Double Life (lawlu)

Al límite

¿Dónde estaba?... No podía ver nada, la venda que la señorita de piel blanca le había colocado le impedía ver a su alrededor y las cuerdas ajustadas que llevaba le impedían separar las manos de la espalda para poder tantear lo que sea que se encontrara a su alrededor.

Hacía frío, eso era seguro, la ropa que se había colocado en la mañana no lo protegía del todo, ¿Humedad? Sí, podía sentirla traspasar su camisa, el frío piso, duro como una piedra, podía darle una idea de donde estaba, en una especie de celda, más o menos.

Quizás pasaron minutos, horas o segundos, quien sabe, no se percató del tiempo que pasó desde que fue dejado inconsciente. Aún en esa situación solo podía pensar en una sola persona... En Law... ¿Le habrán hecho algo a él también?... ¿Se encontraba bien? Rogaba en su mente porque fuera lo último y no lo primero, no estaba asustado, solo preocupado.

Comenzó a removerse en el suelo incómodo, nunca fue una persona que se quedara quieto fácilmente, pero sus músculos estaban paralizados, así que no pudo hacer más que pequeños movimientos raros.

- Creo que estoy en problemas... -Dijo para si mismo- Tengo que salir de aquí...

Completamente a oscuras, sin poder ver nada, comenzó a desesperarse mientras escuchaba pasos acercarse, seguidos de un chillido de la cerradura al abrirse, dejó de moverse, aparentando estar todavía inconsciente mientras escuchaba atentamente a la persona que había entrado.

Sintió como alguien le sujetaba de uno de sus brazos y comenzaba a alzarlo, con cierta dificultad al parecer.

-¡Este tipo pesa una tonelada! -Habló por fin, era la voz de una mujer de no más de veinticinco años, su comentario le hizo un poco de gracia a Luffy- ¡Venga, deja de verme y ayúdame a levantarlo!

Escuchó a una segunda persona acercarse, esta lo tomó con más cuidado del otro brazo y terminó de alzarle, se sorprendió un poco ya que solamente había logrado escuchar a una de las personas acercarse, a la mujer torpe que no podía cargarlo sola.

-¡Joder! -Continuó la misma mujer- ¡Esta me las pagará el joven amo!... Ya suficiente es que haya matado a mis anteriores esposos... ahora me hace cargar con el novio del estúpido de Trafalgar...

-Que mujer tan quejumbrosa... -Pensó Luffy con una leve mueca de disgusto.

-¿Qué tienes? -Preguntó la mujer, seguramente a la otra persona que lo cargaba- Te noto muy callada... no es usual en ti Mo...

-Shhh -Interrumpió lo que la otra mujer iba a decir.

Luffy se empeñó en poner atención, pero la otra persona no volvió a hablar ni emitir sonido alguno, la mujer simplemente dio un suspiro resignado y se quedó callada el resto del camino.

Luffy pudo distinguir que bajaban unas escaleras de caracol, el hecho de que no viera nada no quiere decir que no percibiera algunas cosas de su alrededor, mientras más bajaban más frío se hacía el ambiente y una sensación de peligro inundaba su mente.

-¡Qué frío hace aquí abajo! -Volvió a hablar la mujer torpe- No entiendo porque quiere hacerlo aquí y no haya arriba donde la temperatura y la iluminación es mejor...

Hubo un silencio por parte de la otra persona, Luffy pensó que quizás no tenía ganas de hablar, no se percató cuando comenzaron a caminar en línea recta sino hasta que se detuvieron.

-¿Quién toca la puerta? -Dijo la mujer con tono de broma, pero tampoco hubo respuesta- Bien, como quieras...

Se escuchó el ruido de la puerta abriéndose lentamente, al parecer era de madera y bastante antigua, se mantuvieron de pie ahí mismo durante un momento, después, continuaron avanzando a paso lento.