Hace siete años...

Capítulo 81 Parte 2 FINAL

JAYDEN

La boda transcurría bien.

Estábamos "vendiendo" las pizzas, sí, lo sé, ¿Quién pone pizza para comer en una boda? Pues nosotros, sobretodo porque somos pobres y no nos daba ni para cinco cubiertos.

Maya se empeñaba en cobrar a la gente, espero que nuestros hijos no salgan tan ratas.

Me acerqué a ella por detrás y la abracé por la cintura. Apoyé la cabeza en su hombro.

-¿Todavía quieres hacer pagar a los invitados por la pizza?-pregunté riendo.

-Tú ríete todo lo que quieras, pero era una buena idea-contestó.

-Claro que sí guapi.

-Al final tendré que prohibir ese anuncio en casa-rió.

Besé su mejilla y fui a ver como estaban Jess y Bryan. Llevaban una hora fuera haciendo unas putas fotos de boda, ¿Tanto se tardaba? Bueno, no creo que yo tarde en hacerme unas con Maya.

Habíamos hablado unos días antes de la boda, sobre tener hijos, pero ella siempre evadía el tema y me ponía de los nervios, porque tenía que hacer la sorpresa y no sabía como se lo iba a tomar.

Esperaba que bien, porque solo faltaban unas horas para hacerla y tenía que salir perfecto.

Y esperaba que ella dijera que sí.

MAYA

Últimamente, Jay, estaba muy pesado con el tema de los hijos, yo creía que sospechaba algo, pero lo único que podía hacer era cambiar de tema, como por ejemplo: "¡Mira que pájaro tan bonito!", "¿Crees que Jess quiera hacer eso para la boda?" o "Tengo que ir al baño".

Solo esperaba que no se enfadara conmigo, ya que no habíamos hecho nada íntimo desde hace más de un mes, ya que si, efectivamente, estaba embarazada de mes y medio y no quería hacerle daño al feto.

Ya sabía cómo se lo diría, después de la boda, cuando todos los invitados estén demasiado borrachos como para no acordarse. Jay tenía que conducir de vuelta así que no iba a beber, y yo tampoco. Solo esperaba que mi padre no montará un espectáculo.

(...)

Jess y Bryan volvieron al cabo de media hora después. Ya que quedaban diez minutos para que empezará la barra libre y la discoteca.

Yo me mantuve a un lado de la pista, tocándome la barriga, no quería hacer daño a mi bebé.

-¿Porqué no te diviertes un rato, hija?-preguntó mi madre poniéndose a mi lado.

-Hola mamá, no me apetece mucho, creo que la pizza me sentó mal.

-¿Segura? ¿No te pasa algo más? Mira que no quiero que mi nietecito sufra.

Me quedé pálida, ¿Cómo lo sabía? Solo estaban enteradas del tema las chicas. Voy a matar a Jess.

-Por favor, no te sorprendas, soy tu madre, has engordado dos kilos, tienes los pechos un poco más gordos y no paras de tocarte la barriga, y a parte no has bebido ni una pizca de alcohol. Solo dime una cosa, ¿Es buscado?

-Mamá, yo no sé qué decir. Este bebé no era intencionado, pero no lo voy a abandonar, es mi bebé, lo quiero. Y no le digas nada a Jay, todavía no se lo he dicho.

-¿Y cuando piensas hacerlo?

-Tengo miedo a que diga que no quiere hacerse cargo de él, mamá. Sé que no lo haría, pero ya no sé que esperar de nadie.

-Cariño, míralo-señaló a Jay bailando con Ann- ¿No crees que le encantaría formar una familia?-Jay me miró y me sonrió-Y mucho más si es contigo.

-Gracias mamá, tienes razón. Ahora el problema es papá.

-No te preocupes por ese viejo cascarrabias, a mi me embarazó con 20 y tú tienes casi 22, no tiene derecho a quejarse.

Después de eso, me dispuse a bailar con los niños un rato. Chris no hacía nada más que ir detrás de todas la chicas que podía, era una copia de su primo.

