Me gustaba verlo dormir, una inmensa paz invadía su rostro con cada exhalación que su cuerpo emitía; de alguna manera me transmitía esa paz al mirarlo.
No podía despertarlo, se veía demasiado tranquilo, no me sentía capaz de interrumpir esa tranquilidad, era como si al verlo me olvidara de todos mis problemas, de todo el exterior. Sus ojos estaban cerrados, sus párpados no me permitían ver sus verdes pupilas, pero aún así me parecía guapo. Recorrí la comisura de sus labios con mi dedo y acaricié su cabello rizado, en un intento de despertarlo, que no tardó más que segundos en funcionar.
Abrió sus ojos y me dedicó una sonrisa perezosa.
—Buenos días —dijo con voz dormilona—
—Buen día dormilón —dije besando su frente— Levántate, ya está el desayuno.
—¿Qué hora es? —se sentó en la orilla de la cama y estiró los brazos, luego bostezó—
—Tarde, y hoy tengo que ir a la academia.
Harry se vistió y se dirigió a la cocina para desayunar conmigo.
Regresamos a Londres a medio día; él me llevó a la academia, y esperó junto con Liam a que terminara la clase.
La coreografía para el show de los MTV Music Awards estaba montada y lista, ahora sólo ensayábamos una y otra vez. La hora de tango y salsa se pasaron muy rápido y después de eso, Dani y yo fuimos a ducharnos y arreglarnos.
Saliendo; Liam, Dani, Harry y yo fuimos a casa de Zayn, para reunirnos con los chicos.
[...]
—Cuéntenos que hicieron este fin de semana chicos, no supimos nada de ustedes. —dijo Louis, antes de darle un trago a su cerveza, dirigiéndose a Harry y a mí—
—Es cierto, no nos han comentado nada, ¿qué tal su escapada romántica? —dijo Eleaonor—
—Harry me presentó a su madre —sonreí—
—¡Vaya que van en serio, Styles! —bufó Zayn—
Harry y yo solo reimos y nos sonrojamos, estábamos sentados en el sillón, y él tomó mi mano y la apretó.
Tocaron el timbre y Zayn se paró a abrir la puerta. —Debe ser Niall—
En efecto, era Niall. Al entrar, saludó a Zayn afectuosamente con un abrazo y una palmada en la espalda; pero no llegó solo. Una hermosa chica morena, alta, castaña de cabello lacio y muy largo venía con él, tomada de su mano. Tenía rasgos de latina, una amplia sonrisa y ojos cafés. Ella saludó a Zayn con un beso en la mejilla y él, con una mirada, le dió a entender a Niall que la presentara.
—Hola chicos —dijo Niall sonriendo— les presento a Lindsay, viene de Brasil, y es mi novia.
A todos nos tomó por sorpresa la noticia, Niall nunca nos habló de ninguna chica y de una semana para otra, nos presenta a su novia.
En realidad fué una muy grata sorpresa, ella era muy hermosa y hacía una linda pareja con Niall, además de que parecía tan agradable y risueña como él.
Tardamos en reaccionar, teníamos la boca abierta. La chica me agradó de inmediato, rogaba al cielo porque también hablara español, ya tendría una compañía que me haría sentir un poco más cerca de casa.
Lindsay pasó a la sala donde nos encontrábamos todos, junto con Niall y nos saludó de beso a cada uno con un amistoso "Hi". Yo le sonreí y le contesté el saludo en español, ella de inmediato sonrió más y se sentó a mi lado. Ambas comenzamos a charlar en nuestro idioma, sin importar que nadie nos entendiera.
A Niall le dió mucho gusto que nos lleváramos tan bien de inmediato, y yo estaba segura de que seríamos muy buenas amigas.
[...]
Salí del salón de salsa, dando gracias al cielo porque hubiese terminado mi jornada en la academia de baile. No había algo en el mundo que adorase más que bailar, pero este día había sido muy pesado. Faltaba una semana para el show con Justin Bieber en los premios MTV y para que Harry se fuese de gira por 6 meses y 3 meses para que yo regresara a México. Tenía muchas cosas en la cabeza, no queria que Harold se fuera.
Estaba más agotada sentimental, que físicamente.
Tomé una ducha y me arreglé desganada; tomé mi bolso y me dirigí hacia la salida.
Hoy Dani no había podido venir conmigo, así que tomaría el camión para llegar a su casa.
El transporte británico era mucho mejor que el mexicano; al menos había podido maquillarme tranquilamente sin casi perder un ojo. Hice 20 minutos de camino que se pasaron como si hubiesen sido 20 horas.
Finalmente, bajé del autobús y saqué las llaves de la casa de Dani, me había dado una copia.
Al abrir la puerta lo último que imaginaría encontrar en casa sería una sorpresa tan grata como la que apareció ante mis ojos en ese momento. Globos, decoraciones, letreros, bocadillos, regalos y un enorme pastel de crema de chocolate. Todos estaban allí: Dani, Liam, Louis, Eleanour, Zayn, Niall, Lindsay y Harry. Lo primero que escuché fué un "Surprise! Happy Birthday, ___(tn)!" Con tantas cosas en mi cabeza, había olvidado que hoy era mi cumpleaños. En México, los 15 años son una etapa muy importante en la vida de una mujer, para mí sólo era un día más de baile.
No supe como reaccionar, creo que quedé boquiabierta unos treinta segundos, hasta que Harry se acercó a abrazarme y plantarme un beso en la boca, con un ramo de rosas en la mano.
—Dios, esto es hermoso chicos, gracias de verdad. —No podía ni hablar, estaba totalmete abrumada—
Pasé un día excelente en compañía de todos, también habían llegado mis compañeros mexicanos de Intercambio y otros cuantos amigos de la academia.
Bailamos, charlamos, reímos, bebimos un poco y nos divertimos mucho. La fiesta se hizo bastante larga y los chicos ya estaban borrachos. Eran las 10 pm y ya nadie estaba consciente. Yo sólo había tomado un par de cervezas, así que todo estaba claro en mi mente.
Harry se acercó a mí y me llevó al jardín tomada del brazo. No dijimos nada, sólo queríamos estar solos.
Me abrazó fuertemente y yo apoyé mi cabeza en su hombro, escondiendo allí mi rostro y oliendo su cuello. Su aroma era delicioso.
Hacía frío afuera, así que Harry me puso su chaqueta. Nos acostamos en el pasto, viendo al cielo y permanecimos allí unas cuántas horas. En realidad no supe cuántas; enseguida caí en un profundo sueño.
