Then and now... And always

El sueño

Recuerdos. Ellos rigen mi mente. Mi pasado siempre está presente, pero estoy consciente de que lo más importante es el ahora.

—Estamos con la gran leyenda, ídolo de muchos, la carismática Adele Adkins. Es un honor estar aquí con usted—la entrevistadora es joven, unos veintidós años mínimo. Gafas, cabello largo y liso. Puedo ver cómo tiemblan sus manos mientras cambia la hoja de su libreta sobre su regazo. Eso no está captado por las cámaras obviamente.
—Owww es un placer para mí que me entrevisten. No tiembles cariño—puse mi mano sobre la suya y reí—. Solo soy yo jajajaja.
Nos reímos.
—Gracias jajajaja. Pues... No sé cómo comenzar—acomodó sus gafas—. Empecemos con el álbum que todos amamos. "Adele", un álbum con ventas estratosféricas a nivel mundial, con él conocimos a Adele Adkins. A sus veintinueve años comenzó su historia.
—No puedo creer que haya pasado tanto tiempo desde el dichoso "Adele" jajajaja.
Ella también rió al igual que el camarógrafo.
—¿Qué la inspiró para escribirlo?—la chica me ve con curiosidad—. Hemos escuchado sus inspiraciones pero, queremos saber, ¿qué fue aquello que la impulsó a decir: "quiero hacer música"?
—¿Qué me inspiró?... Conocí a un hombre, hace años, él me dijo que tenía talento cuando me vio cantando en un restaurante en el que trabajaba, pero no se dio la oportunidad de hacer algo relevante. Después, una mujer—dije tocando el dije de piano que cuelga de mi cuello—, bastante importante en la vida de mi familia, ella me hizo darme cuenta de que tenía que dedicarme a esto porque... La música está en mi.

Es por eso que digo que los recuerdos rigen mi mente. Alex es el hombre...

***
—Señorita ocupada—dijo sonriendo—. ¿Cuándo firmará los papeles del contrato? Esa voz tiene que ser escuchada.
—No lo sé—dije recargándome en su hombro—. Me da miedo.
—¿Por qué temerle a tu talento? A tu pasión.
—No lo sé, hay algo que... Me da miedo. Pero si lo haré. Leeré el contrato y si me convence firmaré. En serio quiero ser cantante...
***

Ya sabemos que pasó después. Embarazo, accidente.... Pero ese tema quedó atrás.

***
—Tocas hermoso—dijo con una voz suave y a la vez seca. Era una combinación bastante extraña.
—Gracias—dije un poco avergonzada—. Perdón por el ruido.
—Eso no se llama ruido, se llama música, arte. Mucho gusto, Elizabeth—dijo extendiendo su mano.
Me levanté y con una sonrisa le respondí el saludo.
—Adele. Es un placer.
—Bonito nombre para una bonita chica—dijo sonriendo—. Simon tenía razón al describirte.
—Oww jaja gracias.
—Entonces, ¿eres música?
—No no, soy la jefa de una empresa de música. Antes...tocaba y eso pero ya no más.
—¿Por qué? Cuando uno tiene tanto talento no hay que desperdiciarlo.
***

Ella es la mujer. La tía de Simon, Elizabeth. Conociendo su vida, he visto varios de sus conciertos de piano en las fiestas familiares de Simon, son videos antiguos que parecen películas de los ochentas, tan hermosos.

—...y por supuesto mi esposo—sonreí—. Él es mi apoyo incondicional.
—Su esposo... Entremos en ese tema, ¿se puede?
—¿Mi esposo es un tema?—dije sonriendo.
—Bueno jajajaja—la chica bajó la mirada y volvió a subirla—. Su familia. Sé que es bastante reservada pero...
—Puedes hacerme las preguntas y analizaré cuales puedo responder y cuales no—dije cruzando mis manos en mi regazo.
—Excelente—hojeó su libreta hasta que encontró la página indicada—. Sus hijos..
—Sin comentarios—dije tajante.
—Bueno, emmm... Su hijo Angelo es tema de conversación en...
—Sin comentarios. Nada de mi hijo ni mi pequeña por favor.
—Esta bien—decepcionada buscó más preguntas.
Angie, que está al lado del camarógrafo me indicó que me calmara. Estoy calmada, pero con mis hijos soy muy sobre protectora. No quiero que los involucren en mi fama, lo intento, aunque es bastante difícil, sobre todo con la rebeldía de Angelo. No sé por qué se convirtió en un chico tan rebelde pero espero corregirlo pronto.