Blanco y Negro. (Vondy)

Blanco III.

Canción:  NO VEO LA HORA - NOEL SCHAJRIS 

  "No veo la hora de volverte a ver".  

Las vacaciones eran frescas pero no tenían esa aventura de siempre, Alizbeth creyó que este mes tendría que ponerse a trabajar si quería distraerse, aunque su mama se negaba diciéndole que tienen dinero y no necesita eso, ademas de que la necesitan sus hermanos. Nicole se habia ido de viaje con su familia, por lo tanto no había nadie con quien salir.

Invito a sus hermanos al cine mientras esperan a su madre que vuelva de trabajar. Dejo que ellos escogieran, en eso detrás de ella apareció cierta persona, que no creyó volver a ver a decir verdad.

- Hola, chica del café... ¿como estas? - le pregunta, vio que venia solo, y le pareció sumamente extraño.

- Bien, ¿y tu?, ¿con quien vienes? - lo interrogo pero se arrepintió casi inmediatamente después de formularla.

- Solo, en realidad vengo a ver cual se me antoja - contesto sonriente.

¿Acaso existen personas que van solas al cine?, bueno ella no es una de ellas, ya que Alizbeth adora ir al cine pero con amigos, sola jamas. Tal vez eso aplique en la figura masculina, ¿o es la única que no va sola al cine?.

- Tonterías, entra con nosotros... veremos una cómica, ¿te gustan? - lo invito, no iba a permitir perder la oportunidad, aunque traiga consigo 2 chaperones.

- claro, yo encantado de acompañarlos... pero si me dejan invitar las palomitas - ofreció Imauri sin perder la sonrisa.

- ¡si!, pero acarameladas - pidió su hermano menor, y al instante Alizbeth le puso una mano encima del hombro para que no siguiera, terminaría por pedir la mitad de la tienda.

Entraron los cuatro, con dos bolsas de palomitas, unas acarameladas y otras de mantequilla, Manuel su hermano menor se la paso interrogando a Imauri y haciéndole platica de la película, ella los observa haber hasta donde llega la paciencia de ese joven, pero Imauri atendió a todo lo que le platica Manuel.

- ¿Por que lo ve así? - cuestiona el niño.

- Ese brillo indica que esta enamorado - le contesta Imauri hablando en voz baja para que las demás personas no se molesten.

- ¡Guacala!... ¿tu haz estado enamorado? -

- Manu, pon atención a la peli o no te vuelvo a traer - regaña la hermana mayor. Manuel mejor se queda callado.

Sin embargo a los minutos el niño le susurro algo al oído... algo como: "mi hermana necesita enamorarse, así no me regañaría tanto". Imauri soltó una carcajada. Alizbeth con solo verlo también sonrió, no sabe por que pero su sonrisa siempre la contagia.

Nuvia le tomo del brazo para atraer su atención.

- Es guapo, deberías salir con el - susurro con complicidad.

- Aquí estamos no - se salio por la tangente.

- Ya sabes a que me refiero - dice su hermana con una sonrisa picara.

Alizbeth volvió su rostro hacia ese joven, es guapo si, pero a ella no le importa eso... le llama la atención su manera de ser y sus ojos, que expresan mas allá de lo que ella pueda apreciar. En eso Imauri voltea con ella, y chocan las miradas logrando que ella se ponga tan roja como un tomate, el sonrió al ver el semblante que puso. Termino la película.

- Me gusto, ¿vemos otra? - sugiere Manuel entusiasmado.

- Otro día sera - anuncio su hermana mayor tomándole de la mano.

- ¿Y nos acompañaras? - dirigiéndose a Imauri quien volteo con Alizbeth.

- Desde luego - responde viendo a Alizbeth.

Los acompaño hasta la casa, Manuel se fue corriendo en busca de su madre para contarle la película, mientras Nuvia lo siguió para no hacer mal tercio. Así que ambos se quedaron solos.

- Y, ¿que has hecho en estas vacaciones? - había pasado una semana que no la había visto y sigue estando igual de hermosa.

- Nada, Nicole se fue de viaje, Marina también y Karla tiene familia de visita - contesto mordiéndose el labio inferior.

- En ese caso... yo ando igual, ¿gustas que te haga yo compañía?, no muerdo - vacilo simpáticamente.

Esa idea le pareció estupenda, ademas de que no se aburriría le fascina pasar mas tiempo con el, conocerse y Dios dirá que pasa.

- Si, me gustaría - contesto tratando de parecer casual y que el no notara su felicidad.

- ¿me pasas tu teléfono? y yo te doy el mio - propuso sacando su celular. Ella lo imito, ambos tomaron el celular del otro y registraron ambos números.

Se despidieron de beso en la mejilla, prometiendo que se verían próximamente.