Aaron II (Cancelada)

Capitulo 29: "No te gusta verme desnudo?"

Sus ojos no se despegaban de mi igual que sus brazos de su cintura.

Sus cejas estaban descolocadas.

-Una pesadilla?- me vuelve a preguntar. Pensé que mi truco funcionaria pero me esta costando con ella.

-Desperté esta mañana mal, tu me lo dijiste ayer, era imposible, al ver a Aaron hoy me di cuenta que todo había sido un sueño, él sigue lejos de mi...- apague mi voz al ritmo que terminaba y mire al suelo para hacerlo más creído. Sabía que Tris no iba a lograr ocultar el secreto y lo mejor que se me había ocurrido era negarlo todo.

-Ven- sus brazos estaban abiertos para recibirme en un abrazo. Me tire sobre ellos como si fueran un colchón cómodo y me abrazo fuerte. Entonces una sonrisa se esbozo en mi boca sobre su hombro. -Juntas lo superaremos- se aparto un poco para acariciarme la cara. -Como todo lo demás. - sus ojos se veían tan hermosos y brillante que me sentí culpable.

Volví a sonreír asintiendo y una tercera voz me hizo brincar en mi sitio.

-Todo bien chicas?- Jake paso ante nosotras plantando un beso cada una y luego puso el coche en marcha para subir.

Le mire mal hasta que se metió en el coche donde ya no lo podía ver bien. Casi había provocado que vomitara a Tris de la culpabilidad. Pero no era algo tan grabe y decidí restarle importancia. Subí en mi asiento trasero como siempre, y tomamos rumbo a casa.

(***)

-De verdad que tengo que hacer esto?- solté un gran suspiro que juraría que la hierva se movió de su sitio.

-Kelsey, por séptima vez del día, si! Si tienes que hacerlo, estos huesos tienen que coger fuerza.- dijo lo ultimo tocando mis flacos brazos. Las últimas semanas había perdido bastante peso lo cual me hacia ver bastante débil.

-Sabias que para eso están los cereales KCA? Son buenos para calcio y no hace falta ejercicio.- le guiñe un ojo y este los volteo.

Me tire boca abajo en el suelo y luego di la vuelta para mirar al cielo grisáceo y dejar el viento posar en mi cara. Nunca antes en mi vida había hecho tantas flexiones a la vez y gracias a mi hermano, Duncan, las hice. No digo que no intente detenerme, lo hice pero cada vez que él me veía parar me tiraba agua del tubo y volvía a coger el ritmo. Mi pelo estaba más que sudado, necesitaría tres duchas para limpiarlo.

-Ya esta, cincuenta malditas flexiones. - Dije con la mano en mi tripa calmando mi respiración.

-Bien, ahora por las otras cincuentas. - Chasquea las manos en modo entrenador y mis ojos salen de su órbita al oír sus palabras.

Le miro como si hubiera perdido la cabeza.

Alzo una ceja confundido.

-Estas de broma? Pretendes que hagas cien en un tiempo seguido?- No se como, pero ya estaba de pie delante de Duncan frunciendo el ceño.

Se cruza de brazos y me mira con obviedad.

-La clase a terminado por hoy.- digo mientras me alejo de él hacia casa para tomar un frío refresco.

-Kelsey! Vuelve ahora mismo sino quieres que te arrastre. - Gritó. Le mire con burla una ultima vez y comencé a correr. Estaba muy equivocada al decidir darme clases de defensa personal, y más equivocado al darme ordenes a mi, a Kelsey Brooks.

Sin darme cuenta me choque con el cuerpo de alguien que me hizo caer sobre mi trasero. Cogí mi cabeza al sentir que me daba vueltas como una peonza y levante la vista decidida a matar a quien fuera.

Casi se me cae la baba al ver a Aaron delante de mi sin camiseta, con cada abdominal marcada que me pedían a gritos que les tocara.

-Estas bien?- Pregunto casi en un susurro mientras se tocaba el pelo mojado. Su rostro estaba serio y llevaba un vaso lleno de algún extraño liquido que me hizo babear aun más.