Eran las 11 am; ya había terminado el ensayo para el show de Justin; y todo iba de maravilla, incluirían algunas acrobacias: Saltos mortales, vueltas de carro cayendo en spagat y escuadras.
Yo sólo haría escuadras y spagat, aunque seguía trabajando en ello; iba a bailar más que nada.
Cuando terminamos el ensayo, tuve clase de tango, de mis favoritas; ya habíamos tomado más confianza mi pareja y yo, incluso comenzabamos a charlar; su nombre era Brett y era muy amable y muy caballeroso conmigo y por alguna razón, además de esos dos puntos a mi favor, me sentía realmente cómoda con él, estaba totalmente segura de que él no me veía con morbo o algo por el estilo.
Me comentó que él ya había visto mi video en Youtube algunas semanas atrás, y yo le conté que fué el video de mi audición para una beca en Mumford; estuvimos charlando el uno con el otro un buen rato mientras ensayábamos, y él me ayudaba con las cosas que se me dificultaban. En una parte del baile,´yo tenía que subir mi pierna a su hombro y por un momento me pareció casi imposible, por su altura, aunque me ayudó a mejorarlo.
Cuando terminó la clase de tango, que duró dos horas, Brett, Dani y yo fuimos al gimnasio a ejercitarnos. Esto era para obtener una buena condición y trabajar más duro en nuestros ensayos.
Terminamos agotados.
Nos despedimos de Brett, y Dani y yo nos dimos una ducha.
Cuando llegamos a casa eran las 2 de la tarde; y había estado tan distraida con la academia que casi olvido mi cita con Harry. Gracias al cielo me dí cuenta de ello temprano.
Comí un sandwich de atún y una manzana lo más rápido que pude, subí las escaleras lo más rápido que pude y tomé un short negro, una playera holgada color celeste y unos Converse del mismo color que la playera con un estampado vintage de flores.
Me puse un poco de mousse en el cabello, me maquillé solo con capas de rimel, blush en un tono durazno y un gloss transparente. Me puse perfume y tomé mi bolso.
Eran las 4:30 cuando bajé las escaleras corriendo. Dani se burló de mí.
-Si que te gusta ese chico linda, apenas son las 4:30 -ró tierna-
Reí ante mi situación.
-Soy algo torpe, y encima no tengo ni la más mínima noción de tiempo; pero bien, así tengo más tiempo para arreglarme. ¿Cómo me veo?
-Te ves preciosa, además él te dijo que llevaras algo cómodo, ¿cierto? Estás perfecta para la ocasión -Me guiñó un ojo-
-Espera.. ¿Tú sabes a dónde va a llevarme? -Dani se quedó callada unos minutos-
-No debo decir nada -Dijo mientras se metía una cucharada de yogurt con granola a la boca.
-Danielle Peazer, exijo saberlo. -Me puse ambas manos en la cintura-
Dani sólo siguió masticando como si nada y cuando tragó el bocado, cambió de tema.
-¿Sabes? Deberías aprovechar el tiempo para seguir arreglándote; corre.
Yo sólo reí, puse los ojos en blanco y subí las escaleras.
No sabía que más hacer, así que puse un poco de glitter azul en mis párpados y traté de esponjarme un poco el cabello.
El sonido del timbre me interrumpió, y en cuanto escuché que Dani abrió la puerta, sentí como si toda la sangre de mi cuerpo subiera a mis mejillas, comencé a temblar y sudar frío de las manos.
Me metí al baño, lavé mis manos con agua fría y traté de tranquilizarme.
Bajé las escaleras tratando de adoptar una actitud natural, y cuando llegué a la sala, ahí estaba él.
