**Narra Cloe**
Ya había pasado una semana desde que mis padres confirmaron su visita y aún faltaban pocos días para su llegada. La ansiedad me consumía mientras intentaba encontrar las palabras adecuadas para explicarles lo que había ocurrido: mi embarazo con Zak y la trágica pérdida del bebé.
**Zak:** Amor, tenemos que aprovechar esta última semana antes de que lleguen tus padres.
**Cloe:** Sí, tienes razón. Necesito distraerme un poco.
**Zak:** ¿Qué te parece si vamos al parque de diversiones?
**Cloe:** ¡Perfecto! Será una buena forma de desconectar.
Llegamos al parque y Zak, como siempre, irradiaba entusiasmo. Su propuesta de subir a la montaña rusa me tomó por sorpresa, pero accedí de inmediato.
**Zak:** ¿Alguna vez has subido a una montaña rusa?
**Cloe:** No, nunca. Pero contigo a mi lado, estoy lista para cualquier cosa.
**Zak:** Así me gusta escuchar.
Subimos juntos, y justo antes de la gran caída, Zak tomó mi mano para tranquilizarme.
**Cloe:** Contigo a mi lado, me siento segura.
**Zak:** Te amo.
**Cloe:** Yo también te amo.
Al día siguiente, mientras viajaba en taxi hacia la casa de mi amiga Fenzy, un tráiler chocó violentamente contra nosotros, haciendo que todo se volviera negro.
---
**Narra Cloe**
Desperté en el hospital, rodeada por el olor familiar de los hospitales y las voces preocupadas de mis seres queridos. Aunque todo era confuso, los rostros sombríos de mis padres y Zak me indicaron que algo grave había ocurrido.
**Padre de Cloe:** Hija, Zak nos ha contado todo. Aceptamos vuestra relación.
**Cloe:** Gracias, pero entonces, ¿por qué están así?
El silencio se hizo incómodo hasta que Zak rompió a llorar desconsoladamente.
**Zak:** Per... perdimos al bebé. *Sus palabras apenas eran audibles entre sollozos.*
**Cloe:** ¡Qué! No puede ser... *Las lágrimas comenzaron a brotar sin control.*
**Zak:** Lo siento tanto, Cloe. No sé qué decir...
**Cloe:** ¿Por qué no fui yo? Él no tenía la culpa. *La culpa y el dolor se mezclaban en mi voz.*
En ese momento, el doctor entró en la habitación y la seriedad en su expresión no presagiaba nada bueno.
**Doctor:** Cloe, tendrás que venir cada tres semanas para revisar tu matriz. El accidente ha causado un daño significativo.
**Cloe:** ¿Cómo puede ser esto real? Mi vida se está desmoronando... *Mi voz temblaba con la incredulidad y el dolor.*
**Zak:** Cloe, no es tu culpa. Nunca lo será. Estamos juntos en esto, ¿de acuerdo?
**Cloe:** Será difícil... No sé si podré soportarlo...
**Todos:** Estamos aquí para ti, Cloe. Lo superaremos juntos.
**Cloe:** Está bien... *Mis palabras se mezclaban con sollozos mientras luchaba por aceptar la nueva realidad.*
---
La vida había dado un giro inesperado y doloroso. Las semanas siguientes se convirtieron en un torbellino de emociones, citas médicas y el difícil proceso de duelo. Con el apoyo incondicional de Zak y mis padres, poco a poco fui encontrando la fuerza para seguir adelante, aunque el dolor seguía latente en mi corazón.
El amor de Zak se convirtió en mi ancla, recordándome que no estaba sola en esta lucha. Cada visita al hospital era un recordatorio tangible de lo frágil que puede ser la vida, pero también de la fortaleza que podemos encontrar en los lazos que nos unen.
Con el tiempo, aprendí a aceptar lo que no podía cambiar y a valorar cada momento de felicidad que la vida decidiera regalarme. Aunque el dolor nunca desapareció por completo, aprendí a vivir con él, sabiendo que el amor y el apoyo de aquellos que me rodeaban eran más fuertes que cualquier adversidad.
Y así, paso a paso, día a día, aprendí a reconstruir mi vida sobre los escombros de lo que una vez había sido, con la esperanza de que el mañana trajera consigo un rayo de luz en medio de la oscuridad que había experimentado.
ESTÁS LEYENDO
En tus brazos (ZALOE)
RomansaZak llega a la casa de Cloe para quedarse un tiempo. A medida que pasan los días, ambos se dan cuenta de que sienten algo muy fuerte el uno por el otro. Sin embargo, deberán superar varios obstáculos para poder estar juntos. Lee la historia para des...