My Little Baby Boy || Larry

Capitulo Seis

Una hora después, Louis y Harry se encontraban en la casa del menor, una vez que pasaron a recoger a los hermanos de este último. Estaban entrando entrando casa, viendo como los pequeños aventaban sus mochilas en alguna parte de la sala y salian disparados hacia sus respectivos cuartos.

—Bien, niños, ya saben, entran, toman un baño y bajan a comer. —Recuerda el mayor de los cuatro, entrando lentamente a la cocina, escuchando de fondo las risas de los pequeños.

—Sí, Louis. —Responden ambos.

Una vez de cerciorarse que ningún pequeño estaba a la vista, toda de la cintura al rizado pegando su pecho a la delicada espalda de éste.

—¿A dónde crees que vas, hermoso?. —Elogia mientras camina en la misma posición hacia la sala.

—A ningún lado, Daddy. — Sonrie, posando sus brazos al rededor del cuello de su novio, aun con su espalda pegada al pecho del mayor.

—Eso me imagine, lindura.

El rizado suelta una risita verdaderamente encantadora a los oídos del castaño mientras se dirigen hacia el sofá más grande de la sala. Entre besos y uno que otro toque indecente, ambos llegan al mueve, cayendo sentados en este mientras los besos están de por medio.

–Es mejor ir a la habitación, Lou –interrumpe los besos babosos del mayor, viendo expectante hacia las escaleras en la espera de que ninguno de sus hermanos bajen.

–Perfecto –con una sonrisa coqueta, Louis levanta a Harry de forma nupcial mientras se encamina hacia la recamara de este, escuchando los diversos gritos y risas de ambos chicos en sus respectivas habitaciones.

Con rapidez y torpeza, ya que Harry lo molestaba dejando besos y mordidas pro todo su jovial rostro, Louis abre la puerta mientras acomoda al chico en sus brazos y cierra la misma con el pie una vez que se encuentran dentro y en privacidad.

Louis deja al pequeño sobre su cama, quedando él de pie observando lo hermoso y bello que era su bebé.

—Bien, muñeco, ya estamos solos. —Harry sonrie por la mirada pícara de su novio, por lo que extiende sus brazos en busca de que el mayor se acueste a su lado.

Haciendo caso al pedido de su amado bebé, el castaño se tumba encima de él, dejando su peso en solo brazo a modo de no aplastar al de abajo.

Ambos sonriendo, Louis empeza a acercarse al rostro del menor, Harry por inercia cierra los ojos esperando por lo finos labios de su novio, esos labios que desde un comienzo quiso devorarselos a besos y dejarlos cien por cientos rojos e hinchados.

Pero eso nunca llega.

A cambio de eso, escucha el sonido del teléfono del mayor, siendo un sonido estresante y muy ruidoso. Soltando un gruñido, Louis toma su celular para ver quién se atrevia a interrumpirlos, abriendo los ojos cuando lee identificador, por lo que, carraspeando se separa del rizado y se dispone a contestar, engrosando la voz.

- ¿Hola? -contesta parándose de la cama y saliendo de la habitación.

Harry frunce el ceño puesto que Louis nunca se iba cuando contestaba una llamada, menos si estaban a punto de tener intimidad.

Quizás... ¿lo estaba engañando y por eso se fue a otra parte a contestar y...? ¡No! Louis no es de esas parejas infieles. Él nunca engañaría a Harry... ¿O sí?

💙💚

—Harry, amor, de verdad lo siento, pero me tengo que ir —el castaño ruega, golpeado levemente la puerta frente a él.

Se estaba arriesgando, pues ya tenía más de media hora parado detrás de la puerta pidiendo y rogando de que su novio le abriera, puesto que después de finalizar la llamada -que había tardado un poco-, le informó a Harry que debía irse pronto pues había sucedido algo personal entre su padre y él, sin embargo, eso hizo enojar al menor. Pues su ridícula escusa es que él era su novio, por la cual debía de saber que era eso tan "personal" como para que el castaño se tuviera que ir tan urgentemente. Por su parte, Louis siguio insistiendo que era algo sumamente personal y que no tenía nada que ver con él, cosa que empeoró más la situación, entonces Harry se enojo mucho más y lo sacó de la habitación a patadas y le cerró la puerta en la cara.

Y para entonces, llevaba más tiempo del que se imaginaba sin que Harry le abriera la puerta y que él no deja de insistir.

—Bebé, por favor... No es para tanto.

—¿!Qué no es para tanto!? ¡Te pregunté quién era y tú me contestaste que era algo muy personal como para decirme! ¡Es obvio que piense que me estás engañando y por eso no me quieres decir! —Finaliza el rizado, dando vueltas de aquí a allá, con lágrimas escurriendo en sus sonrojadas mejillas.

Louis suspira frustrado, pensando lo difícil que sería convencer al menor.

—Hazza, por favor, abre.

—¡No! ¡Vete! —Grita irritado, dando pataletas en el piso.

—Shh, shh, shh. Harry baja la voz, tus hermanos-

—Me vale. Solo quiero que te vayas.

—Harry, amor, por fav-

—¿Louis?

-AnnieLsTk.