Levantate, que aún estamos a tiempo. Estamos a tiempo de poder alcanzar el amor, o una botella de alcohol. No importa, lo que alcancemos primero estará bien.
Ven, vamos, levantate. Si el día de hoy no nos levantamos habrá peores cosas por las que pasar. Ven levantate y mirá de una vez para arriba y vé lo hermoso que está el cielo y lo luminosa que son las estrellas. Aprecia lo poco que te da el paisaje y la vida, porque si tienes que vivir de lo que te da él, estarás en el suelo un tiempo bastante largo.
Ven, te invito a que te levantes, es más te invito a dar aunque sea un paso y si no puedes hacerlo, estaré para ayudarte.
¿por qué no respondes? Temo haber llegado tarde...oye ¿me escuchas? ¿por qué ya no lates? Hasta siempre.
Creo que mi corazón no habría podido morir sin que le dijera que aún estabamos a tiempo. Eran mis palabras mentirosas las que necesitaba para seguír su rumbo. Allí, donde tanto amo es donde mismo murió. Murió en dolor, murió en pena, en tristeza. Es que así cariño mio es como lo haces sentir cada día. Siento que estoy a tiempo, pero no me puede creer esa insulsa mentira que ni yo misma me creo. Te cuento, que no es la primera vez que muere mi corazón, no es la segunda y mucho menos la tercera. En menos de 15 días a muerto más de 20 fotos, a muerto más de 15 estados, y va a seguir muriendo con cada palabra tuya. En suma, ya ha muerto 35 veces. Ha muerto más de dos veces en el día.
Hoy, ¿cómo le explico cuando empieze a latir nuevamente que tu ya no vendrás que tu ya tienes otra? ¿cómo le explico que te has ido para no volver? ¿cómo le explico que tiene que dejar de amar lo que tanto bien le hacia? Es que él piensa que volverás, por eso se niega a olvidarte. Piensa que si en el pasado tanto bien y amor le dabas, hoy que está mal igualmente lo harás. Olvida la parte mala, y yo ¿cómo le explico? Si puedes, ven y explicale tú. Por lo menos si ya no vivirá, podrá morir de una vez.
