Locura Encarcelada

Capítulo 17: El golpe

Caía el sol y crecían nuestras ganas de salir, pero crecían mas los miedos porque nos atrapen.
Mike se echo a dormir y yo a ratos me levantaba para dar vueltas en la celda ya que los nervios me impedían dormir, y una de las veces que me levanté, creo que fue a las 00:24... vi que cogía un cuchillo de su tobillo, yo le puse la mano en su muñeca y se detuvo, lo dejo en su sitio y dijo "lo tengo que hacer...".
yo me subí a su vera y le pregunte el porque era una necesidad, si se supone que era satánico, debería ser obligación.
-si... quizás...- dijo Mike con dificultad.
- Mi.. Mike... Estas llorando?..- le pregunte sorprendido.
-No es nada Liu, es que de tanto bostezar al final se suelta alguna lágrima de cerrar los ojos.
Yo me volví a la cama pero sabía que me estaba mintiendo.
Llego la hora y cogió él las llaves y abrió lentamente la puerta... sin hacer ruido, estuvimos de puntillas saliendo de ahí, vimos un guardia lejos y nos daba tiempo a bajar a la sala de abajo.
bajamos las escaleras en pleno silencio, llegamos a la sala de abajo y había cajas de madera en las que nos pudimos ocultar en lo que aparecía Laura, la vi en su celda y la estaba abriendo... pero había un guardia que se dirigía ahí y se lo dije a Mike, rápido, miro al suelo y vio una piedra pequeño y la lanzo al lado contrario de la celda. El guardia notó el sonido y fue apuntando hacía la zona, y laura salió sin problemas y la indicamos que estábamos en las cajas y vino silenciosa con nosotros. Y Laura abrió una ventana con la que pudimos salir, había un arbusto y nos podíamos ocultar.
Salimos uno a uno del edificio de las celdas.
Vimos a unos guardias y muchos focos para vigilar, estando ya en el patio ya, estuvimos caminando poco a poco sin ser vistos y los focos casi nos ven en varias ocasiones, gotas de sudor caían de la frente y nuestros pulso temblaba.
llegamos al edificio principal y no pudimos entrar por la puerta porque estaría la mujer esa vigilando, entramos por una ventana que estaba por detrás del edificio y nos colamos dentro, había dos plantas y arriba estaba el ordenador principal, subimos las escaleras y no había guardias pero la puerta estaba cerrada.
-Oye Laura, ¿tienes dos horquillas?- preguntó Mike en bajo.
Laura asintió y se las dio mientras nos dijo que vigiláramos la zona a ver si venían guardias. Mike manipulo la cerradura con mucha angustia y le dije con gestos que venían dos guardias por uno de los lados, abrió la puerta y entramos corriendo y cerramos en silencio la puerta mientras nos apoyamos en ella para que no nos vean.
yo saque del tobillo el USB y lo coloqué en el ordenador y se ilumino la pantalla donde ponía un porcentaje del virus y Mike sacó el cuchillo de uno de sus tobillos para defenderse por si viene un guardia...
Y se acabó, el virus ya estaba en la red.
Y nos volvemos de nuevo a nuestras celdas. La vuelta fue mas tranquila.