CAPITULO 28

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Salimos y el me llevo hasta una librería,dónde comprariamos lo que necesitábamos.
Estacionamos y caminamos tres cuadras.En el camino vi una veterinaria y tuve que parar.Vi una gata hermoso y un perro muy tierno.
Después seguimos caminando,mientras le decía a Brad que deseaba esos animales y el me decia-Bueno-.Eso era todo lo que me decía.Cuando por fin llegamos compramos todo.Debo admitir que fue mucho y el pago todo,pero por supuesto ,como es hombre se quejó.
-No voy a poder sobrevivir un mes con vos-Dijo riendo.
-¿Por qué?-Pregunté comenzando a reír.
-Porque me voy a quedar sin plata-Dijo mirándome.
-Bueno,nunca dije que ser mi novio fuera fácil-Dije.
-Ya lo veo-Dijo y luego me besó.
-Te amó-Le dije cuando nos separamos.
-Yo también-Dijo sonriendo.
No había nada más lindo,que su sonrisa.
Luego caminamos devuelta al auto y nos dirigimos a el departamento de Brad,mi novio.No lo podía creer.
Luego cuando llegamos,tenía ganas de tomar café.Entonces Brad dijo que iría a buscar.
Salió y yo me quedé,me pareció raro que no llegará.Después de una hora por fin llegó,pero me asombró que traía una caja enorme con agujeritos.
-Te amó princesa-Dijo y me entregó la caja.
-¿Qué es esto?-Pregunté sin entender.
-Un regalo,espero que te guste-Dijo sonriendo.
No esperé más y la abrí,me quedé helada al ver lo que había dentro de ella.
Había una gatita persa,con un collar rosa.
Y un bulldog francés,con un collar celeste.
Eran las cosas más tiernas que había visto en mi vida.
Cuando reaccione me levanté y de un salto abrace a Brad.Me separé y el me beso.Estaba muy feliz,el me hacia feliz.
-¿Cómo se van a llamar?-Preguntó sonriendo cuando nos separamos.
-Todavía no se,todo me tomó por sorpresa-Dije.
-Lo sabía, soy el mejor novio del mundo-Dijo riendo.
-Si,claro-Dije sarcástica.
-¿Ah,no lo soy?-Dijo poniendo cara de perrito mojado.
-Si-Dije riendo y lo besé.
-Casi me olvidó,ya vengo-Dijo y se fue.
Entonces senté en el sillón,entre a Google y busque nombres para gatos y perros.Luego de unos minutos, Brad apareció con una bolsa de Starbucks.
Nos sentamos a tomar el café mientras buscábamos nombres.
Luego de un rato decidí que la gatita se llamaría Buba y el perrito Keko

Por Fin Te EncontréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora