Comenzando de nuevo

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Después de haber hablado con mamá sobre "las nuevas reglas", comenzamos a desempacar. 

Mamá había dicho que ella no iba a permitir que nadie se quedara en el cuarto más de 24 hs, dijo que ahora las cosas iban a cambiar para que nosotros vivamos mejor y felices. Otra de las reglas era que el lunes empezaríamos el colegio por más que no tengamos ganas y que íbamos a ir con mucho entusiasmo. 

El lunes llegó y yo tenía que empezar a hacer todo de nuevo. Mamá me despertó, y salté de la cama pensando que ibamos allegar tarde. Me cambie, con unos jeans y una remera rayada y un sweter. Me cepille los dientes y bajé a desayunar. Cuando terminamos, Drake me llevó a mi al colegio, y se fue a la universidad.

A las 9 llegué a mi aula y el profesor de Matematica me presentó, me hizo algunas preguntas, de las cuales, no contesté todas porque todavía estaba vergonzosa. Todos me miraron pero no demostraron ningún tipo de interés. Luego me senté en mi pupitre y la clase continuó. 

A las 10, sonó el timbre para cambiar de clase. Cuando estaba yendo hacia mi locker a dejar mis libros, me choque con una chica, peliroja, que iba bastante apurada y me caí. Me pidió disculpas y siguió con lo suyo. Cuando me levanté del piso, sentí que alguien me miraba, pero, cabizbaja, seguí mi camino hacia mi locker, el 1153. 

Me estoy empezando a acostumbrar a una rutina después de varios días. Me voy haciendo cada vez más amiga de Chris. Las cosas están empezando a "funcionar" mejor. Estoy conociendo a un chico, se llama Adam Brooks, hace varios días que nos conocemos, desde que entré al colegio. Adam era muy guapo y muy cariñoso conmigo. 

Después de haber estado en varias clases, las cuales no me fue difícil entender los temas que me había perdido, me fui a buscar algo para almorzar de la cafetería, para después poder irme al patio y comer al aire libre, ya que era un lindo día

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Después de haber estado en varias clases, las cuales no me fue difícil entender los temas que me había perdido, me fui a buscar algo para almorzar de la cafetería, para después poder irme al patio y comer al aire libre, ya que era un lindo día.

Cuando estaba pidiendo la comida, alguien me tocó la espalda, como si me llamaran. Era Adam. 

- Hey Rebecca! ¿Como estás? Escucha, nosotros vamos a ir afuera a comer, si quieres venir, ¡estas invitada!- Me dijo señalando a un grupo de chicos, entre los cuales estaba la chica con la que me había chocado más temprano. Le dije que seguramente iría y se marcharon, cuando termine de pedir mi comida, lo vi a Chris que venía hacia mi. Lo alcancé y me preguntó si quería comer con él. 

-Adam me dijo que coma con sus amigos y él, pero ven si quieres conmigo. Donde cabe uno, caben dos- Le dije riendo. 

-No, está bien, nos podemos encontrar antes de terminar la jornada, si quieres- Esto último lo dice serio, como si hubiera dicho algo que le molestó. No se que le pudo haber lastimado, porque por mí parte no dije nada mal. Creo que no le hizo mucha gracia que me vaya a comer con Adam y no con él, pero yo lo intenté incluir.

Dejé mis pensamientos de lado, y me fui a comer con los chicos.



Matt & RebeccaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora