III;Starbucks

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Pov.Lauren

Desperté agitada. Otra vez había tenido esa pesadilla.

Sonido de llantas derrapando, vidrios rompiéndose. El flash de las luces cegandome, voces a lo lejos.

Me senté sobre la cama y miré mi mano izquierda, me ardían las cicatrices que iban desde la punta de mis dedos hasta la muñeca.

Me levanté y corrí hasta la cocina, abrí el congelador y metí la mano en cuestión. El frío apaciguaba el ardor. Suspire de alivio.

Tardó unos cuantos minutos para que se calmara por completo. Cerré el congelador y caminé al sillón para desplomarme en el.

Me disocie mirando al techo,como si la respuesta a todos mis problemas se apareciera mágicamente y todo se solucionará.

Sentía que estaba en otro lugar,sentía la tranquilidad que tanto necesitaba,no era capaz de escuchar ruido alguno del exterior,esto realmente me estaba ayudando,de alguna forma.

—¡ Joder Lauren,apaga el puñetero despertador!— Y...salí de mi trance, pero la ignoré por completo.

—Está bien,si no lo vas a hacer lo haré yo. ¡Gracias mejor amiga!

Por mi parte, volví a poner mi atención al techo y me perdí en mi mente otra vez.

Pov.Camila

Estuve obligada,y sí,obligada a despertar por el peso de una pierna que estaba en mi cara.
Tome la planta del pie y empecé a hacerle cosquillas,no pasó mucho tiempo para poder escuchar las risas de Dinah,la cual empezó a mover todo su cuerpo tratando de pararme y en uno de sus movimientos hizo tirar a Ally de la cama.
Dinah y yo nos sentamos de golpe encima de la cama para ver a Ally tirada en el suelo y las carcajadas nos invadieron a ambas.

— ¿De que se están riendo par de idiotas? —Nos dijo Ally muy enojada.

—Pensé que no decíamos groserías enana.— Respondió Dinah entre carcajadas.

—Solo recuerden que hay un Dios que todo lo ve. — Ally se levantó del suelo y se sentó con nosotras en la cama.

Conocí a Ally en la Iglesia hace unos diez años y a Dinah hace ocho años, uno de sus hermanos había roto una de las luces traseras del coche de papá,al final otro de sus hermanos lo reparó y fue ahí dónde me di cuenta que tenía muchos hermanos y también muchos parientes. Con el paso del tiempo las tres nos convertimos en buenas amigas.

—¿Quieren ir a Starbucks?—Pregunté

—Más tarde Mila,tengo que acompañar a mi mamá de compras.—Respondió Ally

—Igual,voy a dejarle el dinero de ayer a mi familia.—Dijo Dinah —Ayer me gane el premio mayor.—Puso una gran sonrisa de victoria.

—¿Por qué?— Pregunté.

— ¡Gané dos mil dólares!

— ¿¡Dos mil dólares!?— Dijimos Ally y yo al mismo tiempo

—Bueno la verdad gané tres mil pero, ya sabes, le tienes que dejar una parte a la empresa.

Sabía que Dinah trabajaba en un Sex Hotline,sabía que se ganaba buen dinero pero...¡No tanto en un solo día!.

— ¿Cómo puedes ganar tres mil dólares en una noche Dinah?— Preguntó Ally

—Verán,ayer ya llevaba unos quinientos dólares nada más,pero entonces un chico llamó en la línea de Maria,estaba destrozado,su novia lo había dejado y esos son los que más dinero dejan escapar.Buscan consuelo,desahogarse y pasar un buen rato,por eso en esos momentos debes de tratarlos con "amor" y "cariño".—Hizo unas comillas con sus manos en las dos últimas palabras.—Así se quedan más tiempo contigo y entre más tiempo más dinero. Debes de tatuarte eso si quieres triunfar Camila.— Me dijo mientras me miraba muy seriamente apuntándome con el dedo.

Sex Hotline;camrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora