Ranma y Akane estaban haciendo las compras navideñas en el centro comercial, el chico de las ropas chinas bostezo con cansancio, hubiera preferido quedarse en casa adornar el árbol navideño que ir a dar vueltas y vueltas en cada tienda porque Akane no se decidía qué comprarle a sus hermanas de regalo.
Entró a una tienda la cual ya la habían visto de pies a cabeza como cinco veces pero Akane parecía estar esperando que hayan llegado cosas nuevas en los 20 minutos que la dejaron.
Llevaban horas ahí, prácticamente se les fue el día en el centro comercial, Ranma sintió que ese lugar no tenía fin y admiraba la energía de Akane.
Akane por su parte estaba muy contenta, la navidad le encantaba aunque por algunas cosas que tuvo que hacer no le había dado tiempo de ir a comprar los regalos antes y se arrepentía porque ése preciso día era cuanto el centro comercial estaba a reventar. Vio una prendas de ropa que tenían el 75% de descuento, se lanzó por ellas, ésa ropa tenía que ser suya a como diera lugar, pero no contó que no era la única interesada.
Ranma se tapó la cara con las manos al ver a una aguerrida Akane pelearse por una blusa con una joven de cabellos castaños, parecían perros hambrientos peleando por un trozo de carne, sino hasta peor.
Le dio pena ver a Akane triste porque la otra joven logró quedarse con esa blusa, pero los ánimos eran recargados cuando vio un vestido color vainilla muy hermoso y se lanzó hacia él. A Ranma le escurría una gota de sudor al ver como su prometida perdía la poca feminidad que poseía y mostraba los dientes con rabia.
La navidad le gustaba, pero ir con Akane le resultaba todo un martirio, de hecho los pies ya le dolían.
—Akane, ya tienes todo lo que necesitas, ya vámonos —pidió Ranma, cansado que hasta ojeras tenía.
—No, todavía falta comprarme mi regalo —dijo la chica que regresó a una tienda.
¡Diablos, el regalo de Akane! Se le había olvidado por completo, ¿cómo rayos pudo olvidar el regalo de la persona más importante en su vida? Tragó saliva. La vio entrar a una tienda de peluches y quedó embelesada con una vaca blanca con manchas negras que medía un metro, a él le pareció un muñeco de felpa bastante feo de ojos saltones y desproporcionados, pero los ojos de Akane brillaban al verla, pero de inmediato se opacaron cuando notó el precio.
—No puedo creer que algo tan feo sea tan costoso —habló Ranma al ver que ese peluche costaba 6 mil yens.
—No está fea, es hermosa y a mí me encantó, pero me gasté todos mis ahorros en los regalos para mi familia y en el vestido que no me alcanza para comprarme la vaca —gimoteó una dulce Akane.
Ranma se enterneció al verla con esos ojitos de perro regañado. Bueno, ya sabía que le podía regalar y eso le facilitaría bastante, contaba con el dinero pero si tenía un pequeño descuento le iría mejor y así le compraría algo a su padre, aunque no se lo mereciera, al menos ya había comprado los regalos para la familia Tendo, pero el de su prometida tendría que ser algo más especial.
Al fin iban saliendo del monstruoso centro comercial, aunque Ranma estaba con el pendiente de que no pudiera regresar a tiempo antes de que lo cerraran, después de todo ese día era navidad y todos los establecimientos iban a suspender labores a temprana hora.
—Akane, adelántate, yo recordé que tengo algo que hacer —prefirió no tentar la suerte y regresar al centro comercial.
No espero a que ella le diera respuesta, sólo corrió por las calles rumbo a esa tienda que tenía ese feo peluche.
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Colección de One-shots de Ranma 1/2 ¡Finalizado!
FanfictionColección de historias cortas un solo o hasta tres capítulos que he escrito sobre la pareja que a mi punto de vista es de las más bonitas que he visto en anime. Ranma 1/2 Pareja Ranma&Akane.