Blinded Hearts. CAMREN.

Capítulo 3.

-¡Lauren!- me reprendió mi jefe, de cuya presencia no me había percatado.- Perdónela, ella es muy... ella- dijo sin saber que más decir.

-Oh, tranquilo- le dijo Camila sonriendo.

-Bueno Lauren te preguntarás por qué estás aquí- me dijo Jack y yo solo asentí- la señorita Cabello va a grabar un comercial y quiere que trabajes con ella ¿no es asombroso?- dijo emocionado.

-Preferiría no hacerlo- le dije encogiéndome de hombros. Jack me miró como si estuviera loca.

-¿Qué?- preguntó muy sorprendido.

-Pues eso, que no quiero trabajar con esta mujer- le dije seria.

Jack sonrió nervioso mirando a Camila- Nos disculpa unos minutos señorita Cabello- le preguntó.

-Oh, por supuesto- dijo ella sonriéndome antes de salir.

-¿Te has vuelto loca?- me preguntó Jack medio gritando.- Si no trabajas con ella se irá a otra empresa, y sabes lo mucho que ganaremos si ella hace aquí su anuncio.

-No me siento cómoda con ella Jack- le dije.

-Pero si no la conoces- me dijo sorprendido.

-Simplemente no quiero hacerlo- le dije dispuesta a salir del despacho.

-Lauren- me llamó antes de que saliera- si no lo haces estás despedida.

NARRA CAMILA.

No fueron más de dos minutos lo que esperé fuera y le firmé varios autógrafos a la secretaria del señor Olsen que estaba encantada, estuve un momento charlando con ella cuando Lauren y su jefe saliron.

-Encantada de conocerte, espero que nos volvamos a ver- le dije a Cassandra, la secretaria. Ella me sonrió embobada como solían hacer todos mis fans.

-¿Y bien?- pregunté mirando a los dos.

-Esta misma semana empezareis a trabajar, Lauren ha recapacitado y ha aceptado encantada.- me dijo el señor Olsen aunque la cara de Lauren decía todo lo contrario.

-Perfecto, mañana volveré y empezaremos.

-Lauren acompáñala- le dijo el señor Olsen a Lauren que solo sonrió forzadamente.

Subimos al ascensor con mis tres guardaespaldas.

-Me alegra que aceptaras- le dije mirándola.

-Oye quien te has creído que eres para venir así a mi trabajo y obligarme a trabajar contigo- me dijo medio gritando y muy cerca de mira cara, pude detallar sus ojos preciosos verdes que me embelesaron. Uno de mis guardaespaldas le cogió del brazo para separarla de mi pero le hice una señal de que no pasaba nada y la soltó.

-Él dijo que tu aceptaste- le dije.

-Si claro, me iba a despedir si no lo hacía- me dijo sin mirarme. Llegamos a la planta de abajo y todo el mundo nos miraba. Me paré delante del ascensor mirando a Lauren.

-¿Te he hecho yo algo? No se, algo muy malo he debido de hacerte- me dijo ella.

-No, solo quiero trabajar contigo- le dije encogiéndome de hombros.

-Que suerte la mia- me dijo sarcásticamente- bueno creo que puedes llegar sola a la puerta.

-Hasta mañana Lauren- le dije guiñándole un ojo a lo cual ella solo rodó los ojos.

Al salir me giré y ya estaba esa chica pegada a ella otra vez.

NARRA LAUREN.

En cuanto Camila salió por la puerta Vero se acercó a mi.

-¿Qué acaba de pasar?- me preguntó.

-Que casi me despiden por culpa de esa- le dije mirando a la puerta.

Le conté a Vero todo lo que había pasado desde que Camila Cabello entró por la puerta de la empresa.

-Que perra- dijo Vero indignada.

-Lo se- dije mirando a Vero- Bueno tengo que volver al trabajo, nos vemos luego.

-Te espero donde siempre- me dijo Vero sonriendo.

Yo no tenía permiso de conducir así que Vero me llevaba todos los días a casa. Por las mañanas iba caminando ya que si no, no tenía tiempo para caminar el resto del día.

El día acabó normal y Vero me llevó a casa. De hecho las siguientes dos semanas transcurrieron sin mayor incidente, dejando a parte lo insoportable que era Camila Cabello.

Me encontraba en mi mesa de trabajo y me extrañó no ver a Vero en la recepción cuando llegué, pero no le di la mayor importancia ya que estaría haciendo algún recado.

-Lauren- dijo alguien de repente haciendo que quitara la vista del ordenador.

-¿Qué?- le pregunté bruscamente a Camila.

-Han pasado dos semanas y no hemos avanzado nada- dijo.

-Ha sido a ti a la que no le ha gustado ninguna de mis ideas, repito NINGUNA.

-Es que no le pones interés- dijo quejándose.

-Como le voy a poner interés a un trabajo que me han obligado a hacer, y encima para ti- dije sin mirarla volviendo a centrar mi atención en la pantalla del ordenador.

Ella iba a decir algo pero mi teléfono sonó.

-Dime Vero- dije.

-Lauren, hoy no he ido a trabajar así que no podré llevarte a casa luego, he tenido un problema con mi madre, ya sabes...- dijo triste.

-Tranquila no te preocupes por mi, cuida de tu madre, te llamo luego- le dije y luego colgué el teléfono.

-¿Está todo bien?- preguntó Camila.

-Sí- le dije .

Miré hacia un lado para ver a Ally, una compañera de trabajo, era bastante simpática y me llevaba muy bien con ella.

-Hey Ally- le dije con una sonrisa.

-Dime- me dijo ella devolviéndome la sonrisa.

-Bueno, verás es que Verónica no ha podido venir hoy a trabajar y ella me lleva a casa todos los días, entonces me preguntaba si me podrías acercar hoy tú a mi casa- le dije cuidadosamente.

-Oh Lauren lo siento pero hoy he quedado y me vienen a buscar, de verdad lo siento- dijo con tono realmente arrepentido.

-Ah, tranquila no pasa nada.- le sonreí y volví mi vista a la pantalla del ordenador.

-Si quieres puedo llevarte a tu casa- dijo Camila de repente.

-Dios ¿por qué sigues aquí?- le pregunté mirándola fugazmente. No dijo nada así que seguí hablando yo- Tú sueles irte de aquí a las dos de la tarde y yo no salgo hasta las ocho ¿acaso vas a quedarte aquí hasta que sean las ocho?- le pregunté centrando mi atención en ella.

-Bueno...sí- dijo claramente nerviosa bajo mi insistente mirada.

-Como quieras- dije como si nada y volví al trabajo.

Estaría mintiendo si dijera que no había buscado información sobre Camila Cabello en internet, de hecho había estado una noche hasta las tres de la madrugada mirando todas las revistas en las que salía. También encontré información personal como el nombre de sus padres, que no se habla con ellos, pero no venía el por qué. Tiene una hermana pequeña llamada Sofía con la que sí tiene trato. Hace unos años declaró abiertamente ser bisexual. Su mejor amiga es Dinah Jane Hansen, y tiene un supuesto novio que es bastante feo, debo añadir. Por las redes sociales la gente dice que es una relación falsa y la mayoría no apoya dicha relación. En realidad Camila Cabello parece una buena persona, siempre es amable conmigo aunque ha rechazado todas mis propuestas. ¿Qué por qué soy borde con ella? Bueno, todavía le guardo rencor por estropearme mi camisa favorita.