Keeper. (Buscándote)

14. Juntos

Ambos estamos desnudos y no lo puedo creer, no puedo creer que esto va a pasar. Estoy nerviosa y excitada...

Max se pone sobre mi con cuidado, acaricia mi rostro pero sé que sus ganas de estar conmigo están muy lejos de lo tierno. Besa mis labios tomando mi labio inferior con sus dientes, luego baja a mi cuello pasando por mis clavículas hasta llegar a mis pechos, sus ojos me encuentran y esboza una sonrisa.

— ¿Qué quieres que te haga aquí?

Demonios, ¿cómo pregunta estas cosas? Estoy casi muerta aquí teniéndolo encima mío desnudo y quiere que le responda... Muero de vergüenza.

— Bésame.—Digo con voz apenas audible.—
— Disculpa, no te escuché. —Sonríe de lado.—
— Bésame ya.
— Soy suyo y a sus ordenes.

Empieza a besar mi pecho, luego ambos, yo cierro los ojos y disfruto, la temperatura definitivamente sube en mi, esto es fantástico, quiero más...

— ¿Qué más quieres? —Dice aún sin dejar de lamer mis pechos.—
— Muérdeme. —Digo con voz ahogada.—

Muerde mis pechos y yo me muerdo mi labio, estas son sensaciones que jamás esperaba. Su recorrido sigue hasta más abajo, siento vergüenza al ver cómo me mira, abre mis piernas y se acerca ahí...justo ahí.

— ¿Qué vas a hacer? —Pregunto asustada.—
— Amor, eres tan Inocente...
— Pero dim...

Mierda.

Esto es maravilloso, la sensación de sus labios en mi intimidad me está volviendo loca, enredo mis dedos en su cabello y lo tiro debido a la intensidad de cosas que estoy sintiendo. Algo sube por mi cuerpo, algo caliente y no tengo idea de que es...

— Max...

No puedo parar de gemir su nombre, lo que está haciendo es desconocido pero muy placentero, de pronto siento una sacudida dentro de mí y Max me besa, toca mi intimidad con sus dedos y abre un poco más piernas.

— Tratare de hacerlo con cuidado cariño.
— ¿Qué? ¿ahora ya? —Estoy más nerviosa que la puta madre.—
— Tranquila, tal vez te duela un poco.
— Confio en ti.

Max se sitúa en medio de mis piernas y por primera vez me atrevo a mirar lo que tiene entre sus piernas.

¡Olvídenlo!

¿Eso entrará dentro de mi?
Se nota que Max no es un ser humano común y corriente...

— ¡Max! —Toco su pecho y él me mira asustado.—
— ¿Qué pasa cariño?
— ¿Eso cae dentro de mi?
— Bebe, me halagas. —Sonríe.— Claro que si, te dilatas, recuerda que sale un bebe por ahí.
— Si, pero...
— Te gustara, después lo pedirás.

Quería decir algo más pero Max tapa mi boca con su mano y con otra mete unos dedos. Gimo al instante y todo se me olvida, besa mi cuello y luego mis pechos, de a poco se acerca a mi boca y pone ambos brazos sobre mis hombros, me mira a los ojos y siento una presión dentro de mi.
Demonios...

— Te amo.

Al escuchar eso, solo siento un pequeño dolor, luego literalmente siento algo dentro de mi. Algo extraño pasa, siento que lo deseo como nunca y que lo amo aún más. Siento ganas de que esto siga...

Lo beso de forma ardiente, hasta yo me impresiono y él se empieza a mover. Lo noto tratando de contenerse, pero yo quiero más.

— No te contengas. —Susurro en su oído.—

Max me mira, está sudado y besa mis labios una vez más. Se empieza a mover más fuerte, abro mis ojos debido a la molestia, pero luego me gusta. Se escuchan nuestros gemidos y el sonido de la cama chocando con la pared. Sentirlo así de esta forma, moviéndose y entrando y saliendo de mi, me gusta cada vez más.
Entierro mis uñas en su espalda y muerdo su hombro, esto es tan caliente y exquisito.