-¡Escuchad todos!-gritó Jess-Quiero daros las gracias a todos los que habéis venido esta noche, y gracias por estar aquí el día más importante de mi vida. Pero quiero agradecer en especial a Maya. Maya esto va por tí, no podría haber conseguido nada de esto sin tí, así que gracias y por eso te he preparado una sorpresa, giraré y lo verás.

Me giré como pude, ya que no hacía nada más que llorar.

Vi a todos los invitados, y cuando digo todos es todos, incluidos mis padres, de pie, juntos, con las manos atrás y en fila.

De repente empezó a sonar "Just say you won't let go" de James Arthur y todos sacaron una cartulina y la alzaron.
Al unirlas todas podías leer perfectamente "Mayita de mi corasonsito, ¿Quiéres casarte con este Jaydensito?
No podía creerlo, se quería casar conmigo. ¿Cómo podía haber sido tan idiota como para desconfiar de él?

Noté a alguien detrás mío, me giré y vi a la pequeña Ann con un cojín, en el que había un anillo.

-¿Quieres ser la mujer de mi tonto primo?-preguntó con ojos llorosos.

Me agaché a su altura y le susurré en el oído un breve "Sí, me encantaría" lleno de sollozos causados por el llanto.

-¡Oh! ¡Primo! ¡Dijo que sí!-gritó feliz.

Jayden abrazó a la pequeña, cogió el anillo del cojín y se acercó a mí. Mientras me ponía el anillo me dijo:

-Sé que no soy el mejor novio del mundo, y probablemente no seré el mejor marido, pero intentaré serlo, por tí, por mi y por nuestros futuros bebitos. Espero y deseo que me ames tanto como yo te amo, y quiero que sepas que cada día de mi vida junto a ti intentaré que nunca dejemos de hacerlo.

Sonreí al ver lo bien que quedaba el anillo en mi dedo. Jayden limpió las lágrimas de mi cara y sonrió. Lo abracé fuerte.
Ya podía decirle que estaba embarazada, ya no temía. Lo amaba y él me amaba a mí, eso era lo importante y nuestro bebé iba a crecer en un entorno familiar.

-Eres el mejor novio/prometido que podría pedir nunca-le susurré riendo.

Jayden sonrió y me besó. Sus labios cálidos me acogieron con los brazos abiertos. Nos besamos de una manera inexplicable, llena de pasión, amor y una pizca de sensualidad.
No sé porque, de repente cogí sus manos, que estaban en mi cintura y las llevé a mi estómago, donde se encontraba nuestro bebito.
Jayden rompió el beso y me miró confundido mientras yo sonreía.

-¿Maya? ¿Por qué me has puesto las manos en tu barriga?-sonreí más, para que entendiera la respuesta- ¿E-e-estas e-e-embaraza?-tartamudeó.

-Sí, Jay, vas a ser papá.

-Voy a ser papá-sonrió y me abrazó.

-Oh, no, tu no vas a ser nada-gritó mi padre-¡Has embarazado a mi hija! ¡Ya puedes correr Jaydensito de li corasonsito!

Jay me miró sonriente, me dió un breve beso y huyó de mi padre.
Mi madre se acercó a mí y me felicitó. Nos abrazamos y miramos la escena: papá corriendo con un palo en la mano gritando "¡Te mataré desgraciado!" mientras Jayden gritaba "¡Voy a ser papá bitches!

Llegó un momento en el que pararon, hablaron, sonrieron y se abrazaron. Sabía que no aguantarían mucho, mi padre amaba a Jayden.

Jay volvió a mí y me abrazó por los aires.

-¡Vamos a ser padres!-sonrió.

Me reí y lo bese.

Todos se acercaron a felicitarnos, pero mientras no podía dejar de pensar en que hace siete años no me hubiera imaginado un final así. Pero esto es mil veces mejor que cualquier otro final.

Era nuestro y vivieron felices y comieron perdices.

💙💙💙

Se acabó lo bueno😭

Espero que os haya gustado el final. No creo que tarde mucho en subir el epílogo.

Adiós 😘