Let me be yours.

-[Batalla campal.]-

Iba a girarme para besarlo cuando me sonó el móvil. Lo cogí entre dientes.

-[Conversación telefónica.]-

- Sally Scott al habla, ¿quién eres y que quieres? 

- Zorra, soy Lea, ¿sabes dónde esta Harry? Hace rato que no le veo.

- Esta aquí conmigo, no te preocupes.

- Esta bien, en veinte minutos, media hora como mucho estoy allí.

- Vale, Lea, te esperamos en la entrada de mi casa.

-[Fin de la conversación telefónica.]-

Guarde el móvil en mi mochila y Harry me susurro al oído:

- Yo te conozco, Sally Scott Michelle.

- ¿Cómo sabes mi nombre?

Me sorprendí. ¿Cómo era posible que ese chico me conociera? No sabía que decir ni como reaccionar? Me había quedado de piedra. Se me heló la sangre. Entonces me di cuenta. Todo encajaba. Sus hoyuelos al sonreír, los mismos que me enamoraron cuando era pequeña, sus ojos verdes, que hacían que cada vez que me miraba se iluminase mi mundo, y ese pelo rizado y castaño, que de pequeña tanto me gustaba acariciar y peinar.

- ¿Harold? ¿Eres tú? ¿Eres Hazza Rizos Sexys Styles?

Él empezó a reírse y me abrazo muy fuerte.

- Si, Sally Sullivan Blue Scott.

Le seguí el abrazo y por segunda vez en la vida sentí como el tiempo se paraba. Había echado tanto de menos a Harry que ahora que volvía a verlo no sabía que decir o que hacer. Tenía muchas cosas que contarle pero no sabía por donde empezar. Entonces recordé algo. Entre en mi casa corriendo, con cuidado de no resbalarme por culpa de la nieve que habían mojado las suelas de mis botines. Subí a mi cuarto y cogí las fotos que tenía de cuando ambos eramos pequeños. Volví por donde había venido y se las enseñé. Él sonrió pero a la vez note algo de melancolía. Entonces me miro suspirando y dijo:

- Ojalá volvieran estos momentos.

- Ojalá, fueron de los mejores años de mi vida.

- Recuerdo que estaba perdida y locamente enamorado de ti. Cada noche soñaba en como sería formar una familia contigo. Pensaras que estoy loco.

Empezamos ambos a reír. '¿Él también quería formar una familia conmigo? Vaya, veo que no soy la única' De pronto me alguien me sacó de mis pensamientos.

- ¡Hola chicos! ¿Qué hacéis? ¿Puedo quedarme con vosotros? 

Ambos miramos en la dirección procedente de esa voz. Era Ayleen. Le hice un gesto con la mano para que viniera y se sentara con nosotros. Tras ella apreció Peter, seguido de Amber y Lea. Los cuatro vinieron a nuestro lado y al ver las fotos que Harry sostenía todos exclaramaron: 

- ¡¿Os conocéis?! ¿Desde cuando? ¿Por qué no me dijíteis nada?

Sonreí contenta por haber vuelto a ver a mi mejor amigo de la infancia y dije:

- Yo no sabía quién era, hasta que él mismo me lo ha dicho. No tengo la culpa.

Entonces Ayleen gritó:

- ¿Por qué no vamos todos de acampada al bosque? 

Harry dijo que sí al instante. Seguía siendo igual de impulsivo que siempre, se dejaba llevar por los demás. Peter asintió, Lea y yo nos echamos una mirada cómplice en señal de aceptación, pero Amber no parecía muy convencida con aquella idea. Entonces Hazza tuvo una idea.

- ¿Puedo traerme a dos amigos? Están en mi casa muertos de aburrimiento jugando al FIFA 13, y no quiero que se queden allí amargados.

