[윤민] WhatsApp Y Algo Mas...

★ Cincuenta y Dos ★

JiMin

Apenas llego a mi departamento, salto del susto cuando, al abrir la puerta, oigo un grito de terror. ¿Por qué aún no me acostumbro a las películas de miedo y matanza de Ariadna?

Cierto, porque las odio.

Ella, al notar mi presencia (porque he dejado caer las bolsas del supermercado), apaga la televisión y se levanta del sofá para ayudarme con las compras.

- ¿Aún no estás lista? - pregunto, observando su atuendo; aún se encuentra con ropa de casa. Me quita las bolsas y corre a la cocina, evitando mi pregunta; niego divertido, mientras la sigo. -Ariadna, en media hora tenemos que llegar; no podemos dar una mala impresión. - Y tampoco quiero escuchar las quejas de mi madre, pienso.

-Es que... conoceré por primera vez a tu familia. - murmura preocupada. Tomo una manzana del frutero y me siento en la barra. - ¿Qué si no le caigo bien a tu mamá?

Eres mujer, con eso ya te ganaste su cariño de acá hasta Egipto. Te aceptaría aun si tuvieras un tercer ojo.

-Ven aquí. - extiendo mis brazos, y no tarda en acercarse para abrazarme. Dejo un pequeño beso en su cabeza. -Todo va a salir bien, te lo prometo. Y si te comienzas a sentir incómoda podemos volver, sólo es una cena para que te conozcan; no nos quedaremos. - levanta la mirada, parece estar más tranquila que antes.

-Jimin, más te vale que no tenga restos de manzana en mi cabello por tu culpa. - intenta sonar amenazante pero falla, soltando una risa. Se aleja de mí, no sin antes quitarme la manzana y correr hacia la habitación. - ¡En diez minutos estoy lista!

-Mi manzana...

Era la última.

El timbre de casa suena y me levanto para averiguar quién es. Extraño: recién llevamos un día viviendo aquí; no espero visitas, y mucho menos minutos antes de salir a la cena con mis padres.

-H-Hola, JiMin. - sonríe tímido. Me recuesto sobre el marco de la puerta, mientras le miro.

-No esperaba que vinieras. - susurro, mirándolo con más detenimiento que en la mañana; no ha cambiado mucho en estos años en los que no le he visto.

-Sí, bueno, quería hablar contigo. - agita una bolsa frente a mí. -Traje comida.

-Lo siento, Tae, tendrá que ser para después. - lo miro apenado, a lo que él cambio su sonrisa por un fruncimiento de ceño.

- ¿Tu prometida no permite que pases tiempo con tu mejor amigo? - alza una deja y se cruza de brazos. Gruño.

-Basta de hablar de ella como si fuera la mala aquí, ni siquiera te tomaste la molestia de conocerla cuando te la presenté. - le reclamo, recordando lo que había pasado esta mañana cuando lo cité a él y a JungKook para darles la noticia antes que a nadie. Por él haberse ido, gritando un 'No me interesa saber de esta', fue que tuve que irme con Ariadna a otra parte donde no fuese insultada; terminando, para mi maldita suerte, en la estúpida cafetería donde me encontré de nuevo al estúpido de Min YoonGi. -No debería estar hablando contigo después de lo que hiciste.

- ¿Sabes qué? A la mierda, venía con el fin de disculparme, sé que no fue muy buena mi actitud, pero tampoco es para que me hables así. - me mira molesto, pero no me muevo de mi lugar. - Que no deberías estar hablando conmigo, ¿en serio me lo estás diciendo? No pensé que nuestra amistad de décadas fuera menos importante que una chica que conoces, ¿hace cuánto?, un año.

-TaeHyung-

-Olvídalo, JiMin - me tiende la bolsa con comida, y se marcha.

Sí, esta vez ha sido mi culpa; lo admito.