El proyecto Berwick

Prefacio

Prefacio

No sé por qué estoy haciendo esto. No sé qué esperan ellos que diga. Siendo honestos, no les creo cuando me dicen que no escucharán estas grabaciones, porque sé que ellos mienten. Por otra parte, ¿tengo siquiera algo interesante que decir? ¡Aff, tal vez sí!

Como tengo tanto tiempo libre he estado repasando los últimos años, y ahora me doy cuenta que es probable que mi historia sea digna de contar. No pienso decírtelo a ti, grabadora, porque aún no creo que seas de confiar. Pero sí puedo contarte lo que pienso en este mismo momento... Sé paciente conmigo en mi intento de ser profundo (de todas maneras no tienes nada mejor que hacer, ¿o sí?)

Aquí voy: creo que la mayor lección que he aprendido de todo el dolor y el peligro es que los humanos somos una sola especie, y aun así, todos somos enemigos. Somos los que más tienen poder en hacer daño y los que más comprenden el significado de sufrimiento. Somos los que más luchan por sobrevivir, y los que nunca se conformarán...

... Somos codiciosos.

Podría usar miles de palabras y argumentos para contarte lo terrible que son los humanos. Eso es pan comido... Incluso superfluo, pues de seguro ya lo sabes. Lo que más quiero que recuerdes de todo esto es que ¡somos codiciosos!

La codicia es la única razón de que esté aquí; es lo que empezó todo. Y sí, tal vez pienses que mi historia es la típica donde el héroe quiere sobrevivir y salvar al mundo de los villanos y bla, bla, bla... Brevemente te diré que nada es tan blanco y negro en la realidad: en este mundo hasta los «buenos» buscan sobrevivir, y para ello, alguna vida siempre será sacrificada a cambio. La moralidad no tiene cabida aquí.

Sí puedo decir que algunos son peores que otros. Pero eso sólo me hace repetir lo que ya sabes, otra vez.

Lo que importa es que estamos en el mismo contexto, ¿verdad, grabadora?

Verás, incluso cuando al final sepas lo que sé y lo que alguna vez sabré, debes entender que yo no soy el «bueno». Si alguien merece ese título en mi historia, ese definitivamente no soy yo. He sufrido muchas veces, experimentado muchos tipos de dolor. Pero también he hecho cosas peores, algunas a personas que ni lo merecían.

No obstante, tampoco soy el villano. No sé qué opines del Museo, amiga grabadora, pero para mí ellos son los villanos. Ellos controlan todo y han arruinado miles y miles de vidas..., todos los que llegaron a importarme están incluidos en esa lista. Son poderosos y siempre buscarán serlo más, porque, sin importar lo muy evolucionados que crean ser, son humanos.

Ahora me doy cuenta que no me he presentado, grabadora —debería darte un nombre más apropiado si vamos a continuar hablando—. Soy Benjamin Smith, o Kesller, dependiendo de cuánto me conozcas, y desafortunadamente, también soy humano.