Todos asentimos y nos fuimos a preparar las mochilas, puesto que iríamos de acampada esta noche. Me despedí de todos, bueno, de todos todos no, a Amber ni me acerqué y me fui corriendo a casa. Subí las escaleras que daban a mi cuarto de dos en dos y antes de llegar a la parte de arriba, me tropecé y me caí de morros contra el suelo. No hace falta decir que me partí el labio y que me hice un cardenal en la mejilla y en el cuello. A pesar de esto terminé de subir y entre a mi cuarto. Saqué mi mochila y empecé a meter ropa, unos vaqueros pitillos negros, una sudadera blanca-grisácea y roja de 'Obey', un gorro granate de 'Monroe' y mis vans a juego con el gorro. Eché un culotte de encaje, con medias de rejilla, ligero y el sujetador a juego. Un peine, mi móvil, botella de agua, una bolsa crips, un kilo o dos de carne, un libro y una linterna, un block de notas y un estuche con bolígrafos, rotuladores, lápices, goma, sacapuntas, etc... Y mi canon. Baje las escaleras con la mochila que pesaba más que yo. Cuando llegue a abajo dejé la mochila en el sofá y me senté a cenar. Una manzana, unas lonchas de jamón york y un trozo de queso. Acompañado de mi vaso de agua. Terminé de cenar y cuando me dispuse a sentarme en el sofá a ver un rato la televisión tocaron al timbre. Salté el sofá y abrí la puerta. Y allí delante tenía a tres chicos tremendamente follables, esperándome, con poses bastantes provocadoras. Harry se acercó a mi, apartando un mechón de pelo que caía por mi cara, poniéndolo tras mi oreja y seguidamente besándome tierna pero apasionadamente. Me apretó fuerte contra su cuerpo. Y entonces uno de los chicos que habían venido con él, carraspeo haciendo que Harry se separarse de mi, dándome un azote en el culo y metiendo una nota en el bolsillo trasero del pantalón. Cogí mi mochila, y los cuatro pusimos rumbo al bosque, donde nos encontraríamos con los demás. Harry cogió mi mano y ambos caminamos así hasta llegar. 

- Bueno, parece que al final no nos hemos perdido, bien, somos buenos orientándonos.

- Liam, por dios, cállate, yo he sido boyscout, ¿que esperabas? 

El chico moreno empezó a reírse y el otro chico con él. Se acercaron a mi y se presentaron. 

- Liam Payne, a su entera disposición, hermosa dama.

El chico moreno le dio una colleja en la nuca a Liam y este se rascó el lugar donde su amigo le pegó.

- Yo soy Zayn Malik, preciosa chica de ojos aún mas preciosos. 

- Oh, que encanto sois. Yo soy Sally Scott Michelle, pero Harry me llamaba Sally Sullivan Blue Scott.

Ambos empezamos a reír al recordar aquellos motes tan sumamente absurdos. Entonces Liam pregunto. 

- ¿Por qué te llama así? 

- Porque cuando era pequeña, mi película favorita era Monster S.A. y de hecho sigue siéndola.

Peter, Amber y Ayleen llegaron repentinamente, dándome un tremendo susto.

- Peter, me has asustado.- Chillé.- Eres un completo idiota.

Amber se separó de su lado acercándose coqueta a Harry. ¿Esa víbora pensaba robarme a mi mejor amigo? Aún que lo quería más que como a un amigo. ¿Quizá como a un hermano? ¿O quizá como a un novio? No, no, definitivamente no. No podía enamorarme, pero esa víbora, esa rata de alcantarilla, esa zorra iba a camelarselo.

- Hola, soy Amber O'Donell, ¿y tú?

- Em...Harry Styles...-Dijo mientras rascaba su cabeza.

- Que pelo más rizado, ¿puedo tocarlo?-Sin dejarlo siquiera responder se acercó a él y empezó a acariciarle la cabeza.

- Ejem, ejem, Amber, mi amor, tu novio soy yo.- Grito Peter enfadado.

- Ya, pero tiene unos ojos tan bonitos, un pelo tan suave y...- Se acercó a su oído.- Unos labios tan sensuales, me encantaría que me hicieras de todo.- Acarició su espalda y bajo lentamente hasta su culo, para darle un azote y separarse de él.- Uy, perdóname, me he confundido, quería darte en la espalda.- Fingió.

Definitivamente, esta tía quería que la matase. Y esta noche iba a ser muy pero que muy larga para ella...