-Creí que tardarían más tiempo en responder -Dijo Fer un poco sorprendida.
-Lo mismo digo. -Contesté mientras abría el e-mail. Mi corazón estaba palpitando muy fuerte. Sentía que mi mano temblaba mientras hacía click.
Abrí el mensaje:
¡Felicidades ___(tn) González! Hemos recibido tu audición y nos pareció un excelente desempeño. Consideramos que tienes la edad perfecta para comenzar a estudiar en Mumford Dance Institute. La pasión reflejada en tu ensayo es clara. Ese es el factor más importante para esta actividad.
Te informamos también que por ahora, estás entre los 30 mejores videos. Tienes la oportunidad de ganar uno de los 20 lugares con beca en nuestra academia.
El Domingo 3 de mayo se publicarán los nombres de los ganadores de las becas en nuestra Facebook Fan Page. Puedes ser uno de los elegidos.
¡Suerte!
Me quedé paralizada frente a la pantalla. Fer comenzó a saltar en el sofá y a dar gritos. Me abrazó y luego yo me uní a su festejo. Dios, no lo podía creer. Estaba atónita.
-¡Lo sabía, lo sabía! -Grito Fer emocionada.
-Estoy tan cerca! Pero aún no sé si seré una de las 20 becas -Estaba realmente ansiosa y un poco nerviosa.
-¡Por Dios, no seas tonta ___(tn) te aceptaran! Acabas de ver tu video, es realmente bueno! Hasta incluiste un buen outfit! Estás entre las 30 mejores audiciones; no seas marica, ya practicamente estás adentro con la beca del 100%! -Me dió un almohadazo.
-¡Eres una tonta! -Le dije mientras le devoldía el almohadazo.
Ambas comenzamos a reir y a jugar.
Se había hecho de noche; llegaron mis padres y enseguida llegó la madre de mi mejor amiga a recogerla.
-Recuerda pedir permiso para quedarte a dormir conmigo desde el viernes. Mis papás irán a visitar a unos tíos en Mérida. Mi abuela se quedará con nosotras y tendremos todo el fin de semana! -Le mencioné cuando estabamos en la entrada de mi casa.
-No lo olvidaré, ¡será un fin de semana increible! Además, tengo que estar presente cuando publiquen los nombres de los ganadores de las becas -Me guiño un ojo.
-Estoy muy nerviosa.
-Te aceptarán, eres la mejor. -Me abrazó y me dio un beso en la mejilla para despedirse.
-Eres mi mejor amiga- Continue con el abrazo.
Se despidió de mis padres y subió a su Jeep roja; me despedí de su mamá y se fue.
En cuanto entramos a la casa, lo primero que hice fué comentarle a mi mamá lo de la beca. Al parecer mi papá le había mencionado algo durante su cena. Estaba nerviosa, aunque no pagarían nada si obtengo la beca, mi mamá podria tener algun pero, como de costumbre.
-Tu padre me menciono que quieres entrar a Mumford con beca. -Dijo mientras entrabamos a la casa. Mi papá se había adelantado para dejarnos solas, Qué cobarde.
-Si, ya envié mi audición hoy en la tarde, por e-mail.
-¿Puedo verla?- Dijo anciosa.
-Por supuesto. Y adivina qué! Me regresaron el correo y me dijeron que soy de las 30 mejores audiciones hasta ahora. -Dije con un matiz de emoción inevitable en mi voz.
-¿Hasta ahora? -Dijo algo dudosa.
-Si, los resultados serán publicado el domingo; los mejores 20 aspirantes obtendrán la beca del 100% y los siguientes 15, del 30%.
-Felicidades cariño. -Me dió un abrazo.- ¿Estás segura de que esto es lo que quieres hacer?
-¡Totalmente mamá! De verdad esta es mi pasión. -Se me hizo un nudo en la garganta. Recordé todas las veces que mis padres habían halagado a mi hermana por lo buena que era en los deportes. Definitivamente ese no era mi ámbito. La clase de educación física ha sido mi peor tortura desde que tengo memoria. Soy muy torpe para todos los deportes que implican un balón.
Mis padres nunca notaron que en verdad quiero bailar. No les parece nada importante.
También recordé la primera vez que le pedí a mi madre entrar a una escuela de baile; quería practicar belly dance. Ella solo me miró y me dijo: "¿Y la pintura?"
Mi antiguo profesor había fallecido hace unos 3 meses. Mis papás querían que yo siguiera con eso. En mis últimas clases estuve practicando retratos al óleo. No terminé la pintura que estaba haciendo. La verdad es que es una actividad muy relajante. Pero no es lo que quiero hacer, nisiquiera me dan ganas de bocetar como me dan ganas de marcar pasos, moverme en un salón amplio con piso de madera y espejos, música a todo volumen y unos tenis cómodos. O un escenario con una luz que me apunta sólo a mí, rodeada de gente aplaudiendome.
Siempre soñé con eso.
Mamá vió el video y me felicitó, al parecer le gustó.
El resto de la semana, solo pensaba en la audicion. Era lo único que tenía en la mente.