a ello, la pasaba siempre. Salió de la zona de empleados y no se sorprendió lo que encontró, Ella y Phil trabajando sin cesar y la rubia coqueteando más que otra cosa. Así que suspiró al comprender que esta noche sería igual a la pasada, sin apenas un respiro para ir al lavabo.

-¡Channel – le llamó la atención Phil –, trae otras dos cajas de cerveza!

Ella no perdió tiempo en contestar, sino que volvió sobre sus pasos para entrar en el almacén. Y como pudo se las apañó para abrir la puerta desde dentro mientras agarraba las dos cajas de plástico con los botellines en su interior. Ese fue el único rato en unas buenas tres horas que pudo estar fuera de la barra. Con el paso de los minutos el local se abarrotaba de grupillos de gente cada vez más bulliciosa. Hasta que hubo un punto en que Channel pensó que ahogarían el sonido de la música.

Lo que consiguió que el bar se vaciase bastante antes de la hora normal en que la gente se iba un sábado, fue el rumor de que habían abierto una discoteca nueva por el centro de Chicago y que su sala VIP estaría llena de famosos. Así que todos aquellos que se dejaban deslumbrar por la fama no se tomaron mucho tiempo en dejar las bebidas de lado y marcharse al centro. Así que el lugar dejó de estar atestado, pero aun así con un buen número de personas.

- ¡Uf! Menos mal que la cosa se ha relajado un poco, me estaba agobiando – dijo Anastasia con voz de haber trabajado hora sin parar.

-Claro, debe agotar no saber con qué chico coquetear, ¿no? – la replicó fríamente Blue.

-Chicas, ya – cortó Phil antes de que su sobrina pudiese replicar.

Channel vio como Blue apretaba los puños y miraba con odio a la rubia. No era la primera vez que le veía contener su enfado.

-Voy a rellenar las bebidas – dijo Blue con una voz helada y se metió en la zona de empleados.

-Tassy, ve a recoger las bebidas que haya por el local – le dijo el hombre mientras la entregaba una bandeja.

-Pero estoy cansada... - se quejó.

-Tassy, ve a recoger las bebidas – le dijo mirándola fijamente, lo que consiguió que ella hiciera un mohín con los labios y saliese sin ganas de detrás de la barra. – Maldigo el día que le hice ese favor a mi hermana... - murmuró pensando que Channel no lo escucharía.

-¿Por qué no la despides? – no pudo contenerse en preguntarle.

-Tú la has visto trabajar, ¿crees que duraría en otro trabajo? - suspiró cansado - si apenas consigo que haga algo sin poner mala cara o sin que enfade a Blue. Y no quiero estar presente el día que ella decida estallar.

-Tu hermana lo comprenderá si se lo explicas, ¿no? Tiene que saber cómo es su hija.

-¡Ja! – Soltó amargamente – Para ella es la niña de sus ojos. La perfecta dama. Si la viese cómo se comporta aquí... ¡todavía piensa que es una santa!

-¿En serio?

-Por desgracia. – miró fijamente como su sobrina se contoneaba cuando pasaba cerca de un hombre – y no entiendo cómo cojones consigue engañarla tanto.

-¿Y si la buscas un trabajo en otro sitio?

-Si va de mi parte y se comporta así, el que va a quedar como la jodida mierda soy yo.