Abro los ojos.
Miro hacia un lado y veo a Mike y Lucas durmiendo tranquilamente, parecen angelitos.Sería una pena que alguien les despertara...
- ¡Hey enanos,arriba! -digo revolviendo sus cabellos.
Mike se empieza a quejar en voz baja,a diferencia de Lucas, que parece disfrutarlo.
- ¡Eres una pesada! -salta Mike,mi querido hermano pequeño.
- Tú si que eres un pesado -digo levantándome. -¿Que queréis comer?
Por alguna razón llevo mis manos a cada caso de mi cintura.
- ¡Pide una pizza! -dice Lucas sentándose.
- ¡Si! Una de jamón y queso -dice Mike. -Y otra cuatro quesos.
- Mira que os gusta la pizza -digo buscando el móvil. -toma,llama y pide una de cada - le paso el móvil a Lucas y camino hacia mi cuarto.
- Bien que te quejas,pero no te opones -dice Mike.
Entro en el baño y me doy una ducha rápida. Salgo con una toalla y me pongo ropa cómoda: una camiseta con pantalones cortos.
Vuelvo a la sala para encontrar a los mocosos igual que cuando entre a la habitación; en el sofá a medio dormir.
- Hey,par de vagos.
- ¿Qué quieres ahora?
- Que se den una ducha,están llenos de comida. ¡Vamos!
Ambos se quejan.
- Ya vamos, mamá -susurra Lucas riendo en voz baja.
- ¡Hey! Te he oído,enano
Los niños entran al cuarto riéndose.
El timbre suena. Camino hacia la puerta y al abrirla veo al repartidor.
Le pago y sujeto las cajas de pizza.Las dejo en la mesita de la sala. Enciendo la tele y tras sentarme en el sofá, agarro un trozo de pizza y le doy un mordisco.
Minutos más tarde los niños salen del cuarto y se dejan caer en el sofá soltando un suspiro.
- Estoy tan cansado -dice Mike agarrando un pedazo de pizza y dando un bocado.
- La vida es muy dura -le sigue Lucas, haciendo énfasis en la palabra 'muy'.
- Estos jóvenes de hoy en día, no aguantan ni una pequeña pelea -bostezo.
- Por cierto, gracias por hacerte cargo -dice Lucas.
Lo miro de reojo.
- No hay de qué enano -digo, agarrando otro pedazo de pizza.
- Por cierto,¿mamá y papá no han dicho nada? -pregunta Mike nervioso.
Suspiro.
- Sólo iniciaste una pelea,creí que sería algo grave cuando papá me llamó ayer. Puedes estar tranquilo esta vez. -aseguro.
Ambos se quedan en silencio.
Terminamos las pizza en unos minutos y tras quedarnos reposando media hora,los mando a hacer la tarea.
Tiro las cajas vacías a la basura.
Apago la tele y camino hacia mi cuarto buscando la web del instituto en el móvil.
Busco mi mochila y empiezo a hacer la tarea,pero a los pocos segundos mi teléfono empieza a sonar.
- ¿Si?
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Una Más
Teen FictionUna más, eso era yo. A la que manipulaban. A la que le veían la cara. De la que se reían. Pero eso se acabó. Nunca más volveré a caer ante nadie, nunca más volveré a plantearme si soy suficiente, nunca más dudaré de mi, porque esta muñeca nunca más...