•𝐸𝓈𝒸𝒶𝓅𝑒 •The Flash [Barry Allen]

-Capítulo 4: Los efectos-

Oscuridad. Todo era negro. Raven no  podía abrir sus ojos, era como si se encontraran pegados. Por más que intentará separarlos, estos no querían hacer lo que ella les pedía. Podía escuchaba el sonido de la naturaleza, se escuchaba como si estuviera a metros de distancia, pero por las hojas que sentía en la espalda, los árboles no tenían que estar muy lejos. Intentó moverse, pero nuevamente, su cuerpo no cooperó. El pánico empezó a invadir a Raven, intentó a moverse como loca, pero todos sus intentos fueron fallidos; su cuerpo no reaccionaba. Su mente estaba en blanco, no podía recordar nada; lo ultimo que recordaba era caer al agua, imágenes de estar en una cueva rondaban por la cabeza de la chica, pero nada era claro.

Raven supuso que se había desmayado después de eso, pero luego recordó la tormenta, y los rayos... los rayos. Le había caído un rayo, eso era, ¡genial! Ahora tenía una historia asombrosa que contarle a sus hijos, si es que llegaba a tenerlos.

Sus ojos se empezaron a abrir, pronto, sus dedos se empezaron a mover. Raven soltó un gruñido al intentar moverse, su cuerpo estaba reaccionando. Con todas sus fuerzas, Raven se incorporó, recorrió con la mirada sus alrededores,efectivamente, se encontraba en una cueva, una grande y oscura cueva. Miró su cuerpo, su ropa estaba rasgada y sucia y tenía sangre en algunas partes, también le faltaba un zapato, y su calcetín estaba roto, dejando a la vista su dedo gordo a la intemperie.

Cuidadosamente, Raven se paró del piso, cubriéndose lo ojos con ambas manos, ya que el Sol era bastante brillante y le lastimaba los ojos. Sacudió su ropa, pues tenía mucho polvo, haciéndole toser un or de veces. Su garganta estaba , y su estomago rugía.

Raven Camino hasta la salida de la cueva, no podía caminar bien, por lo que le llevó más tiempo llegar a esta. Ya afuera, Raven contempló sus alrededores, se encontraba en el bosque, más específicamente en su "zona".

La chica cerró sus ojos, concentrándose en el otro punto de la laguna, y para su sorpresa, en unos segundos ya se encontraba ahí. Todavía tenía sus poderes. Pero algo se sentía diferente, se había teletransportado más rápido de lo normal, y cada vez que pensaba en sus habilidades, una corriente pasaba por todo su cuerpo.

Raven se sentía muy cansada, pues parecía como si no hubiese comido por meses, su garganta estaba extremadamente seca, lo que le hacía imposible hablar, y parecía como si sus piernas no pudieran aguantar el peso de la chica, pues temblaban como gelatinas.

Raven miró hacia su derecha , el agua estaba cristalina, y algunos peces saltaban y hacían piruetas en el aire y después de sumergían. Podía escuchar a otro animales a lo lejos, pero no les dio mucha importancia, no ahora. Había una fuerte brisa, lo que hacía que las hojas de los árboles chocarán contra el piso.

Raven empezó a caminar entre los árboles, admirando sus alrededores, y por más que le costará admitir, se sentía perdida. No recordaba cómo salir del bosque, lo que la estaba llenando de pánico, pero no dejó de caminar. Su cabello chocaba con su cara, gracias al viento, y con manos temblorosas, Se lo apartaba y lo colocaba detrás de su oreja. El pánico la invadía más con cada paso que daba. No sabía cómo salir. Así que Raven corrió. Corrió como nunca, y comprobando que su velocidad seguía allí, Raven salió del bosque.

Raven no pudo pasar desapercibida la velocidad en la que había corrido, había corrido más rápido, era como si sus poderes hubieran mejorado. Ahora era más rápida, demasiada, podría decir Raven, ya que en pocos segundo ya den encontraba en su casa.

Raven sonrió al notar todo eso, a parte de que ahora ya se encontraba en su casa. Todo seguía igual, platos sucios por todos lados, ropa tirada por el piso. Exactamente igual, incluso el calcetín lleno de mermelada seguía colgado de la lámpara de la cocina.

Con un suspiro, Raven se dejó caer al sillón blanco que se encontraba detrás de ella. Estaba cansada, pero necesitaba agua, así que tallándose los ojos, Raven se encaminó hasta la cocina, donde agarró un vaso, y se sirvió agua. Después de varios vasos, Raven se dirigió as su baño para tomarse una ducha, apestaba, y su cabello era un desastre.

Después de la ducha, Raven se dirigió a su cuarto, mañana no iría a trabajar, ni ese día. El sonido de un perro ladrando, la cortó  de sus pensamientos, era su teléfono. Raven levantó su teléfono de su cómoda, el reloj marcaban las 5:45, pero lo que al extrañó fue ver que la fecha decía 5 de octubre, no le dio mucha importancia, ya que luego su teléfono se volvía loco, y cambiaba las fechas y horas. Pero nunca le había pasado por tanto tiempo ¿por qué 9 meses? Dejando su celular en su mesita de noche, Raven se metió entre las cobijas, acurrucándose entre sus almohadas y las pelusas cobijas. Prendió la televisión, poniendo Netflix luego luego, Pretty Little Liars, se empezó a reproducir en la pantalla, pero Raven estaba demasiado cansada, y en algún punto se quedó dormida. 

Raven se despertó horas después, ya era le otro día. Se incorporó de su cama, checó su celular, y se dio cuenta que tenía miles de llamadas perdidas, todas eran de hace meses, lo cual la extrañaba muchísimo. La última llamada que recibió fue de hace 3 meses, y era de Oliver. Decidió llamarle después, primero hizo su rutina de todos los días.

Raven salió de su casa y fue hacia su coche, lo puso en marcha y se dirigió a la cafetería más famosa de Central City, Jitters. Raven entró por las grandes puertas de cristal, había una larga fila, pero no tenía otra opción más que formarse. Por fin fue su turno y pidió un café, se sentó en una mesa que se encontraba vacía y sacó su celular. La fecha no había cambiado, seguía 9 meses adelantada. La puerta principal se abrió, y entró un chico más o menos de su efad, tenía ojos hermosos, eran verdes. Su cabellos, hacia a Raven caer a sus pies; a Raven no le importaba mucho el físico, pero en lo primero que se fijaba en un chico es en el cabello. Raven abrió los ojos como platos al darse cuenta de que se trataba de Barry Allen, el chico que había conocido en la estación de policías.

Raven se quedó viendo al chico, hasta que se dio que cuenta que el chico podía sentir su mirada y se removía incómodo en su lugar. Barry caminó hacia una chica, pero Raven no podía ver de quién se trataba. Raven se acercó un poco más y se dio cuenta de que era Iris. Ella hablaba animadamente con él, así que Raven decidió no interrumpir y salió de ahí, pero se detuvo justo en la puerta al escuchar a alguien llamar su nombre.

-Raven- dijo una voz muy conocida. Raven se dio media vuelta y se encontró con Kira, tenía la boca entre abierta y los ojos bien abiertos. Raven la miró extrañada y le sonrió de lado. Kira pestañeo unas veces y se abalanzó en Raven, le dio un fuerte abrazo que Raven le  devolvió enseguida.

-¿Qué te pasó? ¿dónde estuviste?, ¡te busqué por todos lados!" Le dijo viéndola  de arriba a abajo. Raven la miró extrañada, esperando a que continuara. Kira la vio con los ojos bien abiertos y con una mano en la cintura.

-¡Desapareciste por 9 meses!- Raven abrió los ojos como platos, ¿qué acababa de decir?

Ahora todo tenía sentido, su teléfono no estaba descompuesto, ella estaba mal. Sí era octubre y no enero. Raven intentó decir algo, pero nada salió de su boca. Raven empezó a tener un ataque de pánico, el mundo empezó a dar vueltas, su vista se empezó a nublar, y se le estaba haciendo difícil respirar. Raven corrió hasta la puerta, empujándola y casi rompiéndola en el intento, levantó su mirada y se dio cuenta de que Barry la estaba mirando. Raven corrió por las calles, hasta llegar a un callejón. Comprobó que no hubiera nadie y corrió hasta su casa.

¿¡ 9 meses!? ¿Había caído en un coma o algo parecido? Caí en un coma o algo parecido?! Y todo empezó a regresar, la explosión y la onda gigante acercándose a ella, y el rayo. Había sido la explosión. Por eso ahora podía correr más rápido. Ahora era mejor.