Annie Lennox - I Put A Spell On You
10. Placer
La pasión es poco duradera pero intensa, en cambio el amor es muy duradero, pero poco intenso. O bueno ese es un concepto, correcto o no hay que tener en cuenta que la pasión se desvanece rápido. Es un impulso en el que hacemos caso a nuestros instintos y lo único que buscamos es el placer.
El placer puede ser definido como una sensación positiva que experimentamos de forma natural cuando conseguimos satisfacer plenamente alguna necesidad, ojo plenamente, no a medias, no un poco, sino en su totalidad.
Un antiguo filósofo griego llamado Epicuro distinguía dos tipos de placeres. Los placeres del cuerpo y los placeres del alma.
Los placeres del cuerpo los define como poco duraderos y efímeros, placeres que solo conseguirán satisfacernos por un determinado momento. En cambio, los placeres del alma los define como superiores y mucho más duraderos, pero mucho más difíciles de conseguir.
Es así como este filósofo griego llega a la conclusión de que el ser humano puede alcanzar la felicidad, pero para ello debe vivir en continuo placer.
Esta definición está sujeta a cuestionamientos y es por eso que advierte que sobre los placeres necesarios e innecesarios aquellos que de verdad nos provocaran esa satisfacción tan anhelada, pero hace énfasis en la búsqueda del placer y evitar el dolor por lo que manifiesta "la ausencia de turbación y de dolor son placeres estables; en cambio, el goce y la alegría resultan placeres en movimiento por su vivacidad. Cuando decimos entonces, que el placer es un fin, no nos referimos a los placeres de los inmoderados, sino en hallarnos libres de sufrimientos del cuerpo y de turbación del alma"
Al final de cuentas lo que debemos tener en claro es que no hay nada de malo en satisfacernos en dejar que el placer embargue nuestro cuerpo al fin y al cabo es una sensación bastante anhelada ¿Por qué no disfrutarla? Claro siempre y cuando no provoque sufrimiento.
Natalia continuaba hipnotizada observando los ojos de la modelo. Seguían en la misma posición ella entre sus brazos y completamente a merced de lo que pudiera suceder.
Sin dejar de mirarla la modelo se alejó un poco para quitarse la ropa, no podía esperar más.
― No dejes de mirarme ― le pidió mientras se quitaba la última prenda.
Camino despacio hasta que sus cuerpos se encontraron. Los labios de la modelo se posaron en el cuello de la chica y dejo un recorrido de besos en el mientras las manos de Natalia se apoderaban de su cintura.
Sintió su piel erizarse al contacto y continúo disfrutando de la sensación que le brindaba. Podía sentir como sus pechos se unían a los de ella y el calor en su cuerpo aumentaba a cada segundo.
― Tienes el cuerpo perfecto ― murmuro volviendo a conectar sus labios ― lo digo en serio ― jadeaba la modelo.
― Lo dudo, tu eres la modelo aquí.
― Mírate ― le pidió. Ambas estaban completamente desnudas en medio de la sala, la única luz que alumbraba un poco la habitación era la de una pequeña lámpara en la esquina izquierda.
― No, solo bésame ― Natalia no era de las personas que pasan horas observándose al espejo, admirando su cuerpo o buscando imperfecciones.
― No, hazlo, dios desearía que te veas a través de mis ojos ― sonrió.
Años después aquella frase tendría mucho más sentido, Natalia la recordaría en los peores momentos en donde deseaba rendirse y botar la toalla. Mirarse a través de sus ojos, a veces necesitamos saber cómo la persona más importante en tu vida te mira, que percepción tiene de ti, solo así comprenderías que uno debe amarse a sí mismo incondicionalmente antes de permitir que alguien más se apodere de tu corazón.
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Cicatrices Invisibles
Teen Fiction"Las heridas más comunes son las heridas en el corazón, aquellas heridas que nos dejan cicatrices invisibles" #175 en Novela Juvenil 09/01/2017 *SE PROHÍBEN ADAPTACIONES* Twitter: dcimaginegirl