7. Elección

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El día que anhelaba y pensaba que sería el mejor de mi vida, se convirtió en el más extraño y doloroso.

Todo empezó con la cena, la familia de Max era agradable y no me sentía incómoda. Max y yo nos mirábamos muchas veces, seguramente por las ansias de que llegue la noche.

Pero, todo cambió.

— ¿Te gustó la comida? —Pregunta Max a mi lado.—
— Si, tú nana cocina exquisito.

Estaba esperando el postre, cuando escucho un rayo. Todos a mi alrededor se miran y yo empiezo a comer el postre. No entendía porque todos se miraban con preocupación, para mí era un rayo y el signo de que la lluvia había empezado.

Un segundo rayo suena y los hombres se ponen de pie. Yo los miro a todos y el tercer rayo suena.
Toda la familia se levanta y todo pasa muy rápido. Veo como Max se aleja y le da indicaciones a su nana. Los primos de Max, sus tíos y padre se reúnen y algunos salen fuera de la casa.

La nana se me acerca, me entrega mi abrigo y me aleja de los demás.

— Señorita, tiene que acompañarme.
— ¿Qué? ¿dónde? ¿Por qué?
— Es urgente, por favor.
— ¿Y Max?
— Acompáñeme.

Su mano se apoya en mi espalda y me lleva hacia el patio trasero. Yo miro hacia atrás de vez en cuando para ver si Max se acerca.

— ¿Dónde está Max? ¿Qué está pasando?
— Lo siento mucho hija.
— ¿Qué?

No entendía nada y mi desesperación estaba aumentando. El cielo se volvió negro y el frío aumentaba con una velocidad preocupante. Max aparece, corre hacia mí y besa mis labios de forma ligera.

— Te amo Maya.
— ¿Qué pasa Max?

Y sin decirme más, Max se aleja de mi lado y se va corriendo.

— ¡No! —Me pongo a llorar.— ¡Max!

La nana me abraza y luego me entrega una mochila que Max le había entregado. Se pone frente a mí y me mira como una madre.

— Ahora, sé que estás llorando y no entiendes nada, pero tienes que seguir mis indicaciones Maya.
— Pero...
— Caminaras en línea recta y encontraras un árbol, lo reconocerás ya siempre tiene un halo de luz. Llegarás a ese árbol y tocaras su tronco.
— ¿Qué? ¿Por qué?
— Porque el peor momento llego Maya. —Me toma la mano.— Vete.
— ¿Que pasará con Max? ¿Qué está pasando?
— Tienes que encontrar tu lugar seguro Maya, recuerda que Max lo único que quiere es tu seguridad.
— Pero... No alcance a decirle que lo amo.
— Se lo diré.

La nana besa mi frente y luego me abraza. Me hace una cruz en mi frente, ella es muy religiosa.

— Suerte.

Cierro mis ojos y tratando de evitar mi dolor camino en la dirección que me dijo. El cielo sonaba de forma extraña, como si fuera el fin del mundo.

Llego al árbol y pienso en todo lo que estoy dejado atrás. ¿Qué pasará con Bella? ¿Con mis padres? ¿Por qué tengo que irme?

Muchas dudas empiezan a aparecer, esto no es tan fácil como se ve. El árbol se mueve y algo me dice que tengo que dejar de pensar tanto y solo tocarlo.

Mi mano es atraída como por un iman y toco el tronco.
Un rayo de luz inmenso aparece y creo volverme ciega, luego mi cuerpo cae en algo sólido y distingo un lugar totalmente distinto.

No puedo creerlo, no puedo creer que mi vida normal, tiene todo menos normalidad. ¿Cómo es que puedo aparecer de un lugar a otro?

Estoy en lo que parece una habitación vacía, me pongo de pie y avanzo. Es un pasillo gigante que lleva hacia una puerta. La puerta es de madera y tiene una indicación en muchas idiomas.

Keeper. (Buscándote) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora