Ella era hija de la música...
Pero no buscaba ser famosa, No necesitaba tener miles de seguidores. Ella solo buscaba algo que muchos tienen.
Pero su gran talento la lleva en un gran viaje cuesta arriba hacia la sima de lo más alto.
Consigo viaj...
Me quede completaente paralizada observandolo. No podía creer que sea el. El último recuerdo en mi mente que tengo de el es segundos antes de que cayera en coma por el impacto de la roca que Rocío lanzo a mi cabeza.
-Coiban... - Escucho que de pronto dicen mi apellido y él me mira rápidamente por lo que corro mi mirada al instante.
-yo? -
-Bueno, creó que eres la única Coiban aquí... - Río la profesora. Me pare tímidamente y tome aire para empezar.
-Mi nombre es ______ Coiban...-
-Eres hija de aquel que se suicidó?- Pregunto uno sentado a lo lejos y me sentí incomoda.
-Hagan silencio, cada uno tuvo su tiempo para hablar- Dijo la profesora en voz alta y me miro para que continuara.
-Bueno... Si, soy hija de... "aquel que se suicido".. Emm.... - me quede trabada sin saber como continuar.
-_____, cuéntame que te gusta hacer, con quien vives... Esto es para que nós conozcamos.- Dijo la profesora.
-Hago música.. Eso es lo que me gusta hacer y vivo con en ex de mi madre...-
-que? A caso tus dos padres te abandonaron idiota?- Pregunto una y todos rieron menos Andy el cual no dejaba de ponerme nerviosa con su mirada seria.
-Basta!, no voy a aceptar cosas como esta en mi clase - Grito la profesora retandolos.
-Bueno, no importa. Eso es todo. - Dije y me volví a sentar.
La clase continuó y yo aun sentía su mirada a cada momento. Me ponía tan nerviosa que lo único que deseara es que las horas en la escuela se pasaran rápido. Se escucho de pronto el timbre del recreo y yo me pare rápidamente para salir a tomar aire puro ya que allí adentro sentía que no podía respirar. Alcé mi mirada y el estaba solo sentado contra una pared y llevaba auriculares en su oído. Al parecer estar sin sus amigos o el hecho de ya no ser un niño lo hacia parecer un chico más tranquilo. Aun así no olvidaba todas las cosas malas que me había hecho de niña.
Cuando al fin termino el horario escolar, todos salimos a la calle para volver a casa cuando me encuentro una hermosa sorpresa. Brendon estaba afuera con gafas de sol puestas y apoyado en su auto esperándome. Se veía tan sexy.
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Corrí hacia el y lo bese profundamente mientras el me sostenía en el aire agarrado de mi cintura.
-Que haces aquí Urrr?-
-Vine a raptarte luego de tu primer día. Además... Me moría de ganas de verte vestida de colegiala. - Dijo haciendo gruñido con la boca y apretó mi trasero con sus dos manos pegándome más a su cuerpo para luego besarme.
-Amor para un poco, estamos en la calle.... - Dije pero el no me presto atención porque movio su mano saludando alguien que no llegue a ver.
