Hace siete años...

Capítulo 49: reunión de amigos

MAYA

Habíamos quedado todos juntos en la cafetería donde hacíamos siempre nuestras tardes de chicas.

-amor, ¿vamos?-pregunté.

-¿Cómo me has llamado?-preguntó divertido.

-amor-dije en un susurro avergonzada.

-amor-dijo rozando mis labios-me gusta-me besó.

Jayden y yo estábamos genial. Había pasado una semana des del concierto y todavía no habíamos tenido ocasión de contarles a los chicos que estábamos saliendo porque a Jayden le hacía ilusión contarlo cuando estuviéramos todos juntos.

Al llegar a la cafetería notamos que éramos los últimos en llegar. Contárselo iba a ser difícil.

-chicos, Maya y yo estamos saliendo-pues no, no había sido tan difícil.

-¡aaaaah!-gritaron las chicas-¡por fiiin!

-¡felicidades hermano!-le dijeron los chicos a Jay.

-¿Cómo?-preguntó Jess.

-¿Cuándo?-preguntó Ari.

-¿Por qué?-preguntaron Lan y Jen a la vez.

-¿Cómo? Pidiéndomelo, ¿Cuándo? En el concierto, ¿Por qué? No lo sé, pregúntaselo a él-contesté.

-¿Por qué?-preguntamos todas.

Sí, yo también quería saber porque.

-¿Por qué el qué?-preguntó Bryan.

-Jayden, ¿Por qué le pediste a Maya ser su novia?-preguntó Ari.

Jayden me miró riendo y yo me sonrojé.

-pues porque es la chica a la que quiero y no pienso dejarla escapar-dijo mirándome.

Vale, no podía estar más roja. Mi cara iba a explotar.

-ooh, Maya esta rojita-dijo Liam cogiéndome de los mofletes.

-Liam, te recuerdo que tiene novio-dijo Ari un tanto celosa.

-oh vamos, Ari, sabes perfectamente que Maya no es mi tipo, yo prefiero a chicas como tú-respondió defendiéndose.

-oye, que no estoy tan mal-me defendí.

-Maya no es por ti, es por mi-dijo Liam.

-no, por favor no me dejes-dramaticé.

-lo siento, pero no puedo mentirme más-siguió el juego.

Todos estallamos a carcajadas.

Pasamos la tarde entre carcajadas y risas.

-bueno, hasta la próxima tarde de café-dije yo-Jayden y yo nos tenemos que ir porque alguien-dije mirando a Jayden- se ha cargado la lámpara del comedor con el mando de la wii y la ha de arreglar.

-oye, no es mi culpa intentar ganar en el tennis-replicó.

-y tampoco es mi culpa que te hayas cargado la lámpara por no saber atarte el mando en la mano-contesté.

-bueno, adiós chicos-se despidió Jayden.

-adiós.