.Alone.

Capítulo N° 8

Baje las las escaleras con todo el valor posible ya que tengo en mente que al pedir permiso para la fiesta de Sonia papá me dará un rotundo "NO".

Me senté en en sillón junto con papá y mamá.

—¿Que haces?—. Dice mamá extrañada.

—Acaso no puedo tener tiempo de calidad con mis padres—. Digo excusando mi actuar.

—Algo me huele mal aquí—. Dice papá mirando extrañada a mamá.

—Y igual a mi—. Dice mamá apoyando a papá.

—¡Solo quiero estar con ustedes que hay de malo en eso!—. Digo mirándolos a ambos.

—¿Que quieres Shepp?—. Pregunta papá; —Podemos negociar—. Dice con mirada sospechosa.

—¿A que te refieres con negociar?—. Digo siguiendo con su juego.

—Tu propuesta primero cariño—.  Dice papá mirándome cerio mientras mamá aguanta la risa.

—Ir a una fiesta hoy en la noche con Támara, Rían y Félix —. Digo evitando su mirada.

—¿Un segundo quien es Félix?—. Dice alzando la ceja.

—Un nuevo chico que ha llegado al instituto—. Digo rodando los ojos.

—¿Y que tal?—. Pregunta mamá picarona.

—¡¡MAMÁ!!—. La fulminó con la mirada.

—Lo siento pero pues.. Si es lindo no lo dijes ir—. Que de impactada ya que mamá siempre fue educada.

—¡Ya basta! Me darán permiso. Támara me vendrá a buscar en un par de horas—. Digo enfadada.

—Okeyy.. Okeyy.. Pero con una condición —. Dice papá mirando a mamá.

—¿Cual es tu condición? —. Digo harta. 

—Que mañana hagas una limpieza a tu habitación—. Dice con una sonrisa burlona.

—¿Es broma cierto?—. Digo a ambos alzado la ceja. Ellos se miran entre si y niegan a la misma vez con la cabeza; —¡Esta bien!—. Digo con pereza en la palabra.

Subo corriendo las escaleras ya que se me hacia tarde me he metido a la ducha. Al salir me di cuenta que las Marcas yo no estaban, ya no dolía ni ardía era algo tan raro hoy en la mañana recuerdo a ver las visto.

Me puse mis Jens apretados una Converse y una camisa a cuadros. Baje por las escaleras al sentir el timbre pero me devolví por mi bolso que me cruzo. Abro la puerta y me noto con una radiante Támara.

—Hol...—. No termina de decir la palabra y me mira de pies a cabeza, —Piensas ir hací—. Me señala completa.

—Que hay de malo en esto—. Digo tocando mi camisa.

—Te vez muy fome—. Dice arrugando la nariz.

—Más es menos—. Digo orgullosa.

—Pues hoy no rige esa frase—. Dice tomando de mi brazo y llevándome nuevamente hacia dentro, —Hola Señora Amber—. Dice al ver a madre ya que mi padre se estaba bañando.

—¿Donde vamos—. La miro mientras me lleva del brazo subiendo por las escaleras.

—Ha a regalarte—. Me sienta en mi escritorio y saca unos maquillajes de el pequeño bolso.

Al pasar los minutos un "¡Listo!" sale de ella. Me da vuelta y me encuentro con una Shepp totalmente diferente.. Ósea no tannnn diferente me ha echado algo viscoso en las pestañas y un poco de labial. Es extraño que con tan poco te sientas tan diferente.