Le dolía,
Le dolía que no sabía que le amaba,
Que no supiera ni de ella,
Que sus ojos ya, ni la miraban,
Ese mar donde ella se perdía cada día,
Esa paz que le transmitía el azul mar de sus ojos.
La sonrisa más bonita que había visto en su vida,
La sonrisa que la hacía sonreír.
La que llorando,
Cada lágrima se perdía en los ojos de su amada y el azul se hacía más puro,
Más limpio,
Más cristalino.
Le dolía,
Le dolía que la vida no hubiera sabido tratarla,
Que la vida no le ayudaba,
Que sin ella no era nada.