Let me be yours.

-[Pelea, pelea, uuuuuh.]-

Definitivamente, esta tía quería que la matase. Y esta noche iba a ser muy pero que muy larga para ella. Harry, Peter, Liam y Zayn fueron a buscar leña para hacer una fogata, mientras que Amber y yo preparábamos y sazonábamos la carne. Mientras tanto Ayleen correteaba cerca de un pequeño arroyo. Sabíamos tanto ella como yo que acabaría empapada de pies a cabeza, así que antes de darle oportunidad, deje la carne, fui hacía ella y la aparte. 

- Eh, jo, Sally, ¿por que has hecho eso? Pensé que tú eras guay, pero eres una de ellos. 

- ¿Una de quienes?

- Una de esos sosainas. Anda ya, mi hermano ha venido a echar un polvo en mitad del bosque y a mi que me den. 

- Ayleen, no digas eso. Tu hermano te ha traído aquí porque sabe que no sería lo mismo sin ti.

- Si anda, deja de mentir, ¿vale? Soy pequeña, no estúpida.

- Quédate aquí sentada hasta que vengan los chicos Ayleen, por favor. 

- Resopló.- Esta bien Sally...

Volví a la ''cocina'' y seguí preparando la carne para cuando llegaran. Pero había tanto silencio entre Amber y yo que opte por coger mi iPhone y escuchar música. Puse el reproductor en aleatorio y empezó a sonar 'Skinny love' de Birdy. Sin darme cuenta ya estaba cantándola.

- Come on skinny love just last the year, pour a little salt we were never her, my my my, my my my ,my my my my, my my, starting at the sink of blood and crushed veneer, I tell my love to wreck it all, cut out all the ropes and let me fall, my my my, my my my, my my my my, my my, roght in the moment this order's tall...

Alguien me toco el brazo haciendo que me sobresaltara. Me di la vuelta y vi unos preciosos ojos marrones. Eran increíblemente preciosos. ¿Cómo alguien podía tener unos ojos tan bonitos?

- Zayn, ¿ya estas de vuelta?

- Sí, Peter me mandó volver para vigilar a su hermana, a su novia y a su preciosa amiga.

Se empezó a acercar a mi.

- Y yo acepte, con tal de pasar tiempo con vosotras dos.

Me eché hacía atrás, pero me caí en una cama hinchable. Zayn se empezó a agachar, hasta el punto de dejar nuestras caras a dos centímetros de distancia. Sentí su mano bajar hasta mi cintura y levantarla para poder rodearla con su brazo. No hacía más que maldecir a Harry y a Peter por no estar aquí conmigo. Estaba segura de que si ellos estuvieran aquí ya le hubieran separado de mi. 

- Vamos preciosa, déjate llevar, sólo será un momento y encima te gustará, te lo prometo.

- Zayn, mira, eres un chico encantador, pero déjame, por favor. Suéltame. 

- No, preciosa, voy a hacerte pasar el mejor rato de tu vida. 

Empezó a faltarme el aire. Me agobie, quería, no, necesitaba que me dejara espacio. 

- Zayn, por favor, déjame, me estoy agobiando. 

-Chicos, ya estamos aquí.- Gritaron mis tres chicos favoritos.

El grito que pegaron hizo que él se separase de mi, dejándome espacio para respirar y para levantarme. Me tendió la mano y se la acepte. Tenía que hacer como si nada hubiera pasado. Que en realidad no había pasado ''nada'', pero yo estaba nerviosa. Estaba segura de que alguno nos había visto. Salimos fuera de la ''cocina'' y nos sentamos alrededor de la fogata. Pusimos la carne en unos palos y los mantuvimos sobre el fuego hasta que estuvieron hechos. Empezamos a cenar. Todos estábamos en silencio escuchando el canto de los pájaros y los chorros de agua emanar del manantial; rompiéndose en el arroyo. Cuando termine de cenar, deje los platos encima de la mesa que había en la ''cocina'' y fui a buscar mi linterna. Una vez que la hube encontrado, salí con paso ligero y decidido a encontrar un lugar tranquilo y poco iluminado, que me permitiera ver bien las estrellas. Mi móvil empezó a vibrar. Era Lea.

-[Conversación telefónica.]-

- ¿Sally?

- Dime, Lea, ¿qué pasa? ¿Qué quieres?

- ¿Cómo estáis? La madre de Harry ha llamado a la mía, dice que tiene el móvil apagado o fuera de cobertura, ¿cómo es posible que tú si tengas cobertura? 

- Lea, hablaremos cuando vuelva mañana. Estoy intentando ver las estrellas y tú me estas entreteniendo. 

- Esta bien... esta bien... ya te dejo. No hagas nada con mi primo, ¿entendido? 

- Ya, si yo no tengo pensado hacer nada. Pero Amber, le esta tirando muchísimo. Y delante de Peter que es lo peor. 

- Uf, que arpía más grande es, ojalá se caiga por ahí y se pierda. 

- Bueno, me voy Le, hablamos mañana, lo prometo.

-[Fin de la conversación telefónica.]-

Colgué y me guarde el móvil en la mochila. Coloqué la mochila donde iba a apoyar mi cabeza y acto seguido me acosté en el suelo, teniendo una visión increíble de aquellos preciosos astros. La verdad es que me fascinaban. Estaba concentrada viéndolos, admirando las estrellas que no caí en la cuenta de que alguien o algo me tiraba unas piñas. Levante un poco la cabeza y pude ver una pequeña ardilla tirándome piñas. 

- Ardilla, ¿sabías que eres muy mala? No se tiran piñas a los demás.- Empecé a reír.- Creo que voy a castigarte.

Alguien salió de detrás de los árboles y yo me asuste. Cuando la persona se fue acercando más y más a mi, pude distinguir que era mi amigo Peter. Aún que por su cara no parecía muy contento, la verdad. Le hice un ademán con la mano para que se sentará a mi lado. Poco después aparecieron los demás, salvo Amber y Harry. Me temía lo peor, así que me digne a preguntar.

- ¿Qué ha pasado? ¿Dónde están Harry y Amber? 

- Mi novia esta zorreándole a tu mejor amigo. Eso pasa. Y lo peor es que lo esta haciendo en mi jodida cara, Sally. 

-Peter, tranquilo, Harry no hará nada, confiemos en él.- Dijo Liam intentando calmarlo.

- Ojalá  que tengas razón amigo, ojalá.

- Bueno, silencio, todos a mirar las estrellas. El primero que vea una estrella fugaz que pida un deseo, please.

Todos nos tiramos al suelo, para poder visualizar mejor las estrellas. Había tanto silencio, que pudimos oír los gemidos de dos personas haciendo el amor, o mejor dicho, ''follando''. Ya que si eran las dos personas que yo pensaba que eran, dudo que hubiera amor. Peter empezó a ponerse nervioso, a temblar y a sudar. Me di cuenta y me levante, tendiéndole la mano para sacarle de allí. 

- Ven, Peter, vamos a dar una vuelta.

- No perderse, excursionistas novatos. 

Me fui con Peter lejos de los demás, y entonces le pregunte:

- Peter, ¿estas bien?

- Sí, estoy genial, esto que esta haciendo me ha servido para espabilarme. Se acabo, pienso dejar a esa zorra astuta. Me avisaste hace tiempo, pero yo era un iluso. Un iluso enamorado. Que ciego he estado, dios mío. Que ciego.

- Peter, ya saber que me tienes para todo lo que necesites, ¿vale?- Dije mirándole a esos preciosos ojos verdes.

- Sí, ya lo se Sally Sullivan, por algo eres mi mejor amiga, pero, una pregunta, ¿puedes darme un abrazo y decirme que todo saldrá bien?

Me acerque a él y lo abrace tan fuerte como pude. Mientras susurraba en su oído que todo estaría bien. Le acariciaba la espalda y olía su colonia. Oh dios, que bien olía. Sin duda, Peter era un chico irresistible para cualquier chica, menos para mi. Yo solo pensaba en... sí, en Harry...Pasado un rato, volvimos a donde teníamos montado el ''campamento'' y todo estaba en silencio. Harry estaba comiendo nubes frente a la fogata, y Amber estaba haciéndose miles y miles de fotos que luego publicaría por facebook. Me senté en frente de donde Harry estaba sentado y acerque mis manos al fuego. Sólo quería calentarlas, estaba helada. Tenía tanto frío que empecé a tiritar. Vi como Harry se levantaba y se sentaba a mi lado a la vez que depositaba su chaqueta sobre mis hombros y caía por mi espalda. Me quiso abrazar, pero me aparte de él y de su estúpida pero calentita chaqueta. Estaba harta de que jugasen conmigo, ya no más Sally, ya no más...