Battle Dogs

Capítulo 6

—Kyo, tenemos un problema.—un hombre de pelo largo, con los brazos tatuados y una barba de tres días, hizo acto de presencia en el reservado de aquel local de mala muerte.

—Últimamente solo me traes malas noticias, Kaoru.—el líder de los Zan se mantenía ocupado, con una bella mujer arrodillada entre sus piernas y el brazo de Shinya entre sus manos; la peripecia de hoy era grabar su nombre en él a punta de navaja.—Qué es lo que pasa.—detuvo su tarea, y su "pequeña belleza" suspiró largamente, conteniendo el dolor como mejor sabía.

—Hay...una banda nueva.—Kaoru empezó a tantear el terreno

—Oh, qué miedo, un par de niñatos que se creen que saben usar una navaja.—clavó la suya de nuevo en el brazo de Shinya, trazando de nuevo la o, y este cerró los ojos para contenerse.

—Han tirado las motos que teníamos en Yodogawa, y...—se detuvo antes de seguir—La tuya ha caído al agua...—

—¡¿Qué?!—bajó su brazo de sopetón, golpeando la cabeza de la chica, que se retiró gateando dolorida para que no fuera la navaja lo que chocara contra su cabeza la próxima vez.

Shinya quería apartarse, pero Kyo no le dejó, apretando el antebrazo de este entre sus manos.

—¡Aahh!—esta vez no pudo contener el dolor.

—Cállate.—el rubio clavó sus uñas en la herida abierta y Shinya tuvo que morderse los labios con fuerza para no volver a gritar.

—Y han...tachado nuestro nombre con el suyo.—Kaoru continuó hablando, intentando no flaquear ante la mirada asesina de Kyo.

—¿Cómo se llaman?—se colocó bien los pantalones.

—The...Howlers...—

—Qué coño es eso, de dónde son.—

—No lo sé...—

—¡Pues lo averiguas, imbécil!—se levantó, gritando tanto que algo de saliva se escurrió por su barbilla—¡No vuelvas sin darme el nombre de todos y cada uno de ellos! ¡Quiero sus cabezas en mi mesa!—

—S...sí señor...—

Kyo volvió a tomar asiento soltando un gruñido.

**

Al día siguiente, de nuevo en clase después de mi "día para reflexionar y pensar en lo que había hecho", Mizuki me recibió con su cariño habitual:

—Volvemos a vernos pollito. ¿Qué has hecho en tu día libre? ¿Tocarte pensando en Kyo?—

—Eso habrás hecho tú.—

—No, él me tocó a mí, quería complacerme, ahora somos amigos de pajas.—

—...pues yo tiré su moto a jugar con los peces.—le contesté cabreado.

—Sí, claro. Y yo me lo creo. Sigue soñando que juegas a las bandas con los mayores.—

—Fuimos nosotros, los Howlers.—lo reté con la mirada—Dile a Kyo que estamos en pie de guerra.—

No quería haber dicho eso, no quería "empezar tan fuerte" porque Kyo podría matarme si quisiera, y mi objetivo era una posible alianza con él algún día, tampoco quería llevarme mal con él, lo de las motos había sido un accidente. Pero lo hecho hecho está.

Mizuki empezó a reírse de mí.

—Bueno no le voy a decir nada que no quiero que te maten.—me despeinó—Que me das lástima. Tan pequeño.—