Estaba cometiendo el peor error de mi vida, tu, yo y todos lo sabían con solo el hecho de vernos juntos la mayoría de días.
Fuiste la noche más corta y larga de mi vida y desde ese choque sabia que me estaba perdiendo entre tus brazos, voluntariamente, con gusto de hacerlo, con deseo de morir ahogada por tu aliento.Estaba lista para vender hasta el alma, por noches como esa noche, que sentí el fuego en mi cuerpo, que sentí como si mis pulmones no estuvieran corroídos por el humo del cigarro, como si mi corazón no hubiera sido averiado.
Nos íbamos a dar todo, pero ninguno de los dos era o tenia algo.