Cambio de roles.

Capítulo 29: El paso del tiempo

He estado recordando los momentos que te di
Cuantos tu me diste y por que ahora estoy aquí

El ardor de su mejilla no se comparaba en nada con el de su corazón, parecía como si le fuere abierta una herida sangrante y peligrosa

Lo que simples palabras podían hacer en él

Ella no estaba en las mejores condiciones, dolida hasta el alma pensaba ilusa un nuevo comienzo, si el destino será caprichoso y no cumple con los deseos de nadie

¿Que hacer? ¿Qué decir? ¿Había algo que pudiera remediar esto?

Seguramente

Pero ninguno dejaría su orgullo de lado, está vez era demasiado

Akane se limpio las lágrimas de indignación, esto era la gota que derramó el vaso y sin mirar atrás se marchó, saltando de tejado en tejado

No quería ver ni escuchar a nadie, en el camino se encontró con Ryoga y Ukyo

Los paso de largo pero ese breve instante fue suficiente para que notaran el camino de lágrimas que surcaba las mejillas de la pelirroja

Sin comprender caminaron en la dirección de donde había salido encontrándose con Ranma andar cual zombi arrastrando sus pesados pasos sintiendo un escozor en los ojos que amenazaba con hacerlo llorar

Sentada en el suelo pensando que te quiero
Que te quise tanto y que tu amor me es necesario

¿Cómo fue tan estúpido para estar cegado?

Confiaba plenamente en Akane siempre lo hizo, pero el hecho de que le ocultará algo tan importante como su maldición le hacía pensar cosas incoherentes

De nuevo sus celos ardían por su sangre reclamando venganza de aquellos que disfrutaron las caricias prohibidas de la peliazul

Su subconsciente le decía que esperara, que había una explicación lógica pero la terquedad de si mismo lo empujaba a sus instintos más primitivos. Ella era de el, punto y no se permitía ni le permitiría a ella estar con alguien más era insulso y vacío

-¿Ran-chan?- Ukyo lo saco de sus tormentosos pensamientos, en cuanto vio a Ryoga se le fue encima

-¿A CASO TU TAMBIÉN?- Le grito en busca de respuestas forzadas

-¿Qué te ocurre?- Ryoga sabía de antemano que era una pelea la que el azabache libraba consigo mismo

Déjenme llorar quiero sacarlo de mi pecho
Con mi llanto apagar este fuego que arde adentro

En el tejado de una casa vacía y vieja Akane lloraba, su corazón se había equivocado de nuevo ¿Por qué?

Déjenme llorar
quiero despedirme en silencio
hacer mi mente razonar que para esto no hay remedio

Quería echar fuera todos esos sentimientos confusos y dañinos, de nuevo estaban en la línea donde cada uno lastimaba al otro a su manera

Fueron tan bellos encuentros amarnos sin miedo
Eres tu la noche y yo tu sueño
tu mi cuenta cuentos

Habían pasado dos semanas mas, y desde ese día ambos no se dirigían la palabra, ni siquiera una mirada

Los mayores de la casa Tendo estaban tardando más de lo debido en su entrenamiento

Y la presencia de Danniel en los ensayos no ayudaba para nada, coqueteaba a diestra y siniestra con la de ojos avellana quien ya no le tomaba importancia y comenzaba a acostumbrarse a los halagos de el rubio mayor