[Lauren POV]
Bloqueé mi móvil antes de suspirar y sonreír al ver mi hijo tan distraído jugando con una pelota y hablando como si estuviese en un verdadero partido.
—Pasa la pelota, remata y.. ¡Gol! —Reí por lo bajo por lo gracioso que se veía.
Sin duda pasar tanto tiempo con su tio Louis, su padrino Liam y su madre lo habían totalmente convertido en un mini jugador de fútbol. Recuerdo lo feliz que se veía cuando le regalaron la camiseta de su equipo favorito: Manchester City. Apagué la televisión y fui directa a la cocina para preparar algo de café. El timbre hizo retumbar toda la casa y corrí hacía la puerta. Mi sonrisa se disipó para dejar sitió a mi mueca de confusión. Camila estaba con una amplia sonrisa mirándome mientras Louis acunaba un bebé entre sus brazos.
—¿Quién.. —No pude acabar mi pregunta ya que Camila entro con el carrito del bebé en la casa.
—Te explicó rápido. Hace un par de meses después de un concierto alocado en Madrid Louis tuvo relaciones sexuales con una mujer y se quedó preñada. Este es el resultado: Freddie Tomlinson. —Explicó Camila antes de acabar señalando al pequeño que estaba muerto de sueño bostezando entre los brazos de su padre.
—¿Y Harry? —Pregunté dejándolos entrar antes de cerrar la puerta.
—Ese es el favor que te quería pedir. —Dijo Camila con una fina sonrisa más parecido a una mueca de súplica que me hizo gracia. —Harry sabe la noticia del bebé pero.. No esta preparado para esto. Se ha dado un tiempo con Louis y.. Bueno, pensé que..
—Claro. Quédate tanto como quieras Louis, tú y Freddie son bienvenidos. —Contesté enseguida sin dejar acabar su frase a Camila quién sonreía ampliamente.
—Muchas gracias, Lauren, no sabes cuanto te lo agradezco. —Sonreí de vuelta y después me giré hacia Camila.
—¿Que haréis después de la boda de Ariana? Cuando volvamos.
—Como mucho unos días más tarde tendré las llaves de mi casa, así que Louis y Freddie se vendrán conmigo.
—Vale. Eso días también te puedes quedar aquí, después de todo sigue siendo tu casa. —Dije y después de unos segundos de confusión la vi sonreír.
—¡Mami! —Grito Liam antes de saltar en los brazos de Camila para dejarle un beso sonoro en la mejilla. —Tío Louis también ha venido, ¿jugamos al fútbol?
—Cariño, intenta no gritar demasiado, tío Louis esta durmiendo al bebé. —Expliqué.
—¿Tío Louis tiene un bebé?
—Si, es papá. —Sonrió Camila.
—¿Y como se llama? ¿Es mi tío bebé?
—No, cariño. —Reí. —Es tu primo, y se llama Freddie.
—¿Puedo cogerlo? —Preguntó mirando el pequeño en los brazos de Louis.
—Freddie necesita dormir un poco, ¿que tal después de su siesta? —Dije acariciando su mejilla, mientras Camila lo acomodaba mejor entre sus brazos.
—Vale. ¿Podemos ir a comer un helado? —Preguntó enseguida cambiando de tema como de camiseta.
—Son las.. Deberíamos comer antes. —Dije y Liam frunció el ceño antes de esconder su rostro en el cuello de Camila, mientras yo acariciaba su espalda. —¿Vamos a comer y después a por un helado?
—¿Podemos comer todos juntos?
—Preguntó y asentí sonriendo haciendo que el también sonriera.—Ir vosotros, yo estoy reventado ya.. —Suspiró Louis sentándose en el sofá haciendo que Freddie empezará a llorar ya que su padre había dejado de caminar.
—Esto es solo el principio, campeón. —Río Camila haciendo que Louis la mirará con odio. —Y cuando volvamos, que la casa esté intacta, ¿entendido? Me costó demasiado decorarla.
—Faltaría menos. —Rió Louis.
FlashBack.
—No. Amo el negro, ¿pero un salón negro? Quien tiene un salón negro, ¿drácula? —Recuerdo haberme quejado cuando vi a Camila traer un bote de pintura negra para el salón.
—Liam escogió. —Dijo levantando los brazos al cielo como si fuera totalmente inocente.
—Liam no tiene ni un año. —Dije levantando una ceja y cruzándome de brazos.
—El negro es un color..
—Negro no.
—Vale.. Sabía que pasaría esto así que.. ¿Beige oscuro?
—¡Perfecto!
—Lo sabía.. —Dijo riendo. Y nos tiramos prácticamente tres meses para ponernos de acuerdo en el color de las paredes, los muebles, y su posición. Pero su resultado rozaba la perfección.
Fin del flashback.
Le acomodé la chaqueta a Liam y los tres salimos de la casa después de despedirnos de un Freddie medio dormido y de un Louis casi exhausto. Nos subimos a mi coche ya que tenia el asiento de Liam instalado. Camila se sentó delante conmigo y cogimos rumbo hacia una pizzería a la que íbamos desde.. Pues desde lo más lejos que recuerdo.
—Así que te mudas aquí.. —Dije empezando un tema de conversación por el incómodo silencio.
—Ajá. —Contestó embobada mirando hacia la ventana, suspire en silencio sin saber si seguir hablando o callarme de una vez. Opté por la primera opción.
—Eso esta bien, para Liam claro.
—Dije y me miro antes de sonreír asintiendo. —¿Y dónde te mudas?—Un último piso, nunca recuerdo como se llaman.. Ya sabes. En el centro, claro, tengo vistas al Big Ben.
—Un penthouse. —Dije enseguida y ella asintió sonriente.
Decidí no seguir hablando y subir uno o dos niveles más la radio en la que sonaba una de las canciones favoritas de Liam, cuando mi hijo se dio cuenta sonrió y empezó a cantar a pleno pulmón haciéndome sonreír. No tardamos demasiado más en llegar a la pizzería. El camarero, Jay, abrió grande los ojos al vernos entrar los tres juntos pero no dijo nada. Tampoco hizo falta, su mirada sobre nosotros lo decía ya todo.
—¡Bienvenidos querida familia favorita! —Dijo haciendo sonreír a Liam. Nos instaló en la misma mesa de la última vez, es decir, de hace más de un año, y pedimos una pizza familiar con un entrante de alitas de pollo y nuestras bebidas.
—¿Puedo ir a jugar? Por favor.
—Preguntó Liam con una carita a la que era básicamente imposible decir que no. Ambas asentimos y salió corriendo hacia la zona infantil.—¿Fuistes a ver a Zayn? —Pregunté después de unos minutos de incomodo silencio.
—¿Por qué?
—Porque puedo defenderme sola.
—Si he ido, no es nada malo. Simplemente pienso que tenía que ponerlo en su sitio, nada más.
—Creó que no está en tu derecho hacerlo.
—Cierto, soy idiota. ¿Por que coño defiendo mi ex-mujer del tío con él que me puso los cuernos? Ya no somos nada como para que me vaya peleando con todos los putos con los que se acuesta. —Dijo dejándome con la boca abierta, totalmente dolida por lo dicho. —Lo siento, me he pasado.
—Dijo con un vago suspiro.—No, no lo sientas. Tienes razón, ya no somos nada, Camila. —Contesté antes de levantarme de la silla.
—Disculpame. —Fue la última palabra que le dediqué antes de irme al baño y poder llorar las lágrimas que me imploraban salir.Y a ese instante supe que Camila no me seguía amando, me odiaba de una manera en la que nunca podía haber pensado y que si hoy estaba aquí, era por y únicamente para Liam.
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Write On Me
FanfictionCada vez que me despido de ti, me muero por dentro y cada vez que me reencuentro contigo, siento que estoy en el cielo. #WriteOnMe Portada de: @EmilyMelissa17 ©2016