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Consulto el brazalete para llegar a la sala de entrenamiento. No está muy lejos de aquí.

- ¿No deberíais estar en la sala de entrenamiento? - una mujer se acerca a nosotras

- La estamos buscando

- Ya veo.... - se aleja en dirección contraria - buena suerte

- Ni siquera nos dice dónde está - susurra Nina - que "gran ayuda"

Empezamos a caminar hasta llegar a una especie de ascensor.

- ¿Se supone que para llegar a la sala de entrenamiento hay que usar ascensor? - pregunta Yona cruzándose de brazos

- Según el mapa, sí

Las puertas se abren y entramos. El ascensor comieza a bajar a una velocidad de vértigo y se para unos segundos después.

Estamos en una habitación enorme llena de armas, sacos de boxeo y mucho más.

Los chicos ya está allí, cada uno con un arma diferente. Martina observa sus movimientos y los corrige. El único que no hace nada es el extraño que no muestra su rostro. Está apoyado en una esquina con los brazos cruzados.

- ¡Por fin llegáis! - Martina nos muestra una pared llena de armas de todo tipo - luego practicaréis con el arma que queráis. Antes vamos a ver vuestra fuerza....

Atrapada en el tